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Cataluña

La Generalitat desafía al Gobierno y continúa con el despliegue de sus embajadas

La sustitución de Ernest Maragall por Alfred Bosch al frente de la Consejería de Acción Exterior de la Generalitat y la mini-cumbre encabezada por Torra y Sánchez el pasado 20 de diciembre no han servido para frenar el despliegue de las embajadas de la Generalitat.

La bolsa de trabajo del Colegio de Periodistas de Cataluña publicó con fecha 27 de diciembre una oferta de trabajo para cuatro posiciones del Diplocat (Consejo de la Diplomacia Pública de Cataluña): Director comunicación y Prensa, Responsable de comunicación, Responsable de prensa y Técnico senior de comunicación en la delegación del gobierno catalán en Estados Unidos. Esta última plaza estará especialmente atareada desde que tome posesión dado que los dos congresistas que habían mostrado más entusiasmo con el procés, Brian Higgins y Dana Rohrabacher, perdieron sus escaños en las elecciones del midterm celebradas el pasado mes de noviembre.

Diplocat contrata a cuatro responsables de comunicación, uno de ellos para la pseudoembajada de la Generalitat en USA

La convocatoria tiene por objetivo reforzar la ofensiva exterior de la Generalitat. Desde la perspectiva política del gobierno encabezado por Torra supone cumplir con su compromiso de reapertura de todas sus embajadas y es coherente con el objetivo declarado por Puigdemont de reforzar la política de propaganda en el ámbito exterior mediante el recientemente constituido Consejo de la República.

La reapertura de las llamadas embajadas se plasmó en un Decreto del ahora candidato a la Alcaldía de Barcelona por ERC, Ernest Maragall, el pasado 26 de junio. El decreto establecía la reapertura de las delegaciones pseudodiplomáticas catalanas en Reino Unido e Irlanda, Alemania, USA, Italia, Suiza y Francia.

La decisión del nuevo conseller, Alfred Bosch (ERC) de convocar estas cuatro plazas a los pocos días de la reunión entre Torra, Artadi y Aragonès con Sánchez, Calvo y Batet como si casi se tratara de una cumbre bilateral, es una nueva provocación del gobierno catalán y un torpedo en la línea de flotación de la estrategia de Sánchez sobre Cataluña basada en la distensión y el ofrecimiento de diálogo. No obstante, a finales de agosto el Ministerio de Exteriores, encabezado por Josep Borrell, recurrió vía contencioso administrativo, ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) el decreto de reapertura de las oficinas de acción exterior de la Generalitat.  

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