Cs negocia con el rival de Aguado el fin de la causa judicial sobre las primarias en Madrid

Ciudadanos mueve fichar para cerrar una de las causas judiciales que pesan sobre sus primarias. La formación de Inés Arrimadas ha tendido la mano a Juan Carlos Bermejo, principal rival de Ignacio Aguado en las elecciones internas de Madrid de hace más de un año, para intentar llegar a un acuerdo extrajudicial que evite un más que posible juicio, según informaron fuentes de la defensa de Bermejo a Vozpópuli.

El partido liberal se encuentra en una situación incómoda con los procesos de primarias aún bajo investigación -Murcia y Madrid- una vez que hace medio año la Fiscalía dio carpetazo al proceso electoral más polémico, el de Castilla y León. Esta misma semana se supo que la UDEF criticó a Cs por omitir datos al juez de instrucción de Cartagena que lleva el caso de los comicios que ganó Isabel Franco.

En Madrid, el objetivo de la formación naranja es intentar llegar a un acuerdo. Bermejo ha trasladado a la dirección del partido, a través de su abogado, su disposición a lograr un compromiso que mejore los mecanismos internos de representación y gestión. Y en el equipo de Arrimadas ha habido receptividad a la oferta y se está estudiando.

El principal rival de Aguado en las primarias madrileñas de marzo de 2019 denunció en su momento que se le había discriminado a la hora de acceder a los canales oficiales del partido durante la campaña y que el hoy vicepresidente de la Comunidad de Madrid vulneró la obligación de no hacer declaraciones públicas el día de reflexión.

Ceses en Cs Madrid

Ahora ha enviado un escrito al partido en el que pide que reconozca públicamente las deficiencias en aquellas primarias y que se comprometa a aprobar un reglamento para celebrar "con todas las garantías" los procesos internos de selección de candidatos. También reclama el compromiso de Cs de localizar en las agrupaciones territoriales dicha selección de candidatos "sobre la base de su arraigo" en las mismas y evitar, de esta forma, representantes cuneros.

Asimismo, Bermejo considera que se debe cesar y sustituir a los actuales secretarios madrileños de Organización, César Zafra, y de Acción Institucional, Francisco Lara, "ante el deterioro que se está produciendo en la relación del partido con sus miembros y simpatizantes".

También pide entrar en el equipo económico nacional de Cs "a fin de contribuir con su experiencia en el desarrollo de las políticas económicas a promover por Cs". Todo ello sin asumir cargo ejecutivo ni remuneración, al tiempo que solicita el compromiso de su partido en la Comunidad de Madrid de "reducir" el número de consejerías "dado el contexto económico actual e inmediato futuro".

Sobre la situación judicial en Murcia tras el informe de la UDEF, Bermejo considera "totalmente incomprensibles" las razones por las que el partido no ha entregado la documentación requerida al juzgado, "y en ningún caso este comportamiento se corresponde con los valores y código de conducta reflejados en el ideario de nuestro partido, de colaboración con la justicia, y que todos los afiliados, y en especial los dirigentes del partido, están obligados a cumplir".

De plazo hasta el lunes

Por todo ello, ha incluido entre sus peticiones la condición de entregar dicha documentación al juzgado de la Murcia y a la UDEF "en un plazo no superior al 27 de julio de 2020 a las 23h", con el fin de que el próximo Comité Ejecutivo naranja pueda evaluar su propuesta. "En el caso de que la dirección del partido no obrara de esta forma, solicitaremos la reapertura del caso en el juzgado 61 de Madrid, dejando en manos de la justicia la resolución del mismo", sentencia Bermejo.

En aquellas primarias internas en la Comunidad de Madrid, el actual líder de Ciudadanos en región, Ignacio Aguado, recibió el 79 por ciento de los votos de los afiliados (1.277). Competía con otros 14 aspirantes, entre ellos el citado Bermejo, que es empresario y militante de Cs en la localidad de Las Rozas. Tras aquellos comicios internos ya subrayó que el sistema electrónico era "poco seguro" y apoyó la idea de que los militantes pudiesen, al menos, enviar un mensaje por móvil antes de ejercer su derecho al voto.