Auge y caída de Fikri, el 'patrón' que llenaba España con hachís de Marruecos

San Pedro del Pinatar (Murcia), 4.300 kilos de hachís. Costas gallegas, 1.800 kilos de cocaína. Dos episodios que han tenido lugar en 2021 y que la Guardia Civil atribuye a Fikri Amellah Agharbi, ciudadano de origen marroquí que, por su frenética actividad como narcotraficante, se le consideraba uno de los individuos más buscados en España y a nivel internacional. Un 'patrón' de la droga que detenido en una macrooperación policial que no pasó desapercibida en Barcelona -con el despliegue de un helicóptero y un fuerte dispositivo terrestre- y que también tuvo sus ramificaciones en Pontevedra y Cádiz. En total fueron arrestadas 17 personas y se practicaron 16 registros.

Fikri Amellah se había ganado a pulso figurar entre la lista de los hombres más buscados por las autoridades. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil lo ubica tras algunos de los movimientos más significativos de la entrada de droga de los últimos tiempos. Para ser exactos, el Grupo Central Antidrogas del Instituto Armado lo ubicó en la cúspide de los mayores suministradores de estupefacientes procedentes de Marruecos tras unas investigaciones que comenzaron a principios de 2020.

A las órdenes de Fikri se dibujaba un complejo entramado logístico para introducir grandes cargas en España. En Marruecos disponía de varios almacenes en los que guardaba los estupefacientes procedentes de África, a la espera de encontrar el momento idóneo para transportarlas a través del Estrecho. Lo hacía con una flota de embarcaciones -gomas- y mediante trasvases en alta mar, consolidando la llamada 'Ruta Africana' del hachís. Los estupefacientes se distribuían en nuestro país a través de los clanes de la droga más asentados, como Los Castañas o El Messi del Hachís.

Las comunicaciones recibidas por Interpol apuntaban que Fikri Amellah también estaba en el foco de varias investigaciones a nivel internacional, tras seguir el rastro a varias comunicaciones de telefonía encriptada.

De Marruecos a Barcelona

Después de casi dos años de investigación, los investigadores han conseguido las evidencias suficientes para desmantelar el clan familiar que orbitaba en torno a Fikri Amellah, quien residía en Barcelona "llevando una vida y rutinas de lo más sencillas", según el Instituto Armado: "Nada que ver con la ostentosidad que mostraban en sus vacaciones y viajes de lujo fuera de su zona de residencia, como por ejemplo con alquileres de yates, hoteles y vehículos de muy alto nivel, o incluso con el uso de relojes de algunas de las marcas más exclusivas con series limitadas personalizadas de hasta 800.000 euros".

La operación policial explotó en Barcelona, en el barrio de Poble Sec, el pasado martes, 14 de diciembre. Los agentes sorprendieron a Fikri Amellah en el salón de su casa con cinco teléfonos móviles y dos cuadernos con anotaciones, coordinando varias operaciones en alta mar para el suministro de droga. Uno de los investigados se dio a la fuga por la fachada del edificio. La Guardia Civil desplegó a sus agentes sobre el terreno y recurrió a sus medios aéreos hasta lograr su detención.

En total se llevaron a cabo 16 registros, en Barcelona, Pontevedra y Cádiz, con un total de 17 detenidos: once de nacionalidad española y seis marroquíes. Se han intervenido cerca de un millón de euros en efectivo, diez vehículos de alta gama, una embarcación, relojes y joyas valoradas en más tres millones de euros, así como 18.000 euros en décimos de Lotería Nacional para el próximo sorteo de Navidad.

También se han intervenido inhibidores, pistolas detonadoras, teléfonos satelitales, varios dispositivos encriptados de comunicación, así como varios establecimientos a través de los cuales blanqueaban las ganancias de la actividad delictiva, habiéndose bloqueado cuentas, inmuebles y distintos bienes en el extranjero.

La operación ha sido llevada a cabo por el Grupo Central Antidrogas de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y la Fiscalía Delegada Antidroga del Campo de Gibraltar, coordinados por el Juzgado Mixto número 2 de San Roque (Cádiz), el cual ha ordenado el ingreso en prisión de todos los detenidos, salvo tres que ya fueron puestos en libertad en Barcelona a disposición del citado Juzgado.