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España

El mejor amigo de Sánchez recibió ‘a dedo’ 15.000 euros por “definir” el Museo de Arquitectura

El Gobierno encargó ‘a dedo’ el proyecto de “definición” y “conceptualización” del Museo Nacional de Arquitectura a Rica Studio, el despacho de Ignacio Carnicero, el mejor amigo del presidente Pedro Sánchez. La empresa del recién nombrado director general de Arquitectura recibió –por parte de la misma Dirección General que ahora ocupa- un contrato de 15.000 euros por el método de adjudicación directa, según ha informado este lunes el diario ABC, cuyas fuentes sostienen que ambos tenían “mucho interés” en este museo y “sondearon qué posibilidades había, meses antes de que acordaran el enchufe de Carnicero en la nueva dirección general”.

El encargo se materializó el 15 de marzo de 2019 un “trabajo de consultoría para la conceptualización, definición de la estructura, propuesta de contenido y estudio de instituciones internacionales similares al futuro Museo Nacional de Arquitectura”, un proyecto que fue impulsado durante la etapa del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y que nunca llegó a prosperar. El resultado de este trabajo debería haber sido presentado el 20 de noviembre del pasado año.

No ha sido el único trabajo que Rica Studio ha recibido por parte del Ejecutivo. El despacho de Ignacio Carnicero ya fue adjudicatario el 15 de noviembre de 2018 –ya con Pedro Sánchez como presidente- de un proyecto para “adecuación” de las “obras en la rampa de acceso no discriminatorio en el Museo Nacional de Antropología de Madrid, así como la dirección y coordinación de seguridad y salud en fase de ejecución”, por el que cobró 7.000 euros más IVA por parte de la Gerencia de Infraestructura y Equipamientos del Ministerio de Cultura.

Tres proyectos con el PP

Además de esos dos contratos, con anterioridad, el estudio de Ignacio Carnicero resultó adjudicatario de otros tres proyectos durante la etapa del PP en el Gobierno. El 30 de mayo de 2017, Rica Studio consiguió el primer contrato de la Dirección General de Arquitectura, Vivienda y Suelo para el “diseño, control de la producción y Dirección y seguimiento del montaje y de la exposición Unfinished en la República Dominicana, conferencias y actividades vinculadas a la exposición en Santo Domingo y Sidney" por un importe de 17.980 euros netos.

En marzo de 2018 cobró otros 5.000 euros relacionados con esta exposición, pero le pagó otro organismo, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). El concepto fue "comisariado y supervisión de montaje de la de la exposición Unfinished en sus itinerancias en México y Santiago de Chile incluyendo asistencia a la rueda de prensa".

Según apunta el rotativo de Vocento, la empresa de Ignacio Carnicero nunca ha presentado cuentas en el Registro Mercantil. Rica Studio SL fue inscrita en por Carnicero en noviembre de 2014 y el 5 de diciembre logró su primer contrato público con el Gobierno: 17.950 euros de la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos del Ministerio de Cultura para la "redacción de proyecto de mejora y optimización de las condiciones de accesibilidad y facilidad de uso en el área pública del Museo Nacional de Antropología de Madrid".

Durante estos dos últimos años de Gobierno socialista, el despacho de Carnicero ha facturado 21.900 euros, más de la mitad con respecto a los 40.960 euros que Rica Studio percibió por parte del Ejecutivo de Rajoy. Para el diario ABC, se trata de una nueva prueba que apunta al presunto ejercicio de nepotismo por parte de Pedro Sánchez al aupar a su amigo de toda la vida Ignacio Carnicero, que fue nombrado la pasada semana al frente la Dirección General de Agenda Urbana y Arquitectura.

El nombramiento de Ignacio Carnicero como director general de esta área ha requerido la partición de la sección de Arquitectura y Agenda Urbana, que hasta hace seis meses había estado anexa a Vivienda y Suelo, dependientes del Ministerio de Transportes, dirigido por José Luis Ábalos. Y la elección de Carnicero se ha consumado arguyendo la falta de funcionarios capacitados para el puesto, una excepción legal que ha sido cuestionada por las asociaciones profesionales de empleados públicos.

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