Bandas latinas: la muerte de Jaime y el dominio del territorio, el origen del asesinato de Villaverde

Alejandro P.C. vivía a escasos metros de donde fue brutalmente asesinado. En las últimas semanas ha aumentado la violencia de las bandas en el barrio de Los Ángeles en Villaverde. La Policía Nacional sospecha que este homicidio tiene relación con el de Jaime, un Trinitario de 15 años, que fue asesinado en febrero en Atocha. También otro de los detonantes es el afán de territorialidad que está teniendo esta banda en las últimas semanas, según han confirmado a Vozpópuli fuentes policiales.

El parque de la Amistad es el epicentro de las lucha entre estos dos grupos. Una zona que tradicionalmente ha contado con la presencia de miembros de ambas bandas. "Su principal obsesión es el territorio y conquistar las zonas del otro", explican estas mismas fuentes.

La zona de Puente Alcocer, donde fue asesinado Alejandro, es un lugar donde se asientan los Trinitarios. Desde ahí están intentando expandirse en las últimas fechas. Circunstancia que ha sido frenada por la Policía Nacional que lleva meses cercando sus actuaciones.

A pesar de ello, desde hace una semana se ha materializado la tensión. Los Trinitarios han ampliado su radio de influencia y ya es común verles en lugares que son frecuentados por los DDP. Al sentir esta presión, los Dominican decidieron la semana pasada, el día 20, hacer una 'caída', un ataque programado, contra los Trinitarios que estaban presentes.

Para ello, los pandilleros utilizaron palos, cuchillos y machetes. Dos jóvenes de 19 años resultaron heridos por arma blanca y otro fue atendido por los sanitarios del Samur-Protección Civil con contusiones. Esta reyerta se saldó con dos detenidos, de 16 años, uno español y otro paraguayo.

Iban a por Alejandro

Los Trinitarios que asesinaron este miércoles a Alejandro iban a por él. Fue una venganza. Incluso, antes de la agresión llegaron a mantener una discusión en la que le reprocharon haberla "liado el otro día". Había también chicas en el numeroso grupo, de más de una decena de personas, que le abordó. Le asestaron dos puñaladas en el abdomen y la espalda y le dieron con un cinturón.

El joven, español de 18 años, se escapó para pedir ayuda hasta la calle Alcocer. En la entrada del aparcamiento del Mercadona cayó desplomado. Dos testigos compartieron sus últimos momentos de vida con él mientras intentaban tranquilizarle. Perdió mucha sangre y poco pudieron hacer los sanitarios a su llegada.

Grabaciones y testigos para la Policía

Su padre se desplazó a la escena del crimen. Dijo a los agentes que su hijo había sufrido amenazas y que estaba tonteando con una banda juvenil. Era miembro de los DDP. Cuando los policías acudieron a registrar su casa encontraron información que vinculaba al joven con este grupo.

Fueron muchos los testigos que vieron al grupo atacante correr y huir de la zona. Algunos iban con pasamontañas y no se les podía ver el rostro. Los agentes esperan dar con ellos gracias a los cuchillos que tiraron en los matorrales donde agredieron a Alejandro y también cuentan con la ayuda de las cámaras de seguridad de Mercadona. Precisamente este jueves se personaron varios policías al comercio a pedir las grabaciones.

Andrés, Jaime, Diego y Alejandro

Para resolver este asesinato, la Jefatura Superior de Policía Nacional de Madrid ha formado un equipo de investigación que conforman los agentes del Grupo V de Homicidios y la Brigada Provincial de Información. Pronto podrían dar con los homicidas. Ya se han realizado las primeras gestiones para dar con ellos. Han tomado testimonio al círculo de la víctima y han realizado ya entradas y registros en varias viviendas.

Las declaraciones de los amigos han sido claves para hacer un recorrido de qué ha pasado y cuáles eran las rencillas que mantenía Alejandro y con qué personas. La investigación está avanzada por parte de los agentes. Los propios agentes han descartado que este homicidio esté relacionado con la reyerta de la calle Cifuentes y con el asesinato de Diego en Usera en febrero. No obstante, aún existe la línea de que haya nexo entre esta muerte y la de Jaime, un miembro de 15 años de los Trinitarios, en Atocha en febrero.

Andrés Bustamante, Jaime, Diego y Alejandro. Son los nombres de las cuatro víctimas de las bandas latinas en lo que llevamos de 2022 en la Comunidad de Madrid. El mayor de ellos tenía 25 años, el más pequeño solo 15. Dos eran de la banda de los Dominican Don´t Play (DDP) y dos de los Trinitarios.

En dos de estos homicidios sus responsables ya fueron detenidos por parte de la Policía Nacional. Los asesinos de Jaime y de Alejandro aún están sueltos pero bajo el cerco de los investigadores. No tardarán en caer. El año pasado los agentes detuvieron a los responsables de los dos asesinatos de bandas latinas que se produjeron. Uno de ellos fue el mediático caso de Isaac, el rapero que fue asesinado en un túnel en Pacífico.

Ante la gravedad de esta situación, la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, mantuvo este jueves una reunión con todos los comisarios de Madrid en la Jefatura Superior de Policía Nacional para conocer la magnitud del problema. El punto de inflexión de las bandas latinas en Madrid fue el pasado 5 de enero con el asesinato de Jaime, en Atocha, y de Diego, en Usera.

Ese doble homicidio, llevó a establecer un dispositivo contra las bandas juveniles que incluye a la Policía Nacional y la Guardia Civil en los punto de la región donde se experimenta un repunte de las actuaciones de esos grupos. Desde el 10 de febrero hasta el 26 de abril se han identificado a 35.339 personas, se han practicado 329 detenciones, se han incautado 136 armas y se han realizado 1.200 actas de drogas.

El dispositivo seguirá de forma permanente hasta el final de la violencia de estos grupos. El 40% de sus miembros son menores de edad y cada vez son más jóvenes, según afirmó en un acto Mercedes González. La delegada también subrayó que no se va a incrementar el refuerzo de más de 500 agentes que están trabajando en reforzar la vigilancia sobre estas bandas.

Un duro golpe a la banda

Precisamente, este jueves se conoció que la Policía Local de Torrejón de Ardoz detuvo a Edison A.F., alias 'Copito', uno de los exjefes de los DDP en la localidad. Este hombre tenía una orden de búsqueda, detención y personación del Juzgado número 1 de Arrecife, según informó el Ayuntamiento.

Este joven era uno de los lugartenientes del archiconocido 'Chamaquito', jefe de los DDP en el Corredor del Henares. En este territorio, el líder ha sido arrestado por agresiones, intentos de homicidio incluso por reclutar menores para que robaran. Torrejón de Ardoz fue uno de los municipios madrileños más castigados durante años por las bandas juveniles. Sin embargo, la contundente actuación de la Guardia Civil y la Policía Local han permitido reducir su radio de actuación.