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España

Los militares que luchan contra la covid-19 pueden volver a sus casas dos meses después

Dos militares caminan por una cinta desplazadora

Los miembros de las Fuerzas Armadas desplegados en la Operación Balmis de lucha contra el coronavirus podrán viajar desde sus municipios de destino hasta el lugar en el que se encuentre su domicilio familiar. Esa es la orden que recoge el Boletín Oficial de Defensa con fecha de este lunes, 18 de mayo, más de dos meses después de que se desplegase a los militares en el plan de contingencia contra la covid-19.

El Boletín Oficial de Defensa destaca que la "propia naturaleza" de la carrera militar puede provocar que sea sólo el militar "quien se traslade a la localidad de destino mientras su familia permanece en el domicilio familiar", circunstancia que "requiere la adopción de medidas adecuadas" a las actuales circunstancias. Margarita Robles ha dado luz verde a los desplazamientos a partir de este lunes de aquellos militares que estén destinados en localidades diferentes a donde están en sus casas.

Todo ello con una excepción: "Siempre que ambos municipios se encuentren en la misma fase y, al menos, en la fase 1 del plan para la transición hacia una nueva normalidad [sic], aprobado por Acuerdo del Consejo de Ministros, de 28 de abril de 2020", reza el documento.

Una autorización

Los militares, en cualquier caso, deberán tener una autorización para fijar su residencia habitual en un municipio distinto al de destino. Corresponderá al jefe de cada unidad facilitar el documento que justifique las circunstancias personales de cada efectivo que solicite un viaje en virtud de esta instrucción. Y añade: "En los desplazamientos deberán respetarse las recomendaciones y obligaciones sanitarias dictadas por las autoridades competentes".

Para ello, la ministra solicita al Jefe del Estado Mayor de la Defensa, al subsecretario y a los Jefes del Estado Mayor de los diferentes cuerpos militares que dicten las disposiciones necesarias para el cumplimiento de esta instrucción.

La instrucción forma parte del particular plan de desescalada que se vive dentro de las Fuerzas Armadas. Desde hace semanas, el número de efectivos que participan en diferentes misiones contra el coronavirus -desinfección, apoyo sanitario, vigilancia y patrulla, principalmente- se ha ido reduciendo de forma gradual debido al descenso de solicitudes de ayuda de las administraciones y entidades afectadas.

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