España

Violencia política y Marruecos: así tratará Vox de 'acorralar' a Sánchez con su moción

Los de Santiago Abascal buscarán poner contra las cuerdas al presidente del Gobierno a cuenta de Marruecos. El país vecino ya salió a relucir en la iniciativa de 2020, aunque más por lo relativo a la inmigración ilegal

Violencia política y Marruecos: así tratará Vox de 'acorralar' a Sánchez con su moción
Santiago Abascal, líder de Vox Europa Press

"O Tamames o Pedro Sánchez". Esta es la disyuntiva con la que Vox pretende "retratar" a cada uno de los 350 diputados que componen el Congreso a través de su segunda moción de censura contra Pedro Sánchez en lo que va de legislatura. A grandes rasgos, el contenido del documento es muy similar al presentado en octubre de 2020. El coronavirus ya no domina la agenda política, por lo que las referencias a la pandemia son menores. Aunque haberlas, haylas. Más que nada porque el partido de Santiago Abascal ya cuenta entre sus victorias judiciales con dos sentencias del Tribunal Constitucional que declaran inconstitucionales los estados de alarma decretados por el Gobierno. Cobran peso otras cuestiones de carácter económico, muchas de ellas derivadas de la guerra de Ucrania; los ejemplos del "asalto a los contrapoderes del Estado"; las consecuencias de la entrada en vigor de la ley del 'Solo sí es sí'; la 'ley Trans' y, por último, el concepto de "violencia política" y las políticas de Sánchez en Marruecos.

No son pocas las veces que Unidas Podemos acusa a sus adversarios de practicar "violencia política" contra sus miembros, en especial, contra la ministra de Igualdad, Irene Montero. Según la formación morada, esta última lleva sufriendo años un "acoso sistemático" con el único objetivo de que se retire de la política, una situación de "violencia política" que no tiene, a juicio de la formación, ejemplo en ningún otro dirigente. Además, acusan a Vox de continuar su estrategia de "infamia", "odio", "insultos" y "violencia política execrable".

En este contexto, Vox ha decidido aprovechar la moción de censura para debatir sobre este asunto y tratar de acorralar al presidente del Ejecutivo. En el texto registrado este lunes, el partido liderado por Abascal asegura que, desde su toma de posesión, el Gobierno ha calificado de antidemocráticos a los partidos políticos de la oposición y ha tratado de extirpar del debate público lo que los partidos de la mayoría política juzgan como reaccionario, trasnochado, antiguo o perjudicial. "Por supuesto, viene a tener tal consideración todo lo que no encaja en su proyecto totalitario. Los intentos de deslegitimación de los partidos de la oposición son patentes", apunta la formación.

De la "alerta antifascista" al "kétchup" de Echenique

"El Ejecutivo contó con un vicepresidente que llamaba a la 'alerta antifascista' tras las elecciones regionales andaluzas de 2018 y que diariamente alentaba, desde un ministerio, la violencia contra los partidos de la oposición y justificaba las agresiones que se producían", advierte el documento. "El Gobierno ha amparado que formaciones que defienden la Constitución y la soberanía hayan sido atacadas en actos electorales, esgrimiendo fallos poco creíbles de coordinación o de falta de efectivos, y ha favorecido que estos partidos no pudieran siquiera dirigirse en libertad y con seguridad a los votantes en sucesivas convocatorias electorales", insisten en Vox.

Y pone como ejemplo el de la diputada Rocío de Meer, que fue agredida durante un mitin electoral en Sestao (Vizcaya), un ataque que el portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, resumió como "un bulo como una catedral" y, para referirse a la sangre, habló de "un poco de kétchup".

"El Gobierno promueve, asimismo, la consideración de millones de españoles como culpables no por sus propias acciones, sino por la supuesta actuación de sus abuelos o bisabuelos en una guerra fratricida. Legisla en contra del sentir mayoritario de la población en cuestiones morales esenciales, enorgullecido de su 'diarrea legislativa'", señala el documento presentado por Vox.

De acuerdo a la formación, el Ejecutivo de Sánchez ampara el arrinconamiento de más de la mitad de las sociedades catalana y vasca y olvida a los españoles de esas y de otras regiones de la Nación, colaborando en la progresiva desaparición de España de esos territorios, hoy casi culminada. Para normalizar esta "cancelación" -dice Vox- emplea como arietes a muchos de los medios de comunicación social subvencionados con el fin de teledirigir a la opinión pública y de silenciar a quienes plantean una alternativa a la deriva ilegal y antidemocrática del mismo Gobierno y de sus aliados.

