Quantcast

España

Marlaska incendia la Guardia Civil con sus ceses “partidistas”

El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, preside este sábado la jura de bandera de la 125 Promoción de la Academia de la Guardia Civil de Baeza (Jaén).

El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, fulminó de su puesto al frente de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid al coronel Diego Pérez de los Cobos. Esta decisión supone el tercer gran agravio a los mandos del Instituto Armado en lo que va de mandato socialista y ha provocado un incendio en el seno del Cuerpo, que le acusa de “ceses partidistas”. Todas las fuentes consultadas coinciden en que el motivo de la destitución tiene que ver con la negativa del coronel a revelar detalles de la investigación bajo control judicial que una de sus unidades lleva a cabo en torno a la manifestación feminista del 8-M.

Desde el Ministerio se limitan a ofrecer una explicación: “falta de confianza”. Pero no precisan a qué se debe ese cambio ni desde cuándo se arrastran los problemas. El afectado -al que se le comunicó la destitución a última hora del domingo- ha explicado a su entorno que las razones tienen que ver con con las discrepancias en torno a esa investigación tan sensible para el Ejecutivo al haber autorizado que miles de personas se congregasen en Madrid el 8 de marzo en plena pandemia de coronavirus. Por estos hechos, el Juzgado de instrucción número 51 de Madrid ya ha citado a declarar al delegado de Gobierno en Madrid, José Manuel Franco. 

Se le acusa de un presunto delito de prevaricación al permitir la concentración pese a los riesgos de salud que a esas alturas ya eran patentes tanto en España como en otros países. Fuentes consultadas entre la Guardia Civil consideran inaceptable que un mando del cuerpo pueda ser cesado por no atender a las preguntas del Ministerio sobre una investigación que está en manos de sus subordinados bajo la supervisión de una juez. Son muchos los miembros del Instituto Armado que muestran su indignación en privado a este periódico, pero otros lo han hecho en público.

"Sin vergüenza, sin cabeza"

Los más contundentes han sido los miembros de la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC), que aúna principalmente a mandos del Cuerpo. En un texto titulado “Sin vergüenza, sin cabeza”, acusan directamente al ministro de querer interferir en la investigación. “Denuncian que Pérez de los Cobos ha sido destituido por cumplir las órdenes de la juez. defendemos al Coronel Pérez de los Cobos, como lo seguiremos haciendo con todos los guardias civiles que sean tratados de un modo injusto y partidista”, añaden. "Lo que ahora importa es que el político de turno (sea del color que sea) confíe en ti, que te amoldes a su estrategia política", se quejaba en la misma línea la asociación Unión de Oficiales. 

A este coronel le nombró al frente de la Comandancia de Madrid el último ministro del PP, Juan Ignacio Zoido. El día de su toma de posesión, en abril de 2018, el secretario de Estado de Seguridad de entonces dijo que los ciudadanos tenían “una deuda” con él. Pérez de los Cobos es un peso pesado dentro del Cuerpo y su papel fue clave para lograr las condenas de los líderes del procés hasta el punto convertirse en el enemigo número uno del independentismo y del exmayor de los Mossos d’Esquadra, José Luis Trapero. 

El mensaje difundido desde el secesionismo catalán este lunes es que el cese de este mando policial, coordinador de todas las fuerzas de seguridad durante el referéndum ilegal, ha llegado demasiado tarde, como reconocía a este periódico una persona del entorno del expresidente de la Generalitat, el huido Carles Puigdemont. Lo ha dicho la ANC y el que fuera conseller de Interior, Joaquim Forn. “Que nadie se haga ilusiones porque no es por 1-O”, ha lamentado. El más expeditivo en su crítica ha sido el dirigente de Podemos Jaume Asens: "Es él quien debería estar a la espera de sentencia, y no Trapero".

La 'bestia negra' del independentismo

Pérez de los Cobos ya no desempeñaba ninguna función que tuviese que ver con el desafío soberanista, aunque su última intervención en relación con el 1-O fue el pasado 28 de enero durante el juicio que se sigue en la Audiencia Nacional contra Trapero por labor en el referéndum. El coronel no rebajó la acusación que desde el primer día mantiene contra el mando policial autonómico: “Nos engañaron”. En repetidas ocasiones, el propio Trapero ha reconocido que el problema entre ambos superó lo profesional para pasar a lo personal.     

