El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a recurrir al Falcon para asistir a un mitin del PSOE, esta vez, en Vitoria. Instantes antes, el dirigente socialista había participado en un acto gubernamental en la misma región. La oposición lleva más de un año criticando que Moncloa y Ferraz hagan coincidir sus agendas para que Sánchez pueda 'aprovecharse' de la aeronave militar en actos de su partido.
Según la plataforma FlightAware, que registra la actividad aérea, a las 9:05 horas de este sábado ha despegado un avión desde la base aérea de Torrejón de Ardoz. Después de 39 minutos de vuelo, el aeroplano ha aterrizado en el aeropuerto de Vitoria a las 9:44 horas. FlightAware no identifica el modelo del avión, pero sí lo denomina como 'Lince01'. Según la agenda de Moncloa, el líder del Ejecutivo tenía programada una visita en Miñano (Vitoria) a la planta de la empresa CTLpack, en el Parque Tecnológico de Álava.
Desde ahí, el presidente se ha trasladado, según la agenda del PSOE, a un acto político de los socialistas en el Frontón Lakua, donde ha estado acompañado por el secretario general del PSE-EE PSOE y portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Parlamento Vasco, Eneko Andueza.
La polémica sobre el uso del Falcon no es nueva. Se criticó durante el segundo mandato de Aznar, los de Zapatero y los de Rajoy, pero la presión de la oposición para fiscalizar su uso se ha intensificado en los últimos años por la polémica utilización de la aeronave por parte del presidente Sánchez. Lo que se cuestiona no es que el dirigente lo utilice para acudir a actos gubernamentales, sino que también aproveche la ocasión para asistir a mítines de su partido.
Básicamente, la polémica estrategia consiste en que Moncloa y Ferraz cuadren sus agendas el mismo día para que el presidente pueda acudir en la misma provincia a un acto institucional y, justo después, a un mitin del PSOE. Lo habitual en estos casos es que un helicóptero, AS 332 Super Puma, gestionado por el 402 Escuadrón del Ejército del Aire, recoja en Moncloa al presidente y a su equipo y los traslade a la base aérea de Torrejón de Ardoz, donde les espera el Dassault Falcon 900B del Grupo 45 de las Fuerzas Aéreas.
Pese a la controversia en torno al uso del Falcon, no existe ninguna ley en España que regule para qué tipos de viajes de altos cargos deben emplearse las aeronaves. En la práctica, estas aeronaves militares se utilizan para transportar a las autoridades. En verano, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, prometió poner coto al polémico uso de la aeronave si llega a la presidencia del Gobierno. El dirigente popular se comprometió a no utilizar el avión oficial para asistir a actos políticos de su partido. Avanzó, además, que sus ministros tendrán que seguir un protocolo que delimite su utilización.
También la vicepresidenta tercera para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, se pronunció al respecto hace casi un mes y aseguró que el Gobierno estaba comprometido a usar el Falcon "siempre que no haya opción".
