Publicado: 19/03/2019 05:15
El fichaje de cuatro generales retirados del Ejército para las próximas elecciones deja patente la apuesta de Vox por atraer el voto en el campo de las Fuerzas Armadas y de las Fuerzas de Seguridad del Estado. El partido de Santiago Abascal daba este lunes un golpe de efecto con la incorporación de los cuatro militares de alto rango a sus filas para atraer a un electorado formado por 132.000 efectivos.
Al margen de eso, la formación mantendrá en su programa para las generales del 28 de abril la propuesta de elevar hasta el 2% del PIB la inversión en Defensa comprometida con la OTAN, según fuentes de la dirección del partido consultadas.
Precisamente, el último informe anual de la Alianza Atlántica publicado la semana pasada ponía de manifiesto que España mantiene un gasto militar mucho más bajo que el del resto de socios. Es, junto a Bélgica y sólo por delante de Luxemburgo, el segundo país que menos dinero destina a este efecto; concretamente, el 0,93 por ciento del PIB en 2018.
Todos los socios se comprometieron en la cumbre de Gales de 2014 a invertir al menos el 2 por ciento del producto interior bruto para el año 2024 y que incluso al actual presidente norteamericano Donald Trump le parece insuficiente. Estados Unidos destina un 3,39% frente al 1,55 por ciento del PIB que dedican de media los aliados. Otras seis naciones cumplen con el compromiso o incluso lo sobrepasan: Grecia (2,22%), Reino Unido (2,15%), Estonia (2,07%), Polonia (2,05%), Letonia (2,03%) y Lituania (2%).
En su programa de 2016, Vox incluía varias medidas para "asegurar la capacidad operativa de las FAS y su financiación". "Se dotará a las FAS de medios terrestres, navales y aéreos con la suficiente capacidad disuasoria en todos y cada uno de los escenarios posibles de conflicto, tanto en el ámbito conjunto nacional, como el combinado internacional. La disuasión creíble y determinante, con posibilidad real de respuesta inmediata, materializando la firme voluntad nacional, de la mano de los gobernantes de España, de responder a cualquier agresión", rezaba uno de los puntos.
Además, defendía el apoyo a la industria de Defensa "como parte de la industria nacional teniendo presente que ésta aporta alrededor del 0,9% del PIB, y origina retornos de importancia a la sociedad en forma de I+D+i, además de puestos de trabajo directos e indirectos" y un organismo específico para la coordinación de las necesidades de la defensa y la industria.
También proponían potenciar las capacidades del Estado Mayor de la Defensa (EMAD) y mejorar la "eficiencia" en la gestión del Ministerio de Defensa. "Deberá establecerse, de forma inmediata, un órgano central más profesionalizado con una mayor cobertura por personal militar de carrera evitando la proliferación de aquél procedente de la política", exponía el programa.
También hablaban de "retomar con la máxima intensidad y determinación, desde el punto de vista defensivo y estratégico, todas las acciones precisas, en colaboración con otros ministerios, para la definitiva entrega de Gibraltar".
que la defensa nacional es responsabilidad de todos y cada uno de los españoles y planteaba regular por Ley "que la exaltación del patriotismo sea objeto de enseñanza general desde los principios de ésta". También defendía desarrollar una norma que regule "la participación activa de los ciudadanos en la Defensa", con especial atención a una ley de la reserva.
También abogaba por hacer más duraderas las leyes relativas al personal militar, centrándose en las "correcciones que realmente sean precisas, evitando fluctuaciones legales que tanto daño han hecho en las expectativas, ilusiones y esperanzas de los componentes de las FAS".
21. La potenciación y recuperación de los valores, virtudes y cualidades castrenses
será objeto de la máxima prioridad de la política de personal del departamento,
como base insustituible para la Defensa y Libertad de la Nación Española.
2.4. Asegurar la capacidad operativa de las FAS y su financiación
22. Se dotará a las FAS de medios terrestres, navales y aéreos con la suficiente
capacidad disuasoria en todos y cada uno de los escenarios posibles de conflicto,
tanto en el ámbito conjunto nacional, como el combinado internacional. La
disuasión creíble y determinante, con posibilidad real de respuesta inmediata,
materializando la firme voluntad nacional, de la mano de los gobernantes de
España, de responder a cualquier agresión.
23. Unas fuerzas terrestres, navales y aéreas que respondan a las necesidades
nacionales y con elevada capacidad de actuación conjunta nacional y combinada
internacional.
24. Se establecerá por ley que la inversión y modernización de las FAS sean objeto
de un marco plurianual de dotaciones presupuestarias.
25. Se constituirá un organismo específico para la coordinación de las necesidades de
la defensa y la industria.
26. A medida que la situación económica lo permita, se propondrá converger el
presupuesto de defensa hasta el 2% fijado como deseable por la OTAN.
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2.5. Un planteamiento de la defensa coherente, transparente en la medida de lo
posible y exigente con nuestros socios, aliados y potencias amigas
28. Como parte imprescindible de la OTAN y a la UE se prestará atención especial a
los riesgos derivados de la proliferación nuclear, el debilitamiento de los
Estados, el crimen organizado, los conflictos regionales, la vulnerabilidad del
espacio marítimo, hecho que afecta no sólo al mar territorial y Zona Económica
exclusiva sino también a las líneas de comunicaciones marítimas y por supuesto a
las ciberamenazas con especial atención en estos momentos, a los derivados de la
inmigración irregular y desde luego a la amenaza terrorista islámica.
29. Se exigirá, con la máxima intensidad la desaparición de la Amenaza No
Compartida con España por la Alianza Atlántica, es decir, el abandono de la
España y los españoles ubicados en el litoral norte de África.
30. Se exigirá el reconocimiento de nuestro idioma, el Español o Castellano, en las
alianzas internacionales, en las que se encuentra desplazado y despreciado.
31. Se retomarán con la máxima intensidad y determinación, desde el punto de vista
defensivo y estratégico, todas las acciones precisas, en colaboración con otros
ministerios, para la definitiva entrega de nuestro territorio de soberanía
Española de Gibraltar
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