Este coronel -hermano del expresidente del Tribunal Constitucional Francisco Pérez de los Cobos- es el mando con mayor influencia entre los últimos ministros del Interior, desde el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba hasta el popular Juan Ignacio Zoido. Ahora será sustituido por el coronel de Operaciones, Eduardo Gómez. La destitución ha puesto en pie de guerra a parte del Cuerpo y ha agravado la brecha con el actual Ministerio, que viene de lejos y arrastra episodios pasados. El primero tuvo lugar poco después de la llegada del exjuez de la Audiencia Nacional al Ministerio.

Decidió apartar al guardia civil Juan Hernández Mosquera de su puesto de responsable del Gabinete de Coordinación y Estudios de la secretaría de Estado de Seguridad en el que llevaba apenas unos meses. Precisamente sustituyó a Pérez de los Cobos. Es una plaza clave en Interior porque en ella se diseñan los planes a futuro del Departamento. Marlaska no solo cesó al guardia civil, sino que rompió el statu quo de años en el Ministerio y colocó en el puesto a un policía nacional. El elegido fue José Antonio Rodríguez, conocido por sus vínculos al PSOE. 

El enfrentamiento con Marlaska

Otro gran desencuentro fue el cese del jefe de la Unidad Central Operativa (UCO), Manuel Sánchez Corbí, otro mando con mucho predicamento en la Guardia Civil por sus años en la lucha contra el terrorismo de ETA. Fue después de que Vozpópuli desvelase que Interior había congelado el envío de fondos reservados a unidades investigadoras. A modo de ejemplo, la información incluía un correo electrónico del responsable de la UCO ordenando a sus subordinados dejar en suspenso sus pesquisas a la espera de que Interior remitiese los fondos.

El ministro Grande-Marlaska, quien había colaborado estrechamente con Sánchez Corbí cuando era juez, perdió la confianza en él y le cesó. "Si se repiten hechos similares a éstos, sin explicar sus motivos, podremos anunciar a todos los españoles que la Guardia Civil que conocían hasta ahora ha entrado en proceso de extinción", advertía la Uinón de Oficiales.

El comunicado de APROGC canalizaba a su vez su indignación también hacia los mandos del Cuerpo más cercanos al ministro: “A los máximos responsables del Cuerpo con capacidad de interlocución con los responsables políticos, solo decirles lo que un subordinado exige a su jefe, lealtad, al precio que sea, y esa lealtad exige la defensa del subordinado cuando no haya hecho más que cumplir con sus obligaciones. Los barcos antes que la honra”. 

Precisamente, la magistrada -que estaba este lunes en funciones de guardia- ha emitido la providencia en la que citaba al delegado del Gobierno horas después de que todos los medios se hicieran eco del cese de Pérez de los Cobos.  En el documento incluía la siguiente advertencia a los agentes investigadores tras constatar “que el resultado de algunas de las diligencias de investigación están difundiéndose en los medios de comunicación”. “Deberán guardar rigurosa reserva sobre las concretas investigaciones que les hubieren sido encomendadas, así como de todas las informaciones que obtengan, de modo que sólo se informará a esta Magistrada-Juez”, zanja. 

La advertencia de la juez del 8-M a los agentes

A finales de marzo, la juez que investiga las posibles responsabilidades en la organización de la manifestación de Madrid encargó una serie de diligencias a la Guardia Civil. Entre otras cosas, pedía que un atestado sobre el "curso dado" al informe del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades para conocer qué órgano oficial español recibió dicho documento, qué difusión se hizo del mismo entre las autoridades y, concretamente, si se remitió a la Delegación del Gobierno en Madrid. 

Ese informe, elaborado seis días antes de la manifestación del 8-M ya desaconsejaba las manifestaciones por el riesgo de propagación del virus. El director del centro de Alertas Sanitarias, Fernando Simón, es uno de los representantes de España en ese organismo europeo. La semana pasada, El Confidencial informó de que la Guardia Civil investigaba a Simón. Fuentes consultadas por este diario aseguran que eso generó mucha inquietud en el Ministerio. Por el momento, la providencia de la juez que cita a declarar a Franco no hace ninguna alusión al principal portavoz del Gobierno en esta pandemia.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.