Sánchez y Marruecos

Otro de los temas con los que Vox tratará de poner contra las cuerdas a Sánchez durante el debate de la moción es Marruecos. El país vecino ya salió a relucir en la iniciativa de 2020, aunque más por lo relativo a la inmigración ilegal. Aquel octubre, Vox hacía hincapié en que el Gobierno se había caracterizado "por una nula capacidad diplomática en términos de negociaciones con los Estados origen de inmigrantes ilegales", puesto que no había logrado que Estados como Argelia, Marruecos y Mauritania controlasen las salidas de sus fronteras "en un claro ejercicio de extorsión a España con presiones migratorias asfixiantes".

Ahora, en el documento registrado este lunes, además de la inmigración ilegal, se hace referencia a la actitud "sumisa" de Sánchez ante la Monarquía alauita. "Se manifiesta la sumisión a intereses ajenos a España por parte de Pedro Sánchez en lo relativo a las relaciones con Marruecos. La decisión unilateral del presidente del Gobierno de aceptar las tesis marroquíes sobre el antiguo territorio español del Sáhara Occidental ha supuesto la ruptura total y sin precedentes de nuestra política exterior", sostiene Vox.

Esta nueva rendición -recoge el texto- que bien puede ser consecuencia de los chantajes de nuestro 'vecino del sur' a la persona del presidente del Gobierno, ha tenido gravísimas consecuencias, especialmente en la actual situación política internacional. "Una de las peores consecuencias de esta decisión unilateral de Pedro Sánchez ha sido el serio deterioro de las relaciones con Argelia, otrora principal suministrador de gas a España", recuerda Vox.

Según la tercera fuerza parlamentaria, en la actual situación internacional derivada de la guerra de Ucrania y el problema de aprovisionamiento energético que ha generado, España podría contar con una situación privilegiada para suministrar gas al resto de Europa. "Por el contrario, la pérdida de este suministrador ha hecho que España deba importar gas de otros países, incluidas Rusia o Estados Unidos, a unos precios prohibitivos y poniendo en riesgo el suministro, así como una importante reducción de nuestras exportaciones a Argelia", indica el documento.

En este sentido, apuntan los de Abascal, y con la suspensión por parte de Argelia del Tratado de amistad, buena vecindad y cooperación entre el Reino de España y la República Argelina Democrática y Popular, Italia ha tomado el relevo de España como principal suministrador de gas, aumentando más si cabe nuestra irrelevancia incluso en el seno de la Unión Europea.

La sumisión mostrada por Pedro Sánchez a los intereses de Marruecos ha generado una imagen de debilidad que, previsiblemente, será aprovechada por otros países

"Podría pensarse que esa decisión unilateral de Pedro Sánchez supondría alguna ventaja para España, pero los hechos hablan por sí solos: humillaciones constantes a nuestro país, como que el rey de Marruecos no reciba a Pedro Sánchez, que se coloque la bandera española al revés en una reunión de primer nivel o que sigan llegando cientos de inmigrantes ilegales", plantea Vox. Pero, a su juicio, lo más importante y preocupante es que Marruecos ni siquiera
ha renunciado a algunas de sus mayores pretensiones: Ceuta y Melilla y las aguas del archipiélago canario.

"La sumisión mostrada por Pedro Sánchez a los intereses de Marruecos tanto en el ámbito interno como en el seno de las instituciones europeas ha generado una imagen de debilidad que, previsiblemente, será aprovechada por otros países. Ejemplo de ello son las numerosas veces que otros países se niegan a colaborar con la Justicia española: es notoria la negativa de Bélgica a extraditar a España al criminal Puigdemont y a otros golpistas en varias ocasiones", apostillan desde la formación.

A pesar de que Marruecos no renuncia a sus aspiraciones -esgrime Vox-, recibe cuantiosos fondos españoles de cooperación y adquiere de nuestro país una cantidad considerable de material militar.

Por otro lado, la moción de censura presentada por Vox con el economista Ramón Tamames como candidato dedica un amplio apartado a distintos temas económicos como el "aumento desorbitado del gasto improductivo"; "la aplicación implacable de una política fiscal confiscatoria"; una reforma laboral a la que consideran "inútil"; las empresas y los autónomos; una gestión energética "irracional"; los "perjuicios" para el sector primario o la política en materia de agua.


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