A un paso de las elecciones municipales, Ada Colau anota un suspenso. El 50,4% de los barceloneses desaprueba la gestión de la alcaldesa de Barcelona al estipular que la inseguridad y la suciedad siguen siendo problemas llamativos y crónicos. Así lo refleja el barómetro del Ayuntamiento de Barcelona que refleja que el 24,8% de los ciudadanos de la ciudad condal no se sienten seguros en la metrópoli y el 15,8 percibe que la ciudad esta sucia. Unos datos que han aumentado desde la última encuesta en dos y cuatro puntos respectivamente. Junto con Colau, la mayoría de los barceloneses también suspenden a la Generalitat de Cataluña, ya que el 48% cree que su gestión ha sido 'mala o muy mala'.
El descontento en Barcelona toma tintes generalizados por los problemas de robos y violencia en la ciudad y el mal mantenimiento público, algo que ya hace tiempo que se le achaca a la alcaldesa al no tomar 'cartas en el asunto'. La capital catalana volvió a las cifras récord de criminalidad: es la ciudad con la mayor cantidad de robos con violencia e intimidación en todo el territorio español por noveno mes consecutivo contando diciembre, según los últimos datos facilitados por el Ministerio del Interior, los cuales apuntan que hasta el tercer trimestre de 2022 se han contabilizado un total de 9.641 casos, lo que supone un aumento del 30,7% con respecto al mismo periodo del año 2021.
Esta desconexión entre la alcaldía y la calle tiene su repercusión en los datos del barómetro, ya que el 66,4% de los barceloneses cree que la ciudad ha empeorado respecto al último año. Se trata de una de las cifras más bajas en este sentido, que sigue en una espiral de descenso desde que en diciembre 2019 el 68% de los encuestados creyera que la ciudad de Barcelona ha empeorado respecto a diciembre del año anterior.
La criba de información pública se ha recopilado con una cifra relativamente baja de participación, 800 barceloneses, respecto al 1,6 millones de personas que viven en la ciudad. Aún así, la mayoría de ellos apunta a la inseguridad de las calles como problema más grave en la urbe por delante de los problemas económicos y las condiciones de trabajo, que eran los temas que más preocupaban a los barceloneses desde 2010 a 2017. Llama la atención que el cuarto "problema más grave" de la opinión pública barcelonesa sea directamente 'la gestión política municipal' con un 6,6% por delante de los problemas de vivienda que están en el tercer puesto de las preocupaciones con el 7,6%.
Récord histórico de mala gestión
Desde que se tienen datos de este barómetro municipal, nunca una gestión de una alcaldía había recabado un dato tan malo. El 50'4% de Colau es el 'techo' de peor valoración de un alcalde de Barcelona desde 1990. Tan solo tiene el precedente, en junio de 2010, antes de la llegada de Xavier Trias, cuando Jordi Hereu daba los últimos coletazos en su mandato. Con este panorama, la alcaldesa ya ha anunciado que encabezará la única candidatura de BComú para las elecciones municipales de 2023, que se celebrarán en mayo, y próximamente la organización impulsará una serie de encuentros entre la cabeza de lista y los activistas de la formación.
