Mañana movida en las Ramblas. En medio del minuto del silencio por el quinto aniversario del 17-A, donde 16 personas fueron asesinadas por un atropello masivo yihadista, decenas de independentistas han aparecido con pancartas que criminalizaban al Estado: "Queremos la verdad", "España asesina" o, lo que es peor, "¿Fue terrorismo de Estado contra el deseo de independencia de los catalanes?". La irrupción, tildada ya de "miserable" por ERC, podría haberse quedado en algo anecdótico de no ser por la grave ofensa a las víctimas, que han declarado que lo ocurrido les ha hecho "mucho daño", y el saludo posterior de la suspendida Laura Borràs. Tras el acto, además, ha habido un enfrentamiento a gritos entre víctimas e independentistas.
El apoyo público de la representante de Junts va en la línea con la línea conspiratoria que, desde que ocurrió el atentado de las Ramblas, lleva defendiendo la formación bajo el amparo de Carles Puigdemont y, sobre todo, reforzó ante el temor a que el Estado pudiera interferir en el referéndum ilegal que se iba a celebrar un mes y medio después. La supuesta sospecha sobre el CNI con lo ocurrido, defienden, se debe una "relación" entre el imán del Ripoll con los servicios de Inteligencia. Esto es lo que ha llevado al grupo independentista presente a boicotear el acto para pedir "verdad".
El grupo que ha irrumpido son ¡, por tanto, seguidores de Junts e independentistas radicales de otros grupúsculos como Catalans Per la Independència. Han llegado a enfrentarse a las víctimas acusándolas de "blanqueo" y su afinidad con la líder de Junts ha quedado en evidencia (han aclamado a Borràs con gritos de "¡presidenta!"). Cabe destacar en este punto que Borrás está inhabilitada desde julio por el Parlment en sus funciones por el proceso judicial que enfrenta por el amaño de contratos en la Institució de les Lletes Catalanes. La defensa del boicot por parte de Borràs ha hecho que la formación choque con un bloque que incluye tanto a ERC, como al PSOE y En Comú Podem que han dado respaldo a las víctimas.
Por su parte, para defender la postura de la formación y las crecientes críticas, el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha asegurado que el mejor homenaje que se puede hacer a las víctimas de los atentados terroristas del 17-A en Barcelona y Cambrils (Tarragona) es "saber toda la verdad". "No es justo ni es humano negar a las víctimas el derecho a saber. Y es la mejor manera de aclarar dudas y responsabilidades", ha afirmado en varios apuntes en Twitter.
JxCAT recula tras las críticas
Después de que Laura Borrás saludara a los miembros del boicot han llovido las críticas a Junts y se ha desmarcado de los ciudadanos que no han respetado el minuto de silencio en el acto de las víctimas. Momentos más tarde, la formación ha expresado su "más enérgico rechazo" a la interrupción del minuto de silencio. En un mensaje a través de su cuenta de Twitter, JxCat ha reiterado su apoyo a las víctimas de los atentados y a sus familiares: "Por este motivo, queremos expresar el más enérgico rechazo a la interrupción del minuto de silencio de hoy en las Ramblas de Barcelona". Sin embargo, los postulados de las personas que se han manifestado comulgan con lo que Puigdemont lleva defendiendo todos estos años en lo que se refiere a teorías conspirativas del 17-A.
En Comú Podem y ERC: "Es una falta de respeto"
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de en Comú Podem, ha lamentado que decenas de independentistas hayan boicoteado el acto institucional. En sus declaraciones posteriores, Colau ha señalado que "algunas víctimas venían de muy lejos, de Holanda, de Alemania, de Australia, para participar en este acto de memoria y de duelo. No se merecían que hubiera un grupo reducido que quisiera lanzar sus mensajes políticos".
La alcaldesa ha invitado a una reflexión colectiva, sobre todo a las personas que han protagonizado el acto de boicot, y ha pedido que esto "no se vuelva a repetir jamás". Colau no ha querido "entrar en polémicas con nombres propios" por respeto a las víctimas, por lo que ha declinado opinar sobre la actuación de Borràs. Aún así, ha señalado que "si ha habido cargos institucionales que han salido a avalar este acto de boicot, se retratan por sí mismos y no representan a la mayoría de esta ciudad".
Por su parte, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha criticado la protesta durante el minuto de silencio del homenaje a las víctimas de los atentados del 17-A en Barcelona y Cambrils (Tarragona), que ha tachado de "miserable". "No respetar un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas de un atentado es miserable. Y sacar rédito político de ello, despreciable. No en mi nombre", ha sentenciado en un tuit.
