Publicado: 04/03/2013 04:00
Alguien que conoce bien, casi desde sus orígenes, a Blanco y a De la Peña, como es el eurodiputado gallego Antolín Sánchez Presedo, confirma el estrecho vínculo que existe entre ambos. “Pepe ha sido siempre un animal político, mientras que Carlos se ha dedicado de lleno al mundo de la empresa y la consultoría tras su breve paréntesis como alcalde de Baiona”, resume Presedo.
En el PSOE gallego está muy instalada la idea de que el empresario ha actuado siempre como ‘cerebro’ financiero del ex ministro, como una especie de testaferro, al que José Blanco rescató para la empresa pública Adif, administradora de las infraestructuras ferroviarias, cuando el empresario causó baja en Tragsa, el grupo dependiente de la Sepi que desempeña trabajos de obra pública para las tres administraciones. De la Peña no cesó en Adif hasta meses después de entrar la ministra Ana Pastor en Fomento.
En su etapa como titular de Fomento, Blanco rescató al empresario para el administrador de infraestructuras ferroviarias cuando causó baja en Tragsa, dependiente de la Sepi
Durante el tiempo en que permaneció en estos menesteres, De la Peña mantuvo en activo más de una docena de sociedades dedicadas a la promoción inmobiliaria, inversiones, hostelería y consultoría, de las que tampoco se desligó cuando entre 2003 y 2004 fue alcalde de Baiona.
Según relata el eurodiputado Sánchez Presedo, que tuvo como asesor a De la Peña en la consejería de Obras Públicas de la Xunta, la relación de este último con Blanco nació muy temprano en Santiago de Compostela, cuando éste último pilotaba el Consejo de la Juventud de su partido en Galicia. Del mismo grupo forma parte el actual tesorero del PSOE, Xoán Cornide, puesto en el cargo por Blanco cuando era ‘número dos’ del partido en la etapa de Zapatero. El vínculo de Cornide con las principales constructoras gallegas es de sobra conocido en las filas socialistas. Algunos de sus dirigentes han trasladado a Rubalcaba la conveniencia de relevar a Cornide por el oscurantismo con el que ha conducido las finanzas del partido desde que sustituyó en el puesto a Ramón Moreda, ex candidato socialista al Ayuntamiento de Las Rozas, a quien Blanco colocó como presidente de una filial de Renfe llamada Comfersa cuando era titular de Fomento.
La relación entre Blanco y De la Peña siempre ha levantado sospechas dentro del PSOE, donde se vincula al empresario con algunas de las concesiones de obra que el ex ministro hizo en Fomento durante el periodo 2009/2011. De momento, la estrategia de Blanco pasa por mantenerse en el escaño para seguir como aforado y evitar así que si el Supremo decide actuar contra él por el ‘caso Campeón’ la causa no vuelva al juzgado número tres de Lugo, donde se iniciaron las diligencias hace tres años por la presunta concesión de ayudas irregulares a cambio del cobro de comisiones.
La estrategia de Blanco sigue siendo mantenerse en su escaño del Congreso para preservar su condición de aforado y evitar que el 'caso Campeón' regrese al juzgado de Lugo
El ex ministro no solo está sometido a esta investigación, sino también a otra relacionada con la reforma del chalé que tiene en la población madrileña de Las Rozas, encargada a un constructor que está involucrado en el ‘caso Campeón’. El nombre de la operación fue puesto por los servicios de vigilancia aduanera cuando en 2011 detuvieron a 15 personas, entre ellas el empresario Jorge Dorribo, quien acusó a Blanco de haber recibido 200.000 euros en una gasolinera a cambio de acelerar unas gestiones en el Ministerio de Sanidad, entonces dirigido por Leire Pajín.
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