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España

“Vender Paradores es una mala idea para la marca y para el turismo”

El Presidente de Paradores Nacionales responde a los planes del equipo económico del PP de privatizar los 93 establecimientos que forman la marca. En declaraciones a Vozpópuli, Miguel Martínez asegura que "respetará la decisión" que deberán pactar los futuros ministerios de Economía (del que depende Patrimonio) y Turismo: “no es una decisión de Paradores”, afirma aunque sí plantea objeciones al principal argumento de los responsables populares: “los paradores no compiten con el sector privado sino que reactivan las zonas en las que se ubican y crean empleo”.

El equipo económico del PP prepara la venta de Paradores Nacionales con la idea de “evitar la competencia con el sector privado”. El Presidente del organismo asegura que Paradores no es una cadena hotelera que compita con otras sino “un instrumento de promoción del turismo español” que beneficia a otras marcas. Su venta supondría “romper la unidad de gestión y comercialización". "Eso sería malo no sólo para la marca sino también para la imagen del turismo español”, concluye.

El consejo de administración del organismo también se muestra reticente a los planes del PP que, tal y como reveló Vozpópuli, optará por privatizar Paradores Nacionales si alcanza el gobierno. El equipo económico de Rajoy prevé destinar 2.000 millones de euros de los ingresos que generarían a amortizar deuda, aparcando el plan de inversión estratégico que todavía requiere más de 100 millones de euros de gastos en renovación y mejora de los 93 edificios. Los responsables populares ratifican su intención de privatizar pero siguen dispuestos a esperar al mejor momento de mercado para no “malvender el patrimonio inmobiliario del Estado”.

Los empresarios hoteleros apoyan la idea del PP
La privatización de Paradores ha sido una reivindicación tradicional de la patronal hotelera que considera que puede rentabilizar más algunos establecimientos. Ese ha sido el tradicional argumento de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos cuyas cifras indican que la ratio de empleados por huésped en Paradores duplica a la del resto de establecimientos hoteleros (0,20 en el sector privado frente a 0,53 en los Paradores Nacionales). Hay margen para la mejora de la eficiencia, han argumentado siempre.

Preocupación sindical
Los sindicatos han mostrado ya su preocupación por lo que describen como un nuevo asalto al modelo. Según recuerdan, ya lo intentó Manuel Fraga hace 20 años, Juan José Lucas durante el gobierno Aznar y ahora se vuelve a estudiar en el gabinete Rajoy. “Es políticamente apetecible, pero no es realizable” asegura Javier González, el Secretario General de Comercio, Hostelería y Turismo de Comisiones Obreras. Los trabajadores niegan que el organismo tenga un problema de costes: “hemos ofrecido un convenio colectivo que supone una subida de sueldos del 0,3% para 2010 y del 0,0% para 2011 en un personal muy cualificado”, asegura González.

Además, el sindicato plantea dos pegas a la privatización, una jurídica y otra económica. En lo jurídico, “la venta de edificios chocaría con situaciones como la del Parador de Cádiz, concesión de una familia al Estado que puede revertirse si cae en manos privadas”, sostiene CC.OO. La segunda pega es económica: “si se compra un parador, la empresa que lo haga tiene que saber que tendrá que correr también con las reparaciones y mantenimiento que, en casos como el de la última avería del Parador de León, supuso gastar 1.000 millones de pesetas (6 millones de euros) en reparar las tuberías”.
 

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