El 'sentido' discurso de Sáenz de Santamaría sobre los desahucios: "Esto nos puede pasar a cualquiera"

El extraño discurso, tanto en el fondo como en la forma, de la vicepresidenta tras la firma del convenio para la creación del fondo social de vivienda, retransmitido en directo por televisión, no ha dejado indiferente a nadie. Al momento, las redes sociales bullían con teorías e hipótesis sobre qué puede haberle pasado a Soraya Sáenz de Santamaría para arrancarse con tal retahíla de frases edulcoradas y épicas, pese a haber anunciado que no pensaba ponerse sentimental.

Además del contenido, ha llamado la atención la forma que ha tenido la vicepresidenta de transmitir esta información. Con una excesiva vocalización y una expresión que no se sabe muy bien si quería llorar o reír, la número dos del Gobierno ha regalado a la audiencia algunas 'perlas' que no tenían precio. Vean algunos ejemplos:

• "Hay pocas veces en que un Gobierno puede ponerse sentimental, yo no lo voy a hacer (risas). Alguno dirá 'pues se ha puesto, se ha puesto'. Sí, sí porque esto nos puede pasar a cualquiera. Esto le puede pasar a cualquiera de los que estamos aquí sentados y que pensamos que tenemos todo resuelto porque somos unos excelentes profesionales".
• "Muchos de los que estamos aquí cuando nos levantamos por la mañana pensamos lo difícil que tiene que ser tener un niño menor de tres años - una de las condiciones para acceder a este convenio - y lo fuerte que ser cualquiera de estas personas para sobreponerse a eso y decir 'voy a seguir adelante', por encima de la coyuntura y de las dificultades".
• "Es un esfuerzo solidario y conjunto de un país que quiere que las familias y los más pequeños se críen en un hogar, en un hogar que les haga sentir la protección y la cobertura de unos poderes públicos, de un Estado y de un Gobierno que quiere que sepan afrontar esta dificultad y que la superemos todos juntos".
• "Se trata de dar una segunda oportunidad a todos los que arriesgaron por España, por su vida, por su familia, por su gente y su país".
• "Sólo pido, para el Gobierno, para las entidades financieras, para los alcaldes, para el tercer sector, la mitad de ese coraje. Y con ese coraje de decir 'quizá una crisis me hizo fracasar en un determinado momento, pero yo voy a salir adelante, porque yo soy capaz, y este país es capaz'".
• "Yo sólo me comprometo a una cosa (…): que quiero saber, mes a mes, si esas llaves son la puerta de la esperanza".
• "Sobre todo (el convenio) recoge algo que es psicológicamente más importante: el derecho a fracasar, el derecho en un momento a hacer una inversión equivocada, el derecho a lo mejor a perder un sueldo pero no a haber perdido una vida, no haber perdido la vida de los suyos, no haber perdido el derecho a dar a los suyos lo que todos queremos para los nuestros".