Las peor y mejor vestidas de los Premios Goya 2016

Las peor vestidas

La actriz Sara Vega causó pavor cuando pisó la alfombra roja. Su look total black no convenció a nadie con esas transparencias y encajes florales. Desde luego teniendo a su hermana Paz Vega para que le aconseje, no sabemos cómo le ha dejado salir así de casa.

Cuca Escribano parece que no tenía muy claro que iba a la fiesta más estilosa del año y escogió un vestido poco acertado de Nihil Obstat, de cuadros morados y negros, escote palabra de honor y falda con volumen.

Victoria Abril reapareció en la alfombra roja y lo hizo llamando la atención a bombo y platillo con su look estrambótico con el que nos costó reconocerla. La actriz se decantó por un vestido negro de Jean Paul Gaultier de falda de gran volumen con una chaqueta negra con solapas amarillo chillón, un horror de combinación, gafas de sol de espejo en color rojo y el pelo a lo afro.

A una persona que es guapa, todo le queda bien pero Inma Cuesta estuvo muy desafortunada escogiendo este vestido monjil de Teresa Helbig que le tapaba cada parte de su cuerpo desde los pies a los brazos y el cuello, mostrando sólo parte de su espalda. Demasiado recatada para unos premios donde una se va a lucir más que nunca.

Miriam Díaz Aroca se confundió esta vez queriendo ser una burbuja Freixenet, enfundándose en un vestido de línea sirena con 'paillettes' en color champagne, muy ceñido y de exagerado escote de Carlos Nieves, no apto para una gala de esta envergadura.

María León fue de las pocas que arriesgó pero ¿se quemó? La actriz apostó por un vestido complicado con paisajes y aves de Leandro Cano que no acaba de convencer aunque el look es muy del estilo de la actriz.

Las mejor vestidas

Teniendo a Isabel Preysler como una de las invitadas a los Premios Goya, la noche ya prometía en cuanto a estilismos se refiere. La socialité no defraudó una vez más y eligió un espectacular vestido negro con adornos plateados de Naeem Khan. Un diseño que estilizó su espectacular figura y acompañó con joyas de Rabat.

La modelo Nieves Álvarez es otra de las famosas con más estilo del panorama actual. Se decantó por un vestido bicolor, como en los anteriores Goya, en esta ocasión en negro y con plumas rojas. Un vestido de Georges Chakra Couture muy original, de escote con tiras asimétricas, zapatos de Louboutin y joyas de Bulgari. Nieves se recogió el pelo en un moño caído dejando a los lados el flequillo.

Aunque no se arriesgó mucho, otra de las invitadas mejor vestidas fue Penélope Cruz, que se decantó por un elegante vestido de Versace de escote con pedrería y palabra de honor que realzaba su pecho y con forma en V por la espalda. La actriz se recogió el pelo en un moño trenzado y con flequillo.

Otra actriz que no suele defraudar y se está convirtiendo en otra de las reinas de las alfombras rojas es Juana Acosta. La actriz escogió un vestido negro de terciopelo con un escote barco, con los hombros al aire y muy seductor, de Isabel Basaldúa, con una gran abertura que le permitía lucir piernas.

Otras que también se decantaron por vestidos de aperturas laterales de infarto y que le daban un toque más sexy al diseño fueron Úrsula Corberó y Clara Lago. La primera de Teresa Helbig con un vestido asimétrico, de manga larga y cuello caja en terciopelo inglés de seda de Burdeos y la segunda un vestido de tonos verdes, azules y negros de Georges Chakra.

La actriz Macarena Gómez no defraudó con un original vestido capa blanco con detalles de pedrería de Teresa Helbig, realizado en tul de algodón bordado a mano con lentejuelas, pedrería y perlas. Ella se sentía divina dentro del vestido que tanto le costó escoger. Eso sí, más que peinada iba despeinada.

La actriz Belén Rueda se decantó por un Rosa Clará Cocktail ceñido al cuerpo para realzar su espectacular silueta. Está realizado con chantilly en hilo de plata sobre una base de seda natural en color nude luciendo una bonita espalda con efecto tattoo. Sin embargo, no acertó con el peinado que le hacía más mayor.

También cabe destacar a Amaia Salamanca, que eligió un vestido diseñado por Hervé Moreau, director creativo de Pronovias, realizado en color nude, de estilo sirena y escote barco.