Un cartel feminista, retirado por acusaciones de racismo. Ha sucedido en Santa Coloma de Farners, donde el Ayuntamiento, en manos de Junts per Catalunya, se ha visto impelido a retirar un anuncio que incentivaba la defensa personal femenina tras recibir acusaciones de "criminalizar" a las personas "racializadas". En la imagen original, que el Ayuntamiento difundió a través de redes sociales, se aprecia una mujer —de espaldas, pero que podría ser asiática— defendiéndose de un hombre de raza negra. Se trata de una actividad promocionada por el consistorio en contra de la violencia de género y con motivo de la próxima celebración del Día de la Mujer Trabajadora, el 8 de marzo.
La imagen ha sido censurada después de que la Coordinadora ONGs Solidàries demandase al Ayuntamiento su retitrada por considerar que estigmatizaba a las personas de raza negra. Según el copresidente de la entidad, Lluís Puigdemont, se trata de una imagen "inaceptable, tendenciosa" y que discrimina a un "colectivo", tal y como ha expresado en declaraciones a 'El Punt Avui'. El consistorio ha accedido a la demanda y ha sustituido el cartel original por otro en el que se prescinden de personas reales y se muestra a dos siluetas, una de un hombre y otra de una mujer —ambos de raza caucásica— peleando entre ellos.
En cualquier caso, aunque la alcaldesa Carme Jalamanya, se ha prestado a la retirada de la imagen para evitar controversias, no ha dejado de señalar al mismo diario que "si fuera al revés nadie se habría quejado". De su parte, el portavoz de la CUP en el municipio, Ousman Jangana, también exigió la retirada del cartel. "Sigo alucinando con cómo desde un Ayuntamiento se puede hacer una publicidad tan errática como la que hace este Equipo de Gobierno. ¡Es indignante!", señaló en redes sociales.