Tania Sánchez disuadió a Errejón de incluir la gestación subrogada en el programa de Más País

El nuevo partido de Íñigo Errejón afronta otro tenso debate interno después del enfrentamiento entre Tania Sánchez y Clara Serra, desvelado por este diario. Esta vez la polémica atañe a la gestación subrogada, que algunos en la formación llaman “vientres de alquiler”. Errejón planteó abrir el debate e incluir una propuesta de regulación en el programa electoral de Más País, pero ha recibido una rotunda negativa del sector más izquierdista y feminista, liderado por Tania Sánchez, que no está dispuesta a ceder en los temas éticos por razones electorales. Errejón también planteó el mismo debate en Podemos en 2017.   

"Tania le dijo que no se atreviera", afirman fuentes de Más País a Vozpópuli. Para Tania Sánchez, así como para otras feministas de la formación, abrir el debate sobre la gestación subrogada favorecería a Podemos, que tiene una posición de duro rechazo contra la medida. Una suma negativa con respecto a la intención de Errejón, que como otros dirigentes cree que el asunto puede tener cierto tirón electoral en el colectivo LGTBI.

Electoralismo y tema ético

El tema de la gestión subrogada, es decir, la práctica por la que una mujer acepta por dinero quedarse embarazada, llevar la gestación a término y dar a luz a un niño, todo ello para otra persona o pareja, es para muchos partidarios de Más País una cuestión de explotación de la mujer.

El enfrentamiento sobre ese tema ético revela que, más allá de la medida, en el partido de Errejón se van delineando dos maneras de entender la formación turquesa. Por un lado se encuentran los pragmáticos, que buscan cómo obtener más votos cómo sea, y por el otro los izquierdistas, que rechazan dar ese paso.

El debate sobre la gestación subrogada se fraguó en estos últimos días, en un momento de definición del programa electoral de Más País, que todavía se tiene que oficializar. El partido de Errejón todavía no tiene una fecha programada para difundir ese documento, y tanto el candidato como Rita Maestre afirmaron en sus últimas entrevistas que lo están "elaborando".

Más mujeres en las listas

Más País es un partido que en su fecha fundacional (el pasado 26 de septiembre) se autodefinió feminista, ecologista y progresista. Quiere una presencia mayoritaria de mujeres en sus listas electorales, y abordar un plan contra el cambio climático que llamarán Green New Deal, recogiendo parte de la retórica de la estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez.

En cuanto a su alma progresista, se espera que Errejón oficialice su programa electoral para juzgarlo. El pasado lunes, la dirección de Podemos pasó al ataque y pidió a Más País aclarar, por ejemplo, si piensan apoyar el impuesto a la banca que los morados plantean para recuperar los 64.000 millones de euros pagados para el rescate de las entidades financieras en 2008.

En los ambientes de Podemos existe mucho malestar por la candidatura de Errejón. Por un lado, por el golpe que el ex 'número dos' dio sin avisar en el pasado mes de enero, cuando se sumó a la plataforma de Manuela Carmena. Y por el otro porque creen que su programa será otro "corta y pega" del plan de los morados. Así ocurrió, en su opinión, en las últimas elecciones autonómicas en las que Errejón casi triplicó los votos de Isa Serra.

Solo Ciudadanos a favor

Hay que señalar que la apuesta de Errejón por abrir el debate sobre la gestación subrogada no es nueva. En febrero de 2017, poco antes del congreso de Vistalegre II, Errejón ya dijo que "no veía mal a priori" la gestación subrogada. Aunque incidió en que había que discutir mejor los controles para su regulación.

Errejón sostuvo que se trataba de un "tema complicadísimo" que supone conciliar el "derecho a la reproducción" con el riesgo de "mercantilizar los vientres" de mujeres, según recogió Europa Press tras una entrevista en La Cadena Ser. Sin embargo, en la dura pelea con Podemos, otros dirigentes de Más País han alertado de que asumir ahora ese debate podría convertirse en un peligroso patinazo. Hasta ahora solo Ciudadanos ha calificado esa práctica de "altruista y garantista", mientras que Irene Montero de Podemos la tachó de "mercantilización del cuerpo de la mujer".