Quantcast

España

El parón político amenaza a pensionistas y funcionarios, expuestos a la prórroga presupuestaria

Mariano Rajoy junto a Cristóbal Montoro, en el banco azul del Congreso.

En el Gobierno se asegura que Mariano Rajoy tiene razones de peso cuando urge al PSOE y a Ciudadanos a que definan sus posiciones ante la investidura prevista para la primera semana de agosto. De no haber Ejecutivo para estas fechas, el mismo Gabinete que lleva en funciones desde hace ya siete meses tendría que ir a una prórroga presupuestaria que perjudicaría, sobre todo, a los pensionistas y a los funcionarios. A los primeros, no se les podría subir ni siquiera el 0,25% de las prestaciones que reciben, el mínimo que fija la ley. Los segundos, tampoco podrían ver aumentados sus ingresos, tampoco en el 1% que se ha fijado para este año. Fuentes gubernamentales que han estudiado bien el actual marco legal son rotundas al respecto: “Todo el estado de ingresos y gastos quedaría congelado porque no podría actualizarse”. Tampoco podría incrementarse la plantilla en las administraciones públicas.

Si no hay Gobierno en agosto, la prórroga presupuestaria dejaría a pensionistas y funcionarios sin aumento de ingresos

El precedente más inmediato de lo que implica una prórroga presupuestaria se dio en 2011 cuando el último Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero convocó elecciones generales en noviembre y evitó aprobar un proyecto de ley con las cuentas para 2012 para no tener que retratarse en la campaña con los ajustes que Bruselas le exigía a una economía como la española al borde del rescate. Pese a ello, ganó los comicios el PP y no pudo sacar adelante los nuevos Presupuestos hasta marzo de 2012. Gracias a un decreto aprobado en diciembre de 2011, un mes después de ganar las legislativas con mayoría absoluta, Rajoy pudo subir las pensiones el 1% después de la congelación que había decidido Zapatero un año antes con Elena Salgado en la Vicepresidencia económica.

En esta ocasión, al estar el Gobierno de Rajoy en funciones, no podría utilizar el mismo camino para posibilitar el aumento salarial a los empleados públicos y el incremento de las pensiones. A estas consecuencias, se sumaría el limbo en el que entrarían con esta prórroga presupuestaria las comunidades autónomas y los ayuntamientos, obligados también a tener que retrasar la aprobación de las cuentas para 2017. La modificación de los pagos fraccionados en el Impuesto sobre Sociedades, pensada para corregir el déficit, tampoco sería posible con un Gabinete en funciones.

PSOE y Ciudadanos, los más perjudicados por el bloqueo

Es evidente que el coste para el PSOE y para Ciudadanos de forzar con su bloqueo esta prórroga presupuestaria y unas terceras elecciones “sería brutal”, reconocen fuentes socialistas, razón de peso que induce a la mayoría de sus barones regionales a pensar que si Pedro Sánchez quiere evitar una derrota todavía más severa que las del 20D y el 26J, acabará cediendo y facilitando la formación de Gobierno el 5 de agosto.

El Gobierno recuerda que la política presupuestaria y la reforma tributaria han sido los cimientos de la recuperación

En previsión de que los socialistas acaben absteniéndose en la investidura rompiendo así el bloqueo político, el Gobierno en funciones prevé tener preparados los Presupuestos del año que viene para que puedan ser aprobados el 23 de agosto y entrar en el Congreso en septiembre. Rajoy está pendiente de conocer la senda de déficit que finalmente marque Bruselas la semana que viene para encajar las cuentas públicas, bajo el criterio de que es prioritario que los nuevos objetivos no estrangulen el crecimiento económico y la recuperación del mercado laboral, con más de 500.000 empleos nuevos previstos para este año. Buena parte del crecimiento se debe a la política presupuestaria y a la reforma tributaria promovida desde Hacienda, pues han impulsado la actividad hasta el punto de que la canciller alemana, Ángela Merkel, suele poner a España como ejemplo a seguir para otros países de la UE más rezagados en las reformas, “algo que para cualquier ciudadano español era inimaginable hace solamente tres años”, aseguran en el Gabinete en funciones.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.