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España

El negocio de las mascarillas en farmacias se dispara: 20 desechables por 90 euros

Facturas de productos adquiridos en farmacias con precios desorbitados

Veinte unidades de mascarillas quirúrgicas desechables, 90 euros. Una sola unidad del modelo FFP2 (con válvula para respirar), hasta 27,95 euros. Estos son algunos de los elevados precios que se están pagando, no en el mercado negro de material sanitario, sino en farmacias de distintos puntos de España tras el brote de coronavirus. “Nosotros hemos renunciado a recibirlas porque nos negamos a vender a esos precios, es estafar a la gente”, dice una farmacéutica en declaraciones a Vozpópuli.

Este periódico ha tenido acceso a varias facturas reales que acreditan el elevado coste de estos productos. Se trata de compras realizadas antes de que el Gobierno anunciara este sábado el reparto de 10 millones de mascarillas gratis a la población en los próximos días. En una farmacia de Madrid cobran 90 euros por 20 unidades de las mascarillas más básicas que sirven para no contagiar, pero apenas son eficaces para protegerse de la enfermedad. 

Hasta 64,75 cuestan cinco mascarillas FFP2 (12,95 euros la unidad). La clienta que ha pagado los 90 euros por las mascarillas desechables recuerda que son un producto para el que se recomienda un solo uso. Hacerse con este material va a ser imposible para mucha gente que tenga que salir de casa a diario y no llegue al reparto del Gobierno.

Factura de una farmacia de Madrid de este sábado

Todas las fuentes consultadas admiten que los precios se han disparado desde la expansión del brote de coronavirus en España. Son varios los establecimientos que se están negando a hacer negocio con este producto y señalan directamente a los proveedores. “Está habiendo mucho mercado negro”, comentan desde una farmacia en Galicia a la que le llegan correos electrónicos de empresas con las que no han trabajado nunca ofreciendo material sanitario. 

Antes y ahora

Desde este establecimiento lamentan que los proveedores con los que trabajan habitualmente están manteniendo los precios de mercado mientras que hay firmas que están disparando los costes. “Antes de la crisis sanitarias vendíamos 100 mascarillas quirúrgicas a 19,95 euros. Ahora un bote de gel llega ya del proveedor a 9,95 euros, que es al precio a lo que lo vendíamos en la farmacia”, añade.  

“Hay farmacias que sí lo están vendiendo porque al final nadie te obliga a comprar y es un servicio”, comenta otra farmacia del País Vasco. “Las mascarillas desechables, las azules se vendían a menos de un euro, ahora se están vendiendo a 3,90 la unidad”, advierte. Lamenta que se imponga la lógica de la oferta y la demanda en un momento como este y recuerda que las farmacias suelen buscar un margen de entre el 20 y el 30 por ciento de lo que venden. Pide por tanto la intervención del Gobierno para que controle la situación. Este periódico se ha puesto en contacto con el Ministerio de Sanidad para recabar sus impresiones, pero no ha recibido respuesta.

Factura de una farmacia de Irún del pasado lunes. Una mascarilla 27,95 euros

El responsable de una farmacia -y por tanto el encargado de gestionar la compra de productos y fijar los precios- dice que las mascarillas FFP2 las están vendiendo ya a 9,50 euros. Admite que el proveedor las vende ahora a 7 euros cuando su precio normal serían unos 3 euros la unidad. Antes de la crisis compraba todo a través de un gran distribuidor como Cofares. “Las farmacias más competitivas -dice- sí acudían a algún fabricante para ahorrarse algún dinero, pero era para productor generalmente baratos por los que no merece la pena volverse loco buscando”.

El sistema se alteró cuando ese gran distribuidor se quedó sin stock cuando se multiplicó la demanda producto de la expansión del virus. “Hubo que buscar por otro lado y cuantos más intermediarios intervienen, más sube el precio”, explica este responsable quien cree que en el Gobierno tendría que haber prohibido la venta de mascarillas al principio de la crisis y haberse encargado de proporcionarlas. 

Pagos por adelantado

Según dice, ese temor cundió en empresas que importan el material. Dejaron de hacer pedidos ante el miedo de que el Ejecutivo fijase precios mínimos de venta después de que ellos hubiesen adquirido los productos en un mercado internacional encarecido por la demanda. Su farmacia y otras de la zona pagan una cuota a una empresa externa para que se encargue de gestionar las compras. Un primer pedido de mascarillas se lo intervino el Gobierno para repartirlo en hospitales. Ahora están a la espera de que les llegue otro. 

“Esa empresa lo que ha hecho es ir directamente a China a por un pedido de medio millón de mascarillas que hemos pagado por adelantado un 75 por ciento. Esperemos que llegue”,dice. Las mascarillas FFP3 las vendían en su establecimiento a 6 euros y cree que ya era “una pasada”. Pero ahora van ya por 12 euros la unidad y  “en Internet hay particulares que venden esas mismas a 40 euros”. Según dice, antes de venderlas le explica a los clientes cuál es la situación para que no se sientan estafados

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