Unidas Podemos... vivir de lo público. Aquel experimento político, hoy ya disuelto, sigue abasteciendo de recursos públicos a dos de sus máximos exponentes: Irene Montero y Alberto Garzón, que no han necesitado volver a la actividad privada para pagar sus facturas. Son los dos únicos exministros del anterior Ejecutivo que han solicitado sus respectivas pensiones por haber estado al frente de las de Igualdad y Consumo. Ambos se encuentran cobrando el 80% de su salario, lo que supone 5.300 euros mensuales y 63.532 euros al año. Una cantidad notable que seguirán cobrando en los próximos meses pese a la escasa actividad de sus Ministerios en comparación con el resto de carteras.
Una investigación llevada a cabo por Vozpópuli, que ha analizado todas las referencias del Consejo de Ministros de 2023 -desde enero hasta el 21 de noviembre, cuando se conformó el nuevo Gobierno-, demuestra que el Ministerio de Consumo y el Ministerio de Igualdad fueron los que menos actividad tuvieron en Moncloa. Consumo pasó 5 meses sin presentar una sola iniciativa, propuesta, proyecto o dejar cualquier tipo de rúbrica en el Consejo de Ministros. Igualdad, en segunda posición, estuvo 4 meses sin dar señales de vida en las reuniones ministeriales.
Este periódico ha seguido un criterio de lo más laxo para elaborar esta información, pues ha contado como "actividad en el Consejo de Ministros" no solo la presentación de iniciativas legislativas, sino también el nombramiento de nuevos altos cargos, la firma de declaraciones institucionales o la mera solicitud de más fondos al Ministerio de Hacienda.
La dolce vita de Irene Montero y Alberto Garzón
Incluso ante un examen tan sencillo, el Ministerio de Consumo suspende, con 5 meses en blanco en el Consejo de Ministros. De acuerdo con el análisis realizado, Alberto Garzón se presentó con las manos en los bolsillos los meses de febrero, mayo, agosto, septiembre y noviembre. Cuando anunció que abandonaba la primera línea política, renunciando también al cargo de coordinador federal de Izquierda Unida, manifestó que podría pasar más tiempo con su familia, que estos años había sufrido sus "ausencias continuadas".
Lo cierto es que la necesidad de contar con un Ministerio de Consumo -otro más para engrosar el elefantiásico Ejecutivo de Sánchez con 22 Ministerios- ha sido puesta en entredicho desde el primer momento. La mayor prueba de que mucha falta no hacía es que en este nuevo Gobierno de Sánchez ha vuelto a configurarse como dirección general dentro del Ministerio de Derechos Sociales.
Su escasa actividad ha sido criticada por organizaciones como Facua. "Mientras nos dicen que somos el país con más competencia en los supermercados, las principales cadenas suben a la vez el precio de sus marcas blancas de aceite de oliva. El virgen extra, en todas a 9,25€/l. ¿Por qué no hace nada, ministro Alberto Garzón?", señalaba en Twitter Rubén Sánchez, secretario general de esta asociación de consumidores.
Irene Montero, segunda en el ranking, no presentó nada en el Consejo de Ministros a lo largo de cuatro meses: enero, agosto, octubre y noviembre. Montero no tuvo su mejor año el pasado 2023, cuando las críticas arreciaron contra ella por la 'Ley del solo sí es sí', que permitió reducir las condenas de cientos de agresores sexuales. Un escándalo por el que nunca se disculpó. Recientemente, mostró su apoyo público a la actriz Itziar Ituño, que participó en la manifestación en Bilbao para reducir las penas de los presos de ETA.
Podemos -una suerte de Infojobs para Irene Montero- sigue confiando en ella para cosechar un nuevo cargo público; el de eurodiputada, por el pasaría a cobrar 9.975 euros brutos al mes, lo que equivale a 7.776,06 euros netos del erario público. Acceder a Europa le permitiría acceder a otras ventajas como la percepción de 4.778 euros al mes en dietas, 4.716 euros anuales para viajes y un presupuesto de 28.412 euros al mes para la contratación de asesores y servicios necesarios para su trabajo.
Otros Ministerios con meses en blanco
Después de Consumo e Igualdad encontramos al Ministerio de Industria, con dos meses sin actividad en el Consejo de Ministros. En su caso, no registró propuestas ni actividad alguna los meses de agosto y noviembre. Entre estos dos meses se reparten el resto de 'ausencias'. Agosto, mes veraniego por excelencia, tuvo como resultado un desierto de iniciativas por parte del Ministerio de Derechos Sociales y del Ministerio de Educación. En el caso de los dos Consejos de Ministros celebrados en noviembre antes de la formación del nuevo Ejecutivo, no figura ninguna propuesta con la rúbrica del Ministerio de Sanidad ni del Ministerio de Justicia.
