España

Génova relegó a la casadista Guardiola para dirigir desde Madrid el pacto con Vox en Extremadura

La dirección nacional afirmó a la líder autonómica que tenía "tiempo y confianza" mientras Miguel Tellado cerraba el acuerdo con los de Abascal

María Guardiola y el líder de Vox en Extremadura, Ángel Pelayo Gordillo. EFE

María Guardiola ha puesto cara al viraje del PP para gobernar con Vox en Extremadura y a la firma de ese acuerdo para formar una coalición que la convertirá en presidenta. La dirigente autonómica, sin embargo, quedó totalmente relegada de las negociaciones, que pilotó Génova desde Madrid con Miguel Tellado a la cabeza.

Así lo confirman a Vozpópuli dirigentes del PP de Extremadura, que hablan de una "intervención total" por parte de la dirección nacional del partido desde el pasado fin de semana: "El sábado Miguel Tellado transmitió a María Guardiola que él se ocupaba de solucionar la ruptura con Vox". Para ello, eso sí, la líder extremeña tuvo que difundir una carta a sus cargos y militantes apostando por un entendimiento "imprescindible" con Vox.

El sábado Miguel Tellado transmitió a María Guardiola que él se ocupaba de solucionar la ruptura con Vox

Tras ese giro de 180 grados de Guardiola, Génova afirmó a la futura presidenta de la Junta que tenía "tiempo y confianza" para ir preparando el terreno para ese acuerdo. Por eso, precisamente, desde el PP de Extremadura asumieron que el pacto con Vox podía materializarse ya después del 23-J y que Guardiola tendría margen para justificar su cambio de opinión. La realidad, sin embargo, es que "se estaba cerrando todo desde Madrid".

El papel de Tellado

A pesar de que María Guardiola había vuelto a tender puentes desde el pasado fin de semana con Ángel Pelayo Gordillo, líder de Vox en Extremadura, la dirección nacional del PP tuvo claro que "había que actuar rápido" para cerrar cuanto antes un acuerdo que frenara el desgaste que la propia líder regional, pero también todo el partido, estaba padeciendo desde las polémicas declaraciones de Guardiola vetando cualquier entrada de Vox en su gobierno.

Desde el sábado pasado, explican las fuentes consultadas, "Miguel Tellado toma el mando" y "primero se vuelve a la comunicación con Vox y, después, se empieza a perfilar el acuerdo". Los acontecimientos, en todo caso, se precipitan después de que la presidenta de la Asamblea de Extremadura fijase para la semana que viene la investidura de Vara y el jueves "tocó arremangarse" para cerrar el pacto.

Ni Génova ni Vox querían llegar a ese debate sin acuerdo y, de hecho, esa circunstancia fue clave para que los de Santiago Abascal se conformaran con entrar en el gobierno con una sola consejería y tener sitio en la Mesa de la Asamblea a través de la modificación del Reglamento de la Cámara: "Se presentó esa oportunidad y se selló el acuerdo".

El propio Miguel Tellado, confirman a Vozpópuli desde el PP de Extremadura, telefoneó a Abel Bautista, secretario general del partido en la región, para confirmarle que "el pacto estaba ya cerrado y que María tenía que cerrarlo el viernes".

La última crisis 'casadista'

De esta forma, Génova rompió en Extremadura el principio de autonomía que había otorgado Alberto Núñez Feijóo a sus dirigentes regionales en las conversaciones para formar gobierno tras las elecciones del 28-M y, a la vez, puso fin a la última crisis del partido provocada por la "herencia casadista" que supone el liderazgo en Extremadura de María Guardiola.

Las fuentes consultadas recuerdan, en este sentido, que la futura presidenta de la Junta fue impulsada como sucesora de José Antonio Monago al frente del partido en la región por el número dos de Pablo Casado, Teodoro García Egea y, sobre todo, por Alberto Casero, secretario de Organización del PP nacional y muy próximo a Guardiola.

En su estrategia de "controlar el partido desde abajo hacia arriba", Casero y García Egea pusieron en marcha los congresos provinciales Cáceres y Badajoz para situar a dos presidentes afines -Laureano León y Manuel Naharro- que apoyaran a Guardiola frente al alcalde de Plasencia, Francisco Pizarro, que también aspiraba a la presidencia regional del partido. El respaldo de ambos a Guardiola fue determinante para que Feijóo y Tellado, recién llegados a Génova, avalaran su elección como presidenta y pidieran a Pizarro integrarse.

Esa 'herencia' de Pablo Casado, sin embargo, se convirtió en un problema después de la ruptura de Guardiola con Vox. Fue entonces cuando Génova se dio cuenta que el futuro Grupo Popular en la Asamblea, con Guardiola al frente, era "novato al 95% por la gran renovación en las listas electorales. Esa inexperiencia, y el riesgo a un duro revés en el debate de investidura de Vara y la amenaza de nuevas elecciones, fue determinante para que la dirección nacional decidiera tomar cartas en el asunto y cerrar cuanto antes una crisis a tres semanas de las generales.

Nuevo Gobierno, nueva Mesa

Ya con el acuerdo de coalición cerrado con Vox, los siguientes pasos que darán María Guardiola y el PP extremeño es poner en marcha una reforma del Reglamento de la Asamblea para ampliar el número de representantes de la Mesa de la Cámara y, de esta forma, dar entrada a Vox… y garantizar la mayoría del bloque de derechas en el órgano de gobierno del parlamento regional.

Esa maniobra, explican las fuentes consultadas, ya la protagonizó el PSOE en 2019, cuando impulsó una reforma del Reglamento para que la Mesa de la Asamblea pasara de tener 6 asientos a 8 para dar cabida a Podemos: "Ahora, nosotros le devolvemos esa jugada".

Respecto al futuro gobierno de María Guardiola, desde el PP extremeño califican como "éxito" no haber cedido ante Vox en su exigencia de controlar la consejería de Agricultura: "Es una de las más importantes por las políticas agrarias comunitarias y por la gestión del dinero procedente de Bruselas a través de la PAC". Además, añaden, la consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural "era una antigua dirección general donde se gestionaba únicamente la caza, la pesca y política forestal, nada más".

Los cargos del partido en Extremadura contactados por Vozpópuli sitúan a Mercedes Morán, vicesecretaria de Emergencia Demográfica, Agricultura y Ganadería del partido en la región como la favorita para la consejería de Agricultura: "Fue directora general de la PAC en el Gobierno de Monago, donde coincidió con María Guardiola. Ambas se conocen desde entonces y ella es experta en la política agraria común".

Otro nombre que señalan las mismas fuentes para el futuro gobierno extremeño es el de Elena Manzano para la consejería de Hacienda. En la actualidad, ocupa el cargo de vicesecretaria de Economía y Hacienda del PP de Extremadura y es concejala en el Ayuntamiento de Cáceres.