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España

Miedo de los barones críticos a que Sánchez bloquee la gobernabilidad hasta septiembre

Pedro Sánchez no quiere arrojar así como así la toalla y presentar la abstención a la investidura de Mariano Rajoy como cosa suya. El líder socialista, pendiente ya del 39º Congreso de su partido previsto para el otoño, no quiere comparecer en este cónclave como el principal responsable de haber facilitado al PP su continuidad al frente del Gobierno, de ahí que en sus planes figure forzar la convocatoria de un nuevo comité federal en el que sea Susana Díaz y los barones regionales que la secundan los que defiendan públicamente la colaboración imprescindible del PSOE en el mantenimiento de Rajoy en La Moncloa. Algunos dirigentes territoriales críticos con Sánchez empiezan a sospechar que trabaja para bloquear la gobernabilidad hasta septiembre.

Sánchez quiere trasladar a Susana Díaz y a los barones que la secundan la responsabilidad de apoyar a Rajoy

La expresión que se ha puesto de moda en las filas socialistas es la de "vestir el muñeco". El PSOE no puede pasar del ‘no’ rotundo a la investidura de Rajoy a la abstención que la facilite. Necesita tiempo y eso es lo que algunos barones regionales le han transmitido al Gobierno, conscientes de las dificultades por las que atraviesa el Partido Socialista para dar este paso, como consecuencia de su seria división interna. Para “vestir el muñeco”, hacen falta todavía algunas semanas. Los más firmes partidarios dentro del PSOE de acabar facilitando que Rajoy forme Gobierno y arranque con todas las consecuencias la XII legislatura, opinan que sería aconsejable optar por la abstención en la segunda sesión de investidura. La primera tendrá lugar en el Congreso los días 2 y 3 de agosto. El 5 se celebraría la segunda, en la que el candidato del PP solo necesitaría de mayoría simple para ser investido. En las federaciones socialistas más inclinadas a desbloquear la situación se considera que este es un plazo más que suficiente para que el discurso del partido se module y pueda presentarse la abstención como “la rendición de un servicio al país”. Sin embargo, los gestos de Sánchez les lleva a desconfiar, ante la posibilidad de que esté pensando en períodos más largos.

Sánchez reunió este lunes a su grupo parlamentario y dejó claro a sus diputados que ya tiene asumido su paso a la oposición. Solo un par de parlamentarios le animó a lo contrario, a explorar de nuevo un acuerdo de Gobierno con Podemos y los independentistas. Pero el secretario general aclaró que lo que toca ahora es ejercer una oposición "útil y constructiva", que se estrenará hoy mismo con el registro en el Congreso de una batería de medidas destinadas a introducir transparencia en la vida pública, luchar contra la corrupción e investigar aquellos casos en los que se presumen irregularidades por parte del Gobierno. Entre estos últimos citó el ‘caso Acuamed’ y el de la presunta utilización por parte del Ministerio del Interior de vías impropias para investigar a algunos políticos catalanes.

Mayor presión de aquí a la investidura

Sánchez realizó estos anuncios cuando ya conocía el acuerdo alcanzado por el PP y Ciudadanos para el reparto de la Mesa del Congreso, gracias al cual a partir de hoy ocupará la Presidencia la hasta ahora ministra de Fomento, Ana Pastor. Sánchez ha preferido mantenerse al margen de este pacto, todo lo contrario de lo que hizo el PP en la anterior legislatura cuando se sumó al acuerdo que alcanzó el PSOE con Ciudadanos y que llevó a Patxi López a presidir la Cámara Baja.

El acuerdo del PP con Ciudadanos para la Mesa del Congreso preocupa al líder socialista, que ha preferido quedarse al margen 

En el equipo de Sánchez se ha acogido con preocupación este buen entendimiento entre el PP y Ciudadanos para el reparto de la Mesa del Congreso, pues se sospecha que va mucho más allá. El pacto introduce en ella a dos representantes de la formación naranja. Los fieles al secretario general dan ahora por hecho que Albert Rivera acabará votando a favor de la investidura de Rajoy, proyectando todavía mayor presión sobre el PSOE para que se abstenga en la sesión prevista para primeros de agosto.

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