España

Génova da manos libres a Mañueco para decidir el adelanto electoral en Castilla y León

La actitud de Vox con el aborto en Castilla y León y el amago de ruptura del gobierno regional han indignado al presidente autonómico y al PP, donde se deja abierto cualquier escenario en los próximos meses

Las mujeres que deseen abortar en Castilla y León no serán obligadas a escuchar el latido del feto, pero lo que sí se oye en el gobierno regional, y en la sede central del Partido Popular en la calle Génova 13, son los tambores de guerra de Vox. Para el equipo de Alfonso Fernández Mañueco y la ejecutiva nacional de los populares la actitud de Juan García-Gallardo y la de su partido no ha sido la de un socio leal, con el anuncio de algo "ilegal" y el amago de ruptura de la coalición. Por ese motivo, el presidente autonómico tiene manos libres para tomar cualquier decisión, incluido el adelanto electoral.

Así lo confirman a Vozpópuli altos cargos del ejecutivo regional y también de la dirección nacional del PP, que coinciden en el "enfado" con los de Abascal con lo ocurrido en Castilla y León desde el pasado jueves: "Ese día se aprobaron una serie de prestaciones para mujeres embarazadas y ellos aprovecharon para tratar de imponer su agenda ideológica con algo que ni se había tratado".

A raíz de ese momento, señalan desde el gobierno de Mañueco, "no ha habido ninguna reunión entre el presidente y Juan García-Gallardo", aunque sí "declaraciones constantes" del vicepresidente de la Junta "defendiendo algo que sabía que no se podía hacer".

Pese a las presiones de Vox, explican estas mismas fuentes, "nosotros dejamos claro desde el primer momento que la obligatoriedad de escuchar los latidos del feto nunca fue una opción". Por eso, precisamente, se difundió el comunicado de la consejería de Sanidad antes del fin de semana. No obstante, y al ver que Gallardo no bajaba el tono, Mañueco optó el lunes por dar el carpetazo definitivo a un nuevo protocolo médico.

Interlocución con Feijóo

Con quien sí ha tenido interlocución permanente Alfonso Fernández Mañueco durante los últimos días es con Alberto Núñez Feijóo. Las fuentes consultadas recuerdan que ambos coincidieron el sábado en Zaragoza en la presentación de candidaturas del PP para las autonómicas y que los contactos también se han mantenido esta semana, ante la "obcecación" de Vox.

Los de Santiago Abascal dieron ayer un paso más al amagar con la ruptura del gobierno autonómico, en unas declaraciones, las de Ignacio Garriga, que han provocado gran indignación en el equipo de Mañueco.

Las fuentes consultadas recuerdan que el presidente de Castilla y León se encontraba con el rey Felipe VI y la ministra de Sanidad Carolina Darias en una visita oficial al Hospital de Salamanca y echan en cara que Vox aprovechara ese acto institucional para "amenazar" a Mañueco y al Partido Popular.

La "bravuconada", en todo caso, quedó "menguada" después con la declaración ante los medios de Iván Espinosa de los Monteros, que alejó la posibilidad de una ruptura en la coalición. El portavoz de Vox en el Congreso, que retrasó su comparecencia para que el partido decidiera previamente su posición, sí admitió, sin embargo, que el objetivo de su formación era "retratar" al PP con el tema del aborto.

Decide Mañueco

Para el gobierno de Mañueco, y la dirección nacional del PP, "esa era claramente la intención de Vox", pero afirman que "la jugada les ha salido mal" porque "se ha demostrado quién manda en Castilla y León y ahora ellos tienen que explicar por qué no van a cumplir con las expectativas generadas a sus votantes".

¿Y ahora, qué? Pues veremos por dónde salen en los próximos días. No descartamos nada

Tanto el ejecutivo regional como Génova, no obstante, no pasan por alto la actitud de Vox ni la "amenaza de ruptura" y, por tanto, dejan abierto cualquier escenario: "¿Y ahora, qué? Pues veremos por dónde salen en los próximos días. No descartamos nada".

Desde el equipo de Mañueco destacan, en todo caso, que la dirección nacional del partido ya ha transmitido al presidente regional que tiene total libertad para adoptar la decisión que considere oportuna en función de los acontecimientos. Incluida la convocatoria de nuevas elecciones: "Esa decisión es una competencia que solo tiene él y por tanto es a él al que le corresponde adoptarla".

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco. EFE/Nacho Gallego

Cargos del PP regional, en todo caso, apuntan a que esa nueva disolución de las cortes -que no podría producirse hasta que se cumpla un primer año de legislatura- sería la última opción porque "nadie quiere comprometer un gobierno". De todas formas, añaden, "el partido está a la expectativa y, de hecho, no se ha difundido ningún argumentario sobre este asunto".

Enfado con el Gobierno

Más allá de la indignación con Vox, en Génova y el gobierno de Castilla y León también muestran a las claras su enfado con el Ejecutivo de Pedro Sánchez, que "ha enviado un requerimiento con el único objetivo de hacer una política partidista de cara a las elecciones".

En ese sentido, las fuentes consultadas destacan que "no se ha producido ningún acto administrativo sobre un protocolo anti-aborto y, por tanto, ese requerimiento del Gobierno pidiendo explicaciones sobre ese asunto no se tenía que haber producido".

Pese a ello, el ejecutivo regional responderá por los cauces ordinarios. De momento, Alfonso Fernández Mañueco ya ha remitido una carta a Pedro Sánchez reivindicando la actuación de su consejería de Sanidad y echando en cara al presidente la actitud del Gobierno desde el pasado jueves.

Más información