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Comunidad Valenciana

La falta de una segunda pista en el aeropuerto de Alicante provoca pérdidas de 800 millones al año

El informe de los empresarios alicantinos también cifra en 14.000 el número de empleos anuales que se pierden por no ampliar la infraestructura aeroportuaria

Carlos Mazón, hoy junto al presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Baño GVA

El retraso en la construcción de la segunda pista en el aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández está provocando unas pérdidas anuales de 800 millones de euros según ha avanzado en su informe la Cámara de Comercio de Alicante.

Este documento llega después del presentado por los empresarios valencianos hace unos días para solicitar la ampliación del aeropuerto de Manises que haría aumentar la renta provincial en 1.000 millones anuales. Y se ha presentado también en la víspera de la reunión que la dirección de Aena va a mantener en Valencia con la consellera de Turismo, Nuria Montes, y la de Infraestructuras, Salomé Pradas.

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha asistido a esta presentación junto a las dos consejeras que protagonizarán mañana el encuentro con Aena, así como el alcalde de Elche, Pablo Ruz; el alcalde de Alicante, Luis Barcala; y el presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, Carlos Baño.

Pérdida de oportunidades

Mazón ha adelantado que este informe realizado por la entidad cameral alicantina se entregará mañana a la dirección de Aena y ha solicitado la modificación del actual marco inversor planificador porque “cada día de retraso es una pérdida de oportunidades”. 

Así, se ha referido a que cada jornada que pasa “perdemos 2,2 millones de euros y se dejan de crear cerca de 50 empleos”, por lo que ha rechazado el estudio de esta infraestructura en el próximo periodo de 2027-2031 “porque es un aplazamiento en sí mismo”.

Ha subrayado que esta reivindicación está acreditada técnicamente desde el rigor y asegura la capacidad turística sostenible de Alicante “con un crecimiento equilibrado, capaz de crear empleo”, así como el “esfuerzo en sacar adelante infraestructuras a pesar de ser la última provincia en últimos en los Presupuestos Generales del Estado”.

El mismo trato que Málaga

En su intervención, ha exigido al Gobierno de España el mismo trato que tuvo el aeropuerto de Málaga cuya ampliación “se puso en 2012 mucho antes de llegar al tope de su capacidad y mucho antes de llegar al punto en el que se encuentra Alicante". Málaga tiene a día de hoy una segunda pista y una conexión ferroviaria de la que carece el aeropuerto alicantino.

Carlos Mazón durante su intervención hoy en la Cámara de Comercio de Alicante GVA

Del mismo modo, ha propuesto la creación de una autoridad independiente de infraestructuras” en España al modo de la AIREF que priorice las inversiones estratégicas en función de datos objetivos”. 

En esta línea, ha criticado que la línea de AVE Alicante-Madrid, “la más rentable y concurrida de España haya sido la última en ponerse en marcha” y ha puesto en valor el retorno de inversión que ofrece la provincia de Alicante “cada vez que se invierte en ella”.

Al borde de la saturación

El informe elaborado por los técnicos de la Cámara de Comercio de Alicante concluye que en la actualidad el aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández está cerca de los niveles de saturación ya que las cifras de tráfico de pasajeros previstas para 2026 se han superado en 2023, con 15,7 millones de pasajeros.

Otra de las conclusiones que arroja el estudio es que la capacidad de crecimiento del aeropuerto se superará en 2026 con cerca de 20 millones de pasajeros y no podrá hacer frente a futuros aumentos del tráfico que podrían rondar los dos millones de pasajeros al año y cerca de 6.500 millones de gasto turístico en el periodo 2024-2030, según las previsiones del estudio empresarial. 

Ante estas cifras, el jefe del Consell ha exigido al Gobierno de España una respuesta a la reivindicación de la segunda pista de este aeropuerto “porque ya no hay que interpretar el alcance de esta necesidad”. 

Igualmente, ha agradecido el trabajo realizado por la Cámara de Comercio de Alicante del que ha afirmado que “es un aval técnico de primer orden y una garantía de rigor”.

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