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Así es un campamento pionero por especializarse en jóvenes superdotados

Las personas de alta capacidad suelen sentir estrés constante debido a que tienen que adaptar sus mentes, su humor y su conocimiento al resto de alumnos. "Nos adaptamos a ellos, ya que ellos lo hacen el resto del año"

Así es un campamento pionero por especializarse en niños y adolescentes superdotados

Los campamentos de verano son una magnífica solución para que los niños sigan aprendiendo durante el verano al mismo tiempo que permite a los padres conciliar con más facilidad la vida laboral y del hogar. El 'problema' surge cuando tienes un hijo de alta capacidad, conocido habitualmente como superdotado: estos niños tienen un cerebro diseñado para aprender y en muchas ocasiones, tienen que adaptarse al ritmo de sus compañeros, algo que en muchas ocasiones puede acarrear ciertos problemas sociales y trastornos para estos pequeños.

Es por este motivo que Jana Martínez-Piqueras, experta en altas capacidades, ha decidido diseñar un campamento exclusivo para estos niños tan especiales que en estos momentos está viviendo su primera edición. "Les quiero regalar trece días de confort y de estar a gusto consigo mismos", señala Vozpópuli, ya que al relacionarse entre intelectos iguales, no tienen que adaptarse a lo que les rodea, "algo que tienen que hacer el resto de días del año".

Señala que los niños de alta capacidad suelen convivir con altos niveles de estrés ya que les cuesta socializar al no ofrecerles "un grupo del que retroalimentarse". Además, saben que les sucede algo, pero no saben bien el qué. Este es otro de los motivos principales del campamento: permitir que se conozcan mejor a sí mismos.

Jana Martínez-Piqueras señala que "hasta el humor es distinto", ya que estas personas desarrollan la ironía y el sarcasmo a los 5-7 años. Esto hace que sus bromas "no sean entendidas por los demás y al mismo tiempo, no reírse con los chistes de los otros niños".

Jana Martínez-Piqueras señala que "hasta el humor es distinto", ya que estas personas desarrollan la ironía y el sarcasmo a los 5-7 años. Esto hace que sus bromas "no sean entendidas por los demás y al mismo tiempo, no reírse con los chistes de los otros niños"

Otro problema común entre las personas de alta capacidad son los trastornos alimenticios, especialmente en mujeres, ya que "el segundo órgano después del cerebro con más neuronas es el estómago. Tengo chicos con depresión y chicas con anorexia y el origen está en el entorno educativo", cuenta Martínez-Piqueras a Vozpópuli.

Cuenta que este campamento, desarrollado bajo el paraguas de TechTalents, "se realiza en un entorno adaptado para ellos, con sus ritmos y flexibilidad horaria". Es decir, que las actividades no están cerradas: si una de ellas ha cautivado a los jóvenes y les lleva más tiempo, se aplaza lo demás para que puedan seguir alimentando su curiosidad.

El lugar elegido para el campamento es la Granja del Ayer, en Villanueva de Perales (Madrid) y está pensado para niños y adolescentes de entre 10 y 18 años, aunque tal y como cuenta Jana Martínez-Piqueras a Vozpópuli, hay jóvenes de hasta 20 años. En este campamento se hacen talleres de ciencia o de narrativa, además de recibir a ponentes expertos en nutrición, gestión del estrés, medios de comunicación e incluso, de seguridad informática. Todo lo necesario para estimular sus cerebros.

"Los monitores también son personas de alta capacidad que han estado trabajando con nosotros", indica Jana, por lo que estos jóvenes tan brillantes también son guiados por personas que han pasado por los mismos problemas que ellos. Es un campamento pensado "de la alta capacidad para alta capacidad".

Con este campamento de verano, las personas con alta capacidad pueden trabajar "entre iguales" y de esta forma, desmentir el mito de que no quieren trabajar en equipo. "El problema es que su cerebro funciona más rápido y sienten que el ritmo de los demás es demasiado lento"

Con este campamento de verano, las personas con alta capacidad pueden trabajar "entre iguales" y de esta forma, desmentir el mito de que no quieren trabajar en equipo. "El problema es que su cerebro funciona más rápido y sienten que el ritmo de los demás es demasiado lento", afirma Martínez-Piqueras, algo que genera estrés y muchas dificultades para socializar, algo fundamental en las primeras fases de la vida.

Según ella, crítica con el sistema, esto es algo que solo pasa en el ámbito de la educación: "En natación, no se pone en la misma clase a una persona avanzada con otras que están aprendiendo". Es más, cree que de hacerse, se vería como algo malo. Sin embargo, la educación se basa en la edad, "aunque su reto cognitivo necesario sea mayor" y eso es algo que no se cuestiona.

Es por este motivo que este primer campamento para personas de alta capacidad es un instrumento ideal para que estos jóvenes disfruten y compartan espacios con otros que poseen sus mismas virtudes, pero que también sufren problemas similares.

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