El objetivo del Partido Socialista es "catalanizar el Ibex". La frase, textual de un alto cargo del Govern cercano a Salvador Illa, y que conoce a la perfección los planes de los presidentes de la Generalitat y del Gobierno, la pronunció horas después del nombramiento de Marc Murtra como nuevo presidente de Telefónica.
La operación Murtra, que cogió por sorpresa al tejido empresarial, el pasado sábado por la mañana, llevaba varios meses gestándose. En concreto, según fuentes cercanas a Illa y Pedro Sánchez, desde que el jefe del Ejecutivo diseñó su gabinete ministerial en 2023. Y contó, dicen en el Palau de la Generalitat, con "el beneplácito de Isidre Fainé".
La petición de Illa a Sánchez
En ese momento, y con el recuerdo de lo que ocurrió durante la etapa de Joan Clos y José Montilla al frente del Ministerio de Industria, que coincidió con el ascenso del PSC a la presidencia de la Generalitat, Illa reclamó que un socialista catalán se hiciera cargo de Industria para lograr el objetivo ya cumplido de ser president.
Jordi Hereu, entonces al frente de la empresa pública Hispasat, y anteriormente alcalde de Barcelona, fue el elegido por Sánchez e Illa para pilotar Industria. Aunque se barajaron otros perfiles, como el del presidente de Aena y exportavoz del PSC en el Parlament, Maurici Lucena. Hasta ese momento, junto a Murtra (ex Indra) y alguno más, ambos eran los máximos exponentes catalanes de empresas con sede en la capital en el Ibex.
Desembarco de catalanes en el Ibex
Con el objetivo de catalanizar el Ibex, explican fuentes del PSC, se espera que tras el nombramiento de Murtra como nuevo presidente de Telefónica a lo largo de los próximos meses se produzca un movimiento similar, en alguna de las grandes empresas con participación pública. Es decir, que aterrice alguna otra figura cercana al socialismo catalán en la presidencia de alguna cotizada con sede en Madrid.
Con ello, explican fuentes socialistas, el objetivo es "ayudar a Illa" a que se mantenga en el poder. El apoyo del empresariado catalán, clave para su victoria el pasado mes de mayo, con el mensaje de normalizar las relaciones con el resto del Estado, es primordial para que el proyecto que lidera el primer secretario del PSC pueda perpetuarse durante años.
De hecho, fuentes del entorno de Illa, señalan que nombramientos como el de Murtra o como los que se prevén, cuyos nombres no quieren poner sobre la mesa todavía, se pretende "corregir la infrarepresentación del PSC en el Gobierno". Nombrando altos cargos en "empresas públicas o con participación pública".
En los anteriores mandatos de Sánchez el socialismo catalán contaba con un mínimo de dos ministros y la presidencia del Congreso de los Diputados. Una influencia muy menor que la que ostenta en la actualidad, con solo Hereu al frente del Ministerio de Industria.
Garamendi pide la mínima intervención
Desde la patronal, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha trasladado ya su deseo de que en Telefónica y en todas aquellas compañías donde tenga presencia el Estado en el accionariado se tomen decisiones "desde el área puramente empresarial" y no desde el punto de vista político.
"Lo que es importante, no el Gobierno, sino el Estado. La empresa no es del Gobierno, es de todos los españoles esa participación del Estado. Lo que es importante es que la gobernanza se haga con un planteamiento puramente empresarial", ha subrayado.
En declaraciones a Telecinco y a TVE, Garamendi respondió así al ser preguntado por si compartía la opinión del PP de que el Gobierno "ha colonizado" la operadora con el relevo en la presidencia de Telefónica, que ha pasado a manos del socialista catalán Marc Murtra tras el cese de José María Álvarez-Pallete.