Publicado: 06/08/2015 15:23
La sombra de la moción de censura se cierne sobre el Palacio de Cibeles. La intempestiva defenestración de Antonio Carmona como portavoz municipal del PSOE ha agitado las aguas del Consistorio, que bajan demasiado revueltas a esta altura de la temporada. Carmona, luego de ser defenestrado de su cargo como portavoz, declaró formalmente la guerra política a Pedro Sánchez y aseguró a los medios que no descarta ser alcalde de Madrid y, al tiempo, convocó a la militancia a movilizarse contra la actual dirección. Un gesto voluntarista, aunque quizás obligado. La duda es si, en el caso de movilizarse para desplazar a Manuela Carmena del Consistorio, lograría su empeño de sentarse en el sillón de la alcaldía o quizás tendría que cedérselo a Begoña Villacís, la líder municipal de Ciudadanos. Un asunto del que no se ha hablado y que, sin duda, sería fuente de polémicas.
La única posibilidad de que Carmona consiga ser alcalde pasa por que presente una moción de censura con apoyo de Ciudadanos y el Partido Popular
La única posibilidad de que Antonio Carmona consiga convertirse en primer edil de la capital pasa por que presente una moción de censura que cuente con el respaldo de Ciudadanos y el PP para redondear la mayoría absoluta que derribe al gobierno de Manuela Carmena. Begoña Villacís, jefe de filas del partido de Albert Rivera, saltó este miércoles al ruedo y aseguró que su formación no descarta nada; que todo es posible; que hay que romper el tabú de la moción de censura y que están atentos a lo que pueda ocurrir en los próximos días. En el PP son partidarios, desde el primer día postelectoral, de un acuerdo con PSOE y Ciudadanos para desalojar del Consistorio a Ahora Madrid.
Ya dejó dicho Esperanza Aguirre, tras los comicios, que la plataforma de Carmena es una marca blanca de Podemos, partido que pretende acabar con el régimen constitucional establecido en 1978. Ahora, la líder del grupo del PP, ha enmarcado esta crisis en la obsesión de Pedro Sánchez de alcanzar el poder como sea. "Ha llegado a la conclusión de que sólo lo podrá hacer de la mano de Podemos y no quiere que nadie interfiera en sus relaciones con los podemitas".
El puñetazo de Sánchez
La presidenta del PP madrileño aseguró también que "Sánchez ha querido demostrar a sus correligionarios que en el PSOE de Madrid también manda él y por eso ha necesitado derribar a Carmona, igual que, en su momento, hizo con Tomás Gómez". Un puñetazo para consolidar su incierto liderazgo. Susana Díaz, que dedica estas jornadas estivales a cuidar de su bebé, se muestra singularmente activa en sus contactos con dirigentes del partido, con quienes valora y analiza la situación creada. La líder andaluza no para, aunque su accidentado proceso de investidura dejó su imagen interna levemente perjudicada. El CIS de ayer no arrojaba precisamente unos datos demasiado positivos para el PSOE, aunque su secretario general conseguía unos resultados aceptables.
Fuentes del PSOE aseguran que pretende que Ferraz reconsidere su postura e intente neutralizarlo con un escaño en el Congreso
Pero nadie cree capaz a Carmona de dar el paso al frente, pese a que la suma de Ciudadanos, PP y los cuatro concejales socialistas contrarios al oficialismo de Ferraz sumarían 31 escaños, dos más de los que se precisan para la mayoría absoluta. Carmona no se ha puesto en contacto ni con PP ni con Ciudadanos para sondear esta posibilidad. Tampoco sus concejales afines han actuado en este sentido. Así las cosas, ni PP ni Ciudadanos consideran oportuno dar el primer paso para escrutar la posibilidad de la moción. "Carmona no se mueve, no para de hablar, de proferir amenazas, de hacer ruido, pero resulta patético", comentaban fuentes del PP.
Purificación Causapié, la nueva portavoz socialista, es una desconocida tanto para buena parte de la militancia socialista como para los madrileños, pero es una persona de la absoluta confianza de Sánchez. Su papel es intentar limar la fractura interna del grupo municipal y mantener la línea de cooperación con la alcaldesa Carmena. Para ello habrá de tranquilizarla sobre las especulaciones en torno a una sobresalto en un futuro inmediato.
Una oferta de enjundia
El concejal degradado de su puesto como portavoz rechazó, en sus incesantes apariciones ante los medios, el ofrecimiento de trasladarse a ese cementerio de elefantes en el que se ha convertido el Senado. Carmona "no tiene precio", dijo con toda humildad, y rechazó esa posibilidad de convertirse en senador porque es muy posible que espere otra compensación. Fuentes del PSOE consultadas por este diario aseguran que con el escándalo político que está montando pretende que Ferraz reconsidere en parte su postura e intente neutralizarlo con una oferta que no podrá rechazar. Quizás un escaño en el Congreso de los Diputados, donde incluso podría funcionar de puente ante Ciudadanos en el caso de que Pedro Sánchez precise el apoyo de Rivera para alcanzar la Moncloa.
Un Antonio Carmona en las listas del PSOE para las elecciones generales despejaría todo riesgo de una sorpresa en el Ayuntamiento madrileño. Ahora se recuerda cómo el defenestrado se abrazaba desconsoladamente a Tomás Gómez cuando su purga y, a las 24 horas, se ofrecía ya abiertamente como su sucesor en la cúspide de los socialistas madrileños. El concejal veleta quizás también ahora module su planteamiento inicial.
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