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España

Feijóo promete hacer "política para adultos" y abrir el PP a "gente sin carné"

El nuevo presidente de los populares logra la foto con Rajoy, Casado y Ayuso en la clausura del Congreso para lanzar un mensaje de unidad en esta nueva etapa del partido

Alberto Núñez Feijóo, junto a Pablo Casado y Díaz Ayuso este sábado, en la clausura del Congreso Nacional en Sevilla. EFE

Alberto Núñez Feijóo clausuró el congreso del PP en el que ha sido elegido presidente este sábado con la imagen de la unidad que pide para esta nueva etapa. Una vez concluido el discurso, subieron al escenario Juanma Moreno, como anfitrión, y Cuca Gamarra y Elías Bendodo, secretaria general y coordinador general del nuevo PP. El gallego, sin embargo, pidió que se sumaran a la foto Mariano Rajoy, Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso.

También subieron, a continuación, otros dirigentes autonómicos como Fernando López Miras y Juan Jesús Vivas. Después de un mes de máxima tensión, los protagonistas de la peor crisis que ha vivido el partido en los últimos 30 años volvieron a posar juntos para escenificar el fin de la guerra civil y "reinicio" de la formación.

La instantánea puso el colofón a la primera intervención ante todo el partido Núñez Feijóo como presidente del PP.

En un discurso más político que el de la jornada previa, el dirigente gallego no solo volvió a reivindicar su experiencia y a pedir un partido unido, sino que también dejó clara cuál va a ser su estrategia de oposición al Gobierno y también la forma en la que gestionará el partido.

"Política para adultos"

Sobre su relación con el Ejecutivo de Pedro Sánchez, Alberto Núñez Feijóo reivindicó el carácter de partido de Estado del PP, y garantizó el apoyo al Gobierno para "agilizar las medidas que se necesitan, para "cesar a ministros", o "para no depender de nada ni de nadie de los que quieren fracturar España".

En todo caso, quiso lanzar una advertencia al presidente del Gobierno: "Que no se equivoquen. Negociación no es tibieza, diálogo no es sometimiento, los intereses de España no son los de este Gobierno. No nos van a presionar con descalificaciones y propaganda. No van a decir al PP y a los españoles lo que tenemos que pensar y hacer en todo momento. No vamos a dejar de hacer oposición. No seríamos leales a España si desde la oposición no hacemos oposición".

Negociación no es tibieza, diálogo no es sometimiento, los intereses de España no son los de este Gobierno

En ese sentido, añadió que "no vamos a ser el PP que quieren otros partidos. No lo vamos a hacer, porque nos está esperando un Gobierno, que ese sí que es el que quieren millones de españoles. Vamos a proponer lo que a España le puede ir mejor. Lo que nos distingue del resto de partidos que están en el Gobierno es que nosotros sabemos gobernar. Es una distinción determinante. Sabemos qué hacer con el poder".

Alberto Núñez Feijóo acusó a Sánchez de no saber hacer frente a las crisis, de condenar a España a la irrelevancia, y de generar debates vacíos que solo sirven para enfrentar a al sociedad: "España no está condenada a que estemos buscando el enfrentamiento por cualquier cosa. ¿Por qué nos vamos a enfrentar por la igualdad, contra la violencia, el rechazo al terrorismo, por la paz frente a la invasión y a los crímenes?".

¿Por qué nos vamos a enfrentar por la igualdad, contra la violencia, el rechazo al terrorismo, por la paz frente a la invasión y a los crímenes?

El presidente del PP se mostró contundente contra esta estrategia: "Basta ya de polémicas forzadas, de enfrentarnos, Dejemos los debates estériles, y vayamos a los problemas reales". A continuación, se preguntó "por qué los partidos políticos no pueden hablar" si en el día a día, en diferentes circunstancias y contextos, "la gente funciona y se entiende con ideas diferentes".

