Cada 17 de enero, el mundo rinde homenaje a una de las gastronomías más queridas y reconocidas a nivel internacional: la cocina italiana. Este día no solo celebra los icónicos sabores de la dieta mediterránea, sino que también defiende la autenticidad y la calidad de sus ingredientes.
El Día Internacional de la Cocina Italiana (IDIC, por sus siglas en inglés) nació como una respuesta al creciente problema de la falsificación de platos e ingredientes italianos. Para muchos chefs y productores, esta celebración es un recordatorio de la importancia de respetar las recetas tradicionales y utilizar productos auténticos que lleven consigo el sabor y la historia de Italia.
La fecha elegida, el 17 de enero, coincide con la festividad de San Antonio Abad, patrono de los animales, los agricultores y, por extensión, de los carniceros y charcuteros. Este santo, profundamente vinculado con la agricultura y el trabajo del campo, representa los pilares de la cocina italiana: ingredientes frescos, locales y cuidadosamente elaborados.
La autenticidad italiana en cada plato
Italia, tierra de ricas tradiciones culinarias, destaca por una cocina que combina simplicidad y calidad. Este equilibrio se logra gracias al uso de productos de denominación de origen protegida (DOP) e indicación geográfica protegida (IGP). Ingredientes como el queso Parmigiano Reggiano, los tomates San Marzano y el prosciutto di Parma son ejemplos de esta excelencia.
"Nuestros gustos son sencillos: nos gusta lo mejor", afirma el grupo gastronómico Big Mamma, que trabaja con más de 170 proveedores italianos para garantizar la calidad de cada plato que sirve. Desde la suave mozzarella fior di latte de Latteria Sorrentina hasta la trufa fresca de Team Tartufi en Piamonte, estos ingredientes elevan las recetas a un nivel incomparable.
Italia en la mesa: Platos icónicos para celebrar
El Día Internacional de la Cocina Italiana es la ocasión perfecta para disfrutar de algunos de los platos más emblemáticos de esta cocina. A continuación, repasamos algunas opciones tradicionales que no pueden faltar en tu menú:
Lasagna Tradizionale. Este plato, conocido en todo el mundo, tiene sus raíces en la Roma clásica. Con capas de pasta fresca, carne, verduras y salsa bechamel, es una opción reconfortante ideal para los meses fríos. Aunque existen variantes regionales, la versión tradicional sigue siendo la favorita.
Carpaccio di Vitellone. El carpaccio, originario de Venecia, es un plato que combina la sutileza de la carne de ternera cortada finamente con la intensidad del Parmigiano Reggiano DOP, el aceite de oliva virgen extra y un toque de pimienta. Su sencillez y elegancia lo convierten en un clásico infalible.
Pizza al Parmigiano. La pizza, uno de los símbolos más universales de la cocina italiana, adopta innumerables formas y sabores. Una versión destacada es la pizza al Parmigiano, que resalta la calidad de este queso DOP en cada bocado.
Tiramisú. El tiramisú es el postre italiano por excelencia. Su cremosidad, obtenida del mascarpone auténtico, y la combinación de café, cacao y bizcochos lo convierten en el cierre perfecto para cualquier comida.
La lucha por la autenticidad
Uno de los principales objetivos del IDIC es proteger el derecho de los consumidores a disfrutar de comida italiana verdadera. Esto incluye el uso de ingredientes originales y el respeto por las recetas tradicionales. Aunque la creatividad en la cocina es bienvenida, esta celebración busca establecer principios que garanticen la preservación de la identidad culinaria italiana.
En palabras de los organizadores, "No estamos en contra de la innovación, pero sí creemos en la importancia de salvaguardar el carácter único de nuestros platos". Es por ello que durante esta jornada, restaurantes y chefs de todo el mundo ofrecen degustaciones y menús especiales que resaltan los sabores genuinos de Italia.
Para asegurar la autenticidad de sus productos, muchas empresas y restaurantes italianos realizan viajes regulares por las regiones de Italia. Por ejemplo, La Tagliatella destaca por su compromiso con la calidad, elaborando su propia pasta con trigo de La Puglia y colaborando con pequeños productores locales.
Además, eventos como las ferias gastronómicas y las "Edizione" permiten descubrir nuevas recetas y productos que mantienen viva la tradición culinaria italiana. Estas iniciativas no solo fomentan la calidad, sino que también promueven la sostenibilidad y el apoyo a las comunidades locales.
Celebrando el día en casa o en restaurantes
Si quieres unirte a la celebración, puedes optar por preparar platos italianos en casa utilizando ingredientes originales o visitar restaurantes que se destaquen por su autenticidad. En Madrid, Bresca es un excelente ejemplo de un restaurante que combina tradición e innovación. Con una carta que incluye desde pastas frescas hasta postres tradicionales, Bresca ofrece una experiencia culinaria que transporta a sus comensales al corazón de Italia.
Por otro lado, si prefieres una experiencia más personalizada, considera organizar una cena temática en casa. Con ingredientes como aceite de oliva virgen extra, albahaca fresca y quesos DOP, puedes recrear el auténtico sabor italiano en tu propia cocina.
El Día Internacional de la Cocina Italiana es mucho más que una excusa para disfrutar de una buena comida. Es un recordatorio de la importancia de proteger nuestras tradiciones y de valorar la labor de los productores y chefs que trabajan incansablemente para mantener viva la esencia de esta cocina.