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Política

Pepu Hernández se disputará con Manuel de la Rocha la candidatura del PSOE a la Alcaldía de Madrid

Pedro Sánchez y Pepu Hernández en una imagen de archivo

La organización madrileña del PSOE, el PSM, es hoy una organización en estado de shock tras conocer que Pedro Sánchez quiere que el ex seleccionador español de baloncesto Pepu Hernández, campeón del mundo en 2006, sea el candidato a la Alcaldía de Madrid en las elecciones del 26 de mayo. La última palabra la tendrán los, aproximadamente, 6.000 militantes que tiene esa federación, convocados el 9 de marzo a elegir cartel electoral entre él y el histórico dirigente de la corriente Izquierda Socialista  Manuel de la Rocha (71) 

Más allá de su afinidad personal y biográfica con el presidente del Gobierno, a Pepu Hernández no se le conocían inquietudes políticas y su espectacular entrada en la vida pública ha causado estupefacción en las filas socialistas. No obstante, el ex seleccionador está dispuesto a pelear la candidatura y anoche mismo ya tenía perfil ad hoc en Twitter.

Fuentes próximas a De la Rocha, que como el resto de la federación ya daban por hecho que su rival sería finalmente la ministra de Industria, Reyes Maroto, dudaron inicialmente de que Ferraz fuera a permitir a su flamante candidato quemarse en una votación interna de incierto resultado dado el malestar que siempre producen en los partidos los paracaidistas.

Mas bien se inclinaban a pensar que Pedro Sánchez haría lo mismo que en 2015 con Ángel Gabilondo y "con la excusa de que Hernández tampoco es militante", anulara el 9 de marzo. Pero fue el propio De la Rocha quien anunció, al filo de medianoche y poco después de conocerse el deseo de Sánchez -de visita oficial esta semana por República Dominicana y México- quien confirmó que habrá primarias y él se presenta:

La irrupción del ex seleccionador nacional de baloncesto enel PSM viene precedida de un rosario de noes que ha recibido el lider socialista a aceptar una candidatura que más parece un regalo envenenado porque los sondeos sitúan al PSOE en Madrid capital por detrás incluso de Vox.

Antes que él, a lo largo de los dos últimos años Pedro Sánchez lo ha intentado con la presidenta del partido, Cristina Narbona, con la ex portavoz del Grupo Socialista y hoy ministra de Defensa, Margarita Robles; con el hoy titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, cuando era juez de la Audiencia Nacional; con la ex ministra de Vivienda Beatriz Corredor, y hasta con su antecesor en la secretaria general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Todos le dijeron no porque, en el mejor de los casos, el premio es ser teniente de alcalde en un consistorio con Manuela Carmena repitiendo como primer edil, aunque lo más probable es que Más Madrid, la marca de la alcaldesa y el PSOE no sumen y el Grupo Socialista municipal se quede en las raspas porque los últimos sondeos le dan quinta y última fuerza, por detrás incluso de Vox.

Dudas sobre su continuidad 

Lo cierto es que el malestar en la federación socialista madrileña es notorio desde hace bastantes meses. Su secretario general, José Manuel Franco, era partidario de haber iniciado antes el proceso para dar a conocer a un candidato/a al que se presumía poco tirón -él apostó desde un principio por la ministra Maroto pese a las reticencias del presidente-.

Eso ya no va a hacer falta porque Pepu Hernández es un campeón del mundo que en 2006, año de la gesta española en baloncesto, llegó a ser la personalidad más valorada del panorama social -antes de que los seleccionadores de fútbol Luis AragonésVicente del Bosque le arrebataran el puesto en los años siguientes-, pero en el seno del PSOE ha desatado muchas dudas "la enésima operación de marketing que hacemos".

Porque el PSM lleva 30 años fuera del poder tanto en la Comunidad de Madrid como en la capital y a Hernández le va a costar mucho levantar ese quinto puesto que auguran los sondeos. Si no gobierna con Carmena, pocos dudan de que el ex seleccionador se irá al día siguiente, como antes que él hicieron Trinidad Jiménez, Miguel Sebastián y otros, "Y vuelta a empezar", añaden las mismas fuentes con cierto poso de amargura. 

 

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