Publicado: 24/12/2013 04:00
Hace tiempo que el Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) poco o nada tiene que ver con la promoción de viviendas sociales. La Comunidad de Madrid, de la que depende el Ivima, adjudicó este verano 3.000 pisos de su Plan Joven al fondo Goldman Sachs-Azora por 200 millones de euros; después, a finales del pasado mes de noviembre, sacó a concurso 1.500 viviendas a partir de 70 millones de euros, pero la subasta quedó desierta. Y ahora, el Ivima planea una rocambolesca operación con el Ayuntamiento de Majadahonda de por medio en la que dejará de construir 500 Viviendas de Protección Oficial con el fin de vender el suelo a fondos de inversión.
Es la última jugada del Gobierno de Ignacio González, que persigue con ahínco meter liquidez al Instituto de la Vivienda. La operación inmobiliaria de Majadahonda, 70.000 habitantes y con una de las rentas per cápita más altas de España, incumple descaradamente un convenio de 2006 entre el Ivima y el Consistorio majariego según el cual el primero se encargaría de construir 1.084 viviendas sociales. Siete años después, apenas se han entregado a los inquilinos 322 pisos, y se prevé dar otras 200 casas en los próximos meses. El resto, 500 VPO, no se construirán, según ha denunciado el portavoz municipal del PSOE, Borja Cabezón.
"Nefasta gestión del Ivima"
En aquel convenio, el Ayuntamiento, gobernado con mayoría absoluta por el PP entonces y ahora, cedió al Ivima un terreno a coste cero. Ahora el equipo de Gobierno recuperará el solar pagando cuatro millones de euros y liquidando de un plumazo medio millar de viviendas de promoción pública.
El PSOE denuncia que el Ayuntamiento pague cuatro millones por un solar que cedió a coste cero para luego hacer viviendas de 250.000 euros
“Es alarmante que el Ayuntamiento no reclame al Ivima una compensación económica por el incumplimiento del convenio existente, y encima ayude económicamente a una empresa que ha demostrado su nefasta gestión”, denuncia el socialista Cabezón.
Botella hace lo mismo
Según ha sabido este medio, el precio de las VPO ya acabadas rondaba los 180.000 euros, una cantidad que el PSOE ya pidió revisar. Lo que ahora se estudia es una promoción de 104 casas con un coste de 250.000 euros por vivienda. Esa es la operación que desean los fondos al acecho, “un precio de mercado inaccesible para los jóvenes”, según Borja Cabezón. Las 1.084 casas correspondían al Plan Vivienda Joven de Majadahonda.
El alcalde majariego, Narciso de Foxá, lleva en el cargo desde 2005, año en que sustituyó a Guillermo Ortega, quien luego resultaría implicado en la trama Gürtel. Por otra parte, el camino emprendido por el Ivima no es exclusivo en Madrid: la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo del Ayuntamiento de Madrid también está traspasando a fondos bloques enteros de viviendas. Incluso está ayudando a estos fondos a desalojar a sus inquilinos.
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