Arrimadas promociona a la rival de Marín en mensajes internos de Ciudadanos

La dirección nacional de Ciudadanos ha empezado a promocionar en mensajes internos a Rocío Ruiz, consejera andaluza de Igualdad y principal rival de Juan Marín en la región, después de que se haya empezado a formar una importante corriente interna contra el vicepresidente de la Junta de Andalucía por la aproximación al Partido Popular que algunos dirigentes naranjas ven en él.

El equipo de Inés Arrimadas distribuyó el pasado viernes un argumentario interno, al que ha tenido acceso Vozpópuli, en el que colocó a Ruiz en un destacado segundo lugar, justo detrás de la presidenta naranja. Además, la consejera aparece en la fotografía con un rótulo a sus espaldas que pone 'Compromiso de cambio' y que ha destapado las conjeturas entre algunos de los receptores por lo subliminal del mensaje. 

En la parte que afecta a Ruiz, la dirección nacional destaca de ella el reciente incremento del presupuesto andaluz de las tarjetas monedero en 5,5 millones de euros más y del que se beneficiarán alrededor de 5.000 familias andaluzas.

Estas tarjetas, dotadas con entre 150 y 250 euros, se pusieron en marcha el pasado mes de abril con una dotación inicial de 17 millones de euros y desde entonces las han recibido cerca de 20.000 unidades familiares. Sus beneficiarios pueden adquirir alimentos y otros productos de primera necesidad, como artículos de limpieza e higiene, durante cuatro meses.

Una iniciativa de la Consejería de Igualdad que demuestra, a ojos del equipo de Arrimadas, que "Ciudadanos garantiza la protección de las familias andaluzas más vulnerables y que están sufriendo de manera más cruda todos los efectos de esta pandemia”.

Estas alabanzas no han pasado desapercibidas entre algunos dirigentes de Cs, sobre todo en un momento en el que varios cargos y afiliados de toda Andalucía han comenzado a organizarse para pedir a la dirección nacional la destitución de Marín y el alcalde de Granada, Luis Salvador.

Para ello, han recurrido al que fuera secretario de Organización de Cs con Albert Rivera y actual senador por designación autonómica, Fran Hervías, para que coordine esa oposición interna al tándem Marín-Salvador. A Hervías le acompañan en un incipiente núcleo duro la citada consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, y el portavoz de Cs en el Parlamento andaluz, Sergio Romero, según desveló en exclusiva este periódico hace una semana.

Los críticos dentro de Cs Andalucía con Marín y Salvador creen que ambos han llegado a un acuerdo tácito con un objetivo final: pasarse al PP en el corto o medio plazo de cara a las próximas andaluzas, previstas para finales de 2022 si se agota la legislatura, y así seguir otros cuatro años en la primera línea de la política andaluza ante el más que probable hundimiento de la formación naranja. Las últimas encuestas coinciden en que Vox superaría ahora a Cs en escaños y que podría ser el siguiente socio de coalición del PP andaluz de Juan Manuel Moreno.

Esta estrategia de Marín y Salvador pasa, según sus detractores, por pedir un Andalucía Suma como paso previo a su entrada en el PP. Marín no descartó la opción del PP+Cs en un reciente desayuno informativo en el que le apadrinó Rivera, cuyo bufete asesora en la actualidad a los populares en un recurso ante el Tribunal Constitucional. El expresidente de Cs ya ha marcado el camino, junto a José Manuel Villegas, para aquellos que se quieren acercar a la formación de Pablo Casado.

Choques entre Marín y Ruiz

En la dirección nacional se ve con preocupación este movimiento del vicepresidente andaluz. De ahí que Arrimadas tiene previsto desplazarse a Sevilla en la segunda semana de enero para estar presente en la primera reunión del comité autonómico en Andalucía que se acaba de constituir.

En los últimos días se han producido varios choques entre Marín y Ruiz, sobre todo después de que se filtrase un vídeo en el que la consejera afirmaba que su intención pasaba por cubrir los puestos territoriales de la Junta andaluza con gente de Ciudadanos en vez de funcionarios. Previamente, Ruiz había dejado claro que el partido "ni se rinde ni se vende", una alusión muy clara a aquellos que pretenden una Andalucía Suma con el PP.