Publicado: 29/02/2012 18:59
El consejero delegado del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián, se ha embolsado 8,4 millones de euros en 2011. Así lo refleja el anexo a los resultados anuales presentado por el grupo de comunicación a la CNMV y en los que Prisa registró unas pérdidas de 395 millones de euros en el año 2011. Prisa ha caído un 8,72% en bolsa después de presentar sus resultados.
Según el documento remitido al regulador, Juan Luis Cebrián percibió un millón y medio de euros en metálico: 300.000 euros en concepto de salario y 1,2 millones como “compensación extraordinaria por la refinanciación de la compañía”. Además de esa cantidad en efectivo, el directivo de Prisa se embolsó 5 millones de euros por lo que la comunicación a la CNMV describe como el “éxito de la recapitalización de la sociedad”. Por último, percibió 1,7 millones de euros en concepto de “compromiso de permanencia” para que siga en el cargo durante un periodo de tres años.
La venta de Prisa fue lucrativa para sus directivos
La refinanciación del grupo y su venta a Liberty ha reportado ingresos no sólo para el consejero delegado de Prisa. El abogado de la sociedad, Matías Cortés, también se embolsó casi 5 millones de euros (4.896.000 euros) por intermediar en esa operación. Esa misma labor de asesoría jurídica reportó 100.000 euros al consejero Gregorio Marañón, según la información remitida a la CNMV.
Las remuneraciones millonarias a su cúpula coinciden con el año de los ajustes en el grupo editorial que ha realizado un ERE en la Cadena SER y ha sometido a su plantilla a una rebaja de salario voluntaria del 7%. De igual modo, el resto del equipo de dirección ha tenido que encajar la pérdida de vehículos de empresa, dietas y otras remuneraciones.
Pérdidas de 2011
Prisa perdió 451,29 millones de euros en 2011, seis veces más que en el ejercicio anterior, ya que sus cuentas se vieron afectadas por las provisiones efectuadas por las inversiones en Portugal y ajustes fiscales.
Además, la salida del grupo del canal de televisión Cuatro y los menores ingresos extraordinarios lastraron las cuentas de la compañía, según informó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Sin estos resultados extraordinarios, la compañía hubiese ganado 1,6 millones de euros, frente a los 28,60 millones que habría obtenido en 2010 sin esta variable, un 93% menos.
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