El Gobierno valenciano acuerda los Presupuestos de 2023 con el horizonte del aumento de déficit

La partida de ajedrez entre PSPV, Compromís y Podemos para la conformación de los Presupuestos de 2023 ha quedado en tablas y hoy la portavoz del Consell, Aitana Mas, ha confirmado que se ha cerrado el "acuerdo político". Las cuentas autonómicas crecerán el próximo ejercicio y provocarán un aumento del déficit y de la elevadísima deuda que soporta la Comunidad Valenciana por albergar partidas de ingresos que se sabe de antemano que no llegarán.

Los detalles presupuestarios se darán a conocer el próximo lunes y durante el fin de semana se cerrarán los detalles aún pendientes de confirmar. El crecimiento demandado por los diferentes departamentos del Ejecutivo autonómico valenciano al conseller de Hacienda, Arcadi España, dibujaban un escenario de subida muy elevado. Compromís y Podemos no querían frenar la inversión en un año que marca el final de la legislatura y el comienzo de un ciclo electoral en tres ámbitos: nacional, autonómico y local.

En torno al 6-7%

Las peticiones iniciales hubieran supuesto un crecimiento de casi un 15% pero a medida que pasaron las semanas de negociación esa presión de Compromís y Podemos hacia el titular de Hacienda (PSPV) se rebajó hacia el 10-11%. El compañero de Ximo Puig en la cartera de Hacienda que decide la conformación de los Presupuestos era partidario de no subir más allá del 3% por el contexto económico.

Finalmente, las fuentes consultadas por Vozpópuli cifran el aumento del Presupuesto entre el 6-7%, aunque las conversaciones del fin de semana entre los miembros de la comisión negociadora podrían determinar un mayor aumento o mayor contención en función de las renuncias que hagan las distintas Consellerias a última hora.

La comisión negociadora está formada por Andreu Ferrer y Alfred Boix (PSPV), Francesc Gamero e Iván
Castañon (Compromís) y Marc Aparici y Cristian Veses (UP). Ellos, junto a Arcadi España, deberán cerrar los detalles de los Presupuestos que hoy han pactado sus tres 'jefes' en el Gobierno valenciano: el presidente Ximo Puig, y los vicepresidentes Aitana Mas y Héctor Illueca.

La partida de 1.336 millones de euros para reclamar la infrafinanciación autonómica es la primera de las que no se cumplirá y provocará que el déficit crezca. Lo mismo sucederá con los 1.000 millones de euros que el año pasado correspondían a una aportación del Gobierno de España para la salida del COVID y que este año se rebautizará o se distribuirá entre diferentes departamentos.

La intención de estos Presupuestos, según el Gobierno valenciano, es ayudar a las familias a llevar mejor la situación de dura crisis económica en un contexto de elevada inflación que también supondrá que aumente el Capítulo II de gastos corrientes de las Consellerias. A ello se unirá el aumento del Capítulo I por el crecimiento del salario de los funcionarios aprobados por el Gobierno de Pedro Sánchez.

La portavoz del Consell, Aitana Mas, ha negado que la destitución esta semana de la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, haya facilitado el acuerdo porque "el Consell siempre está por encima de cualquiera de sus miembros". Y ha destacado que el acuerdo del Botànic demuestra que "está fuerte porque ha aprobado sus octavos presupuestos consecutivos en tiempo y forma".