El Valencia CF, cuya mayoría accionarial está en manos de Peter Lim, sigue dando pasos para consolidar sus activos inmobiliarios. Eso facilitaría así una venta de la participación del magnate singapurense a otros inversores interesados en reflotar el proyecto que está rumbo a Segunda división en esta temporada.
La reanudación de las obras del nuevo estadio que se produjo ayer (16 años después) no deja de ser cosmética: limpieza, restauración de elementos deteriorados, revisión de estructura... Eso se llevará por delante los poróximos 8 meses. Ahora bien, deberá cumplir unos hitos en forma de plazos y certificaciones de obra para recuperar la capacidad en 2027 de vender el actual solar donde se erige el campo de Mestalla.
Venta del terciario
Previamente el club deberá abonar los 11 millones de euros al Ayuntamiento de Valencia para realizar el polideportivo de Benicalap si quiere vender la zona terciaria del solar del nuevo estadio que tiene apalabrada con Atitlán por algo más de 35 millones de euros.
Cuando esto se produzca, habrá más capacidad financiera para acabar este recinto (ya cuenta con 80 millones de CVC) y con el que la actual dirección asegura que pasa buena parte de la viabilidad económica de la entidad.
El acto de reanudación de las obras fue interno, sin medios de comunicación, lo que ya indica la falta de transparencia que siempre ha rodeado la gestión de Peter Lim desde su desembarco en el club.
El nuevo estadio tendrá una capacidad para 70.000 espectadores y estará finalizado en verano de 2027. El proyecto final se desconoce porque nadie se atreve a vaticinar si va a sufrir modificaciones sustanciales, sobre todo, si hay cambio de propietario. Hasta la fecha ha habido cinco versiones diferentes del estadio proyectado inicialmente.
Mark Fenwick
El estudio de arquitectos encabezado por Mark Fenwick (Iribarren Architects) y la constructora FCC estarán al frente del proyecto que acabará costando, según las fuentes consultadas por Vozpópuli, alrededor de 240 millones de euros más de lo que ya ha costado lo edificado hasta la fecha.
El Valencia CF asegura que el nuevo estadio contará con una importante propuesta de entretenimiento los 365 días del año (restaurantes experienciales, ocio, megastore, museo, auditorio…), "convirtiéndose de esta manera en un enclave trascendental, vibrante e innovador para nuestros aficionados, que podrán vivir una experiencia completa y emocionante los días de partido y de no partido".
De igual modo, asegura en un comunicado que "uno de los grandes valores del nuevo estadio será la cubierta translucida que tamizará la luz mediterránea protegiendo de sol y lluvia el 100% de los asientos, ampliando el efecto acústico desde la grada al campo y sobre la que se implementará una instalación fotovoltaica".
El crédito de Goldman
La presidenta del club y mano derecha de Peter Lim, Layhoon Chan, reconoció que su vuelta a la presidencia del club (ha estado en dos etapas) se debe a la finalización del nuevo estadio que es el paso clave para que Lim pueda vender más caras sus acciones a un potencial inversor.
Para ello, el crédito que ha concedido Goldman Sachs al club (186 millones en un crédito y hasta 325 en otro que se está estudiando) incluye, además de estas cifras suficientes para acabar el estadio y afrontar problemas de liquidez interno, una búsqueda activa de compradores del paquete mayoritario de la entidad.
Esta cuestión podría concretarse a lo largo del presente año. Eso sí, la marcha deportiva del equipo puede variar la cifra definitiva de compra de la mayoría accionarial club si se concreta un descenso de categoría. Peter Lim sigue así convulsionando una entidad que ha descapitalizado deportivamente en los últimos 6 años.