Publicado: 21/11/2023 04:45
La continuidad de Fernando Grande-Marlaska en el Ministerio del Interior ha pillado a pie cambiado a los agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional. Nadie daba por hecho la supervivencia del magistrado y en poco menos de tres meses se convertirá en el ministro más longevo de la historia de la democracia. "Es una decepción", explica uno de estos funcionarios a Vozpópuli que critica la poca interlocución que existe entre Marlaska y los representantes de los trabajadores.
La confirmación de la permanencia de Marlaska en el nuevo ejecutivo sentó como un jarro de agua fría entre los efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Los agentes sondeaban en los últimos días la posible llegada de Margarita Robles, Antonio Hernando o Mercedes Fernández. La actual titular de Defensa era la favorita en los Cuerpos que veían con "muy buenos ojos" su desembarco en la institución.
Interior "desgasta mucho"
"Es una decepción", confiesa uno de los representantes de los funcionarios. Esperaban una "revolución" o un giro en la política interior. "Al final nos quedamos como siempre, al pie de los caballos", explican estas fuentes a Vozpópuli. Otros consideraban que se podría haber vuelto a la vieja guardia de Alfredo Pérez Rubalcaba con protagonismo para Hernando.
En definitiva, el Ministerio del Interior es un área que "quema" a sus ocupantes. Y es que es complicado encontrar a los perfiles idóneos para desempeñar estos cometidos que afectan de forma directa a la seguridad nacional y están en el foco de las críticas. Marlaska aceptó hace cinco años y ahora ha vuelto a comprometerse con Pedro Sánchez. En tres meses podría convertirse en el ministro más longevo de la democracia en Interior, por delante de José Barrionuevo. Su cuenta ostenta cinco años y seis meses. Nadie se esperaba esta situación hace tres meses.
Esta cartera que, "no es nada" fácil para sus responsables, "es un ministerio que supone un marrón y desgasta mucho", explican fuentes policiales a Vozpópuli. Sin embargo, las criticas a Marlaska han estado presentes en todas las legislaturas.
El mandato del magistrado no ha estado exento de polémica por las críticas que ha recibido en asuntos claves de seguridad como la gestión de la crisis migratoria, la actuación policial en las protestas de Ferraz o la condena judicial por la destitución del coronel Diego Pérez de los Cobos.
El nombramiento de Marlaska en 2018 tuvo una buena acogida entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Su lucha contra ETA desde la Audiencia Nacional era un activo para los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil. Cinco años después la situación ha dado un giro radical y, desde diversas esferas, daban por hecho el relevo al frente del Ministerio del Interior. Un cambio que no se ha producido.
Marlaska hará pocos cambios en su nueva etapa
La permanencia de Marlaska supone también que se esperan pocos cambios y menos sorpresas respecto al gabinete actual, según informan fuentes socialistas a Vozpópuli. Leonardo Marcos y Francisco Pardo mantendrán previsiblemente sus puestos al frente de la Policía Nacional y la Guardia Civil. No se esperan revoluciones ni medidas drásticas, según las fuentes consultadas. Hay que reconocer que son dos casos diferentes ya que Pardo lleva en el cargo desde 2018 y Marcos desde junio de este año.
Una de las citas más importantes que están próximas en el calendario es el Bicentenario de la Policía Nacional que se celebrará el 13 de enero. Estaba previsto que Francisco Pardo llegara al evento como director general. Ahora con más razón por la línea continuista de Interior.
La continuidad de Rafael Pérez
Una situación distinta se vive con Leonardo Marcos. Un nuevo ministro de Interior hubiera podido propiciar su relevo. Una revolución en la que estaba contemplada su nombre. A pesar de ello ahora todo hace indicar que seguirá al frente de la Dirección General de la Guardia Civil y también continuará.
Mención aparte merece la figura de Rafael Pérez, secretario de Estado de Seguridad. Si él quiere podrá continuar al frente de su puesto. Es el ingeniero que mueve desde la sombra los engranaje de Interior. Un puesto que considera clave Marlaska y tampoco se esperan cambios.
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El artículo no concreta las "fuentes policiales" ni el "funcionario" que informa. Creo que sería obligado especificar si se trata de un sindicato, y que sindicato, o que tipo de funcionario.
En cuanto a la continuidad del Marlaska, revela el absoluto desprecio del tahur de la Monclona, o del propio afectado, por lo que piensan los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Su labor al frente de las mismas ha sido nefasta, sin exageración, además de sectaria a más no poder. Era y es un ministro indigno (como en este caso lo calificaba con toda razón Macarena Olona) al que los propios policías de adjudican el calificativo de traidor.
Y una muestra de que el socialismo- sanchismo tiene tanta capacidad de envilecimiento de la gente como el nazionalismo.
No esperan, pues, años de indignidad suma, hasta que se consiga derribar a la banda mafiosa que okupa el poder.
Obviamente, quería escribir "NOS ESPERAN AÑOS DE INDIGNIDAD SUMA"