Sánchez se cita con Lambán para calmar al PSOE tras la foto de la mesa independentista

Pedro Sánchez ha pagado el precio de los Presupuestos Generales del Estado con su presencia en la mesa separatista en Barcelona. El encuentro con ERC no es plato de gusto para buena parte del PSOE. El presidente del Gobierno ha decidido pasar página lo más rápido posible con la intención de calmar a sus líderes territoriales las cesiones que se negocian con Cataluña. Y ha elegido una reunión con el presidente de Aragón, el socialista Javier Lambán, como primera cita tras la mesa de diálogo.

No es una foto cualquiera. Lambán es uno de los barones del PSOE más reacios a la participación del partido en este foro. Y colecciona declaraciones críticas contra los partidos independentistas. Sánchez se desplazará a Zaragoza para entrevistarse con el presidente aragonés. La agenda, además, está centrada en un asunto que afecta a Aragón pero también a Cataluña. Se trata de la candidatura para albergar los Juegos Olímpicos de invierno en 2030.

Se trata de una supuesta candidatura de las dos comunidades. Pero Lambán amenazó con retirarse del proyecto si llevaba el nombre Barcelona Pirineos 2030, tal y como la presentó Sánchez tras reunirse con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, antes del verano. Lambán dijo que Aragón solo se sumará a este proyecto olímpico si participa en pie de igualdad con Cataluña. "Seguro que podremos hacer un proyecto en el que todos nos sintamos cómodos", aseguró.

El primer gran obstáculo es el nombre. Lambán ha reclamado un nombre más integrador. Y es probable que ambos aborden ese cambio con el que Aragón se sienta más cómodo. Presidencia está llevando directamente las gestiones para organizar estos Juegos. España nunca ha organizado unas olimpiadas de invierno. De todo ello, hablarán Sánchez y Lambán en la declaración institucional que tienen previsto realizar.

El jefe del Ejecutivo ha cumplido este miércoles en Barcelona con una de las principales demandas de ERC para apoyar los Presupuestos. Sánchez se ha sentado en la mesa de diálogo solo con los consejeros republicanos tras la espantada del partido de Carles Puigdemont.

Sánchez ha constatado que las posiciones entre el Gobierno y la Generalitat "están aún muy lejos". El presidente ha confiado en que este foro sirva para reconciliar a españoles y catalanes. "No vamos a resolver una crisis de diez año inmediatamente", ha dicho en rueda de prensa tras entrevistarse con Aragonés.

Aragonés: autodeterminación

Por su parte, el presidente catalán ha insistido en sus demandas de amnistía y la autodeterminación de Cataluña para desencallar el problema. Aragonés ha dicho que la mesa de diálogo entre gobiernos es el instrumento para solventar el conflicto político en Cataluña y, como asume que será una tarea complicada, no le pone plazos aunque tendrá "reuniones periódicas y discretas".

Sánchez y Aragonés acordaron tras los indultos a los presos separatistas no darse un plazo de negociación. Ambos Gobiernos acordaron reactivar las comisión mixtas Estado-Generalitat para abordar nuevos traspasos de competencias a la comunidad catalana. El Gobierno central sostiene que el referéndum no es la solución y que el límite del diálogo es la Constitución.