Quantcast

Cataluña

Las comisiones más 'cutres' del 3%: entradas para el Madrid-Barça, cigalas y "tres días de ensueño"

Carvalho, durante su etapa en el Real Madrid

La situación en Catdem y Fòrum Barcelona ya era tan delicada tras las informaciones publicadas en prensa que a partir de 2014 el sistema de pagos de comisiones ilegales comenzó a cambiar. Los exaltos cargos de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) aceptaban entradas al Bernabéu para presenciar un Madrid-Barcelona, o bien cigalas en un conocido restaurante de uno de los barrios más lujosos de Madrid.

Así consta en el auto del juez José de la Mata, al que ha tenido acceso Vozpópuli, y por el que se ha imputado a quince empresas y exaltos cargos de la extinta CDC.

Es el caso de la ampliación de la línea de Ferrocarrils de la Generalitat de Cataluña a Sabadell, adjudicada a la UTE Benito Arno e Hijos, Oproler y Mercadomotika el 12 de septiembre de 2014, un día después de la Diada en Cataluña. El contrato fue de 14,42 millones de euros.

El empresario Josep Manel Bassols, quien se arrepintió y señaló a Artur Mas como el dirigente de la trama, estaba al frente de la UTE formada por Benito Arno e Hijos, Oproler y Mercadomotika. La UTE no aceptó el pago a las fundaciones Catdem y Fórum Barcelona, sino que ofrecieron al director de Infraestructures, Josep Antoni Rosell Polo, la posibilidad de asistir al Clásico entre el Madrid y el FC Barcelona en el Bernabéu, añadiéndose el pago de una comida en "La Trainera", un restaurante de moda en aquel entonces y cuya especialidad es el marisco. 

Los invitados a este partido fueron Xavier Lerma Verde y Andreu Viloca, el extesorero de CDC, quien no pudo asistir. La comida, una jugosa cigala, corrió a cuenta de Oproler. Bassols se acordó del expolítico y le adjuntó una fotografía de la suculenta pieza de marisco.

La misma empresa Oproler percibió otro contrato de 854.579,85 euros para construir un carril bici. A cambio de esta adjudicación, dos días después de Reyes de 2014, se invitó a una comida al director general de la empresa pública municipal Bimsa, Ángel Sánchez Rubio, y al director técnico de infraestructuras de la misma compañía, Ernest Santolaria. La anotación en la contabilidad comercial fue "compra regalo navideño".

"Tres días de ensueño Gourmet"

En la Visa de Oproler de ese mismo mes aparece una factura de El Corte Inglés por valor de 579,86 euros por "tres días de ensueño Gourmet". El mismo 9 de enero consta la comida de Bassols con Sánchez y Santolaria. Ninguno de los dos cargos públicos ha perdido su asiento con la llegada de Ada Colau, que espera aún una sentencia firme para tomar una decisión.

El 14 de enero de ese mismo año, la agenda de Bassols apunta al pago de 30.000 euros por la UTE carril bici, sin conocerse el destinatario. Al día siguiente había anotada una reunión con Sánchez Vera. De la Mata había apuntado que Santolaria estaría involucrado en dos adjudicaciones por "trato de favor" a Oproler.

El resto de empresas, Urbaser, Fundación ACS, Costraula Enginyeria, Grup Soler, Copisa, Tec Cuatro, Pasquina, Ayesa, Deco, Certis, Impulsa Ortiz y Teyco habrían pagado las comisiones a las dos fundaciones vinculadas a Catdem y Fòrum Barcelona.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.