Volvió a usar, en este punto, una frase que ha usado durante las últimas semanas: "Yo no estoy aquí para insultar al presidente del Gobierno, sino a ganarle. Con todos vosotros. Pero, con todo el respeto, le pido que no oculte y que no insulte a la mayoría de los españoles. No voy a prejuzgar a nadie con los valores y el respeto que nos dio la Constitución, pero pido que la Constitución la respete todo el mundo".

De los ataques al Ejecutivo, Feijóo pasó a lanzar mensajes para otros partidos -Podemos y Vox- a los que no citó: "Guárdense sus carnés de demócratas de gentes del común, de patriotas... Hagamos políticas de adultos. Aquí cabemos todos. Esta es la España de todos, y este es el partido de todos los que quieran unirse a la España común".

Aquí cabemos todos. Esta es la España de todos, y este es el partido de todos los que quieran unirse a la España común

El presidente del PP apostó por "sacar la política española del enfrentamiento y de la hipérbole permanente. Del entendimiento interno: si no te apoyan en casa, poco puedes acreditar el entendimiento desde fuera. Es la forma en la que entiendo la política".

Abre el partido a independientes

A continuación, Alberto Núñez Feijóo anuncio que quiere contar, en su nuevo PP, con personas que no tengan el carnés del partido: "Empecé en la política como alto cargo del presidente Aznar y del presidente Fraga. He tenido responsabilidad en el Insalud y en Correos sin tener carné del PP. No me pidieron el carné del PP".

Fue entonces cuando dejó a las claras el partido en el que piensa: "Para trabajar conmigo no voy a pedir carné. Hay que afiliarse al PP por convicción, no por interés".

El presidente del PP recordó que "somos un partido de Gobierno" y el "más constitucionalista de España". Aprovechó, a continuación, para atacar al Gobierno y también a Vox: "No somos independentistas, ni nacionalistas, ni condescendientes con el independentismo. Somos el partido de la nación española [...]. No somos antieuropeos, somos el PP que lucha por la UE. No somos el partido que enfrenta a las personas por cuestiones de género. No somos ni un partido urbanita ni rural. Somos el partido de las ciudades, de las aldeas, de los pueblos. No estamos obsesionados con juzgar el pasado".

Advirtió, además, que "no somos un partido bisagra" ni "de aspiraciones pequeñas". Su objetivo, añadió, es recuperar el partido de siempre: "El que gana y quiere gobernar", sin detenerse en posibles sumas con otras formaciones.

Volvió a destacar que su meta es "ensanchar el partido" para sumar a más gente: "Nuestra vocación es integradora, es amplia. En lo pequeño y fracturado nunca hay soluciones. Hay gente que no cree en España pero le interesa cobrar la Seguridad Social española. Hay gente que se enfrenta y vive del enfrentamiento. No nos despistemos. Nuestra aspiración no es liderar un bloque de un partido con otros partidos".

Recuperar la confianza

En el último bloque de sus discurso, Feijóo recordó que ha recibido críticas de todas partes para advertir, a continuación, "que nadie cuente conmigo para esa política infantil". Añadió que "si yo tengo que dejar Galicia después de 13 años no es para presentarme a un juego. Vengo aquí a hacer una política seria. Si tengo que dejar Galicia es porque creo en mi nación, en sus capacidades. Me siento ilusionado y esperanzado".

También anunció que, una vez confirmada su designación como presidente del PP, anunció el resultado de la votación a Zarzuela: "Yo respeto al jefe del Estado y reivindico sus aportaciones a la nación. Acabo de comunicar a la Casa Real que me habéis elegido presidente del PP. Para mi es un honor".

Alberto Núñez Feijóo dedicó sus últimas palabras pare reivindicar la nueva etapa que se abre en el partido: "El PP es el único instrumento que tiene España para lograr el cambio que España necesita. Un cambio profundo y tranquilo, Del que no está excluido nadie, ningún español. Solo quiero dejar fuera del cambio el conformismo, la revancha, y el rencor".

Y se despidió con el siguiente compromiso: "Os prometo que voy a pedir la confianza de los españoles. Prometo que voy a trabajar para merecer la confianza de los españoles".

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