El Gobierno desvela que el Constitucional no es su única arma contra el referéndum

El Tribunal Constitucional es la respuesta que habitualmente esgrime el Gobierno en su estrategia para hacer frente al referéndum secesionista. Ni artículo 155 ni Ley de Seguridad Nacional. Al menos, de momento. Enric Millo, delegado del Gobierno en esa comunidad, ha ido un poco más allá este miércoles al referirse a que "no se me ocurre otra forma que "impedir la votación físicamente". No ha entrado más detalles, aunque en círculos secesionistas señalan que estaría sugiriendo la actuación de las fuerzas de seguridad bien para no permitir que se abran los colegios electorales o bien para que no se desplieguen las urnas el día señalado. Para este movimiento se precisaría una orden judicial o de la Fiscalía, detalles que se mantienen en el terreno de la incógnita. 

Nadie del Gobierno se había expresado en forma tan gráfica sobre este particular. Sí lo había hecho, hace unas horas, la portavoz socialista en el Congreso, Margarita Robles, quien afirmó que estaría de acuerdo con que se retiraran las urnas en el caso de que la Generalitat contraviniera lo estipulado por el ordenamiento jurídico. Millo, el hombre de confianza de la vicepresidenta Sáenz de Santamaría en Cataluña, ha insistido en que no habrá referéndum, "no lo harán, no lo harán, no lo harán", ha insistido, frente a los planes de Carles Puigdemont, que ya ha desvelado incluso su proyecto de la república catalana independiente. 

El día de la convocatoria

Cataluña ha estado en el centro de las intervenciones en el pleno del Congreso sobre la financiación ilegal del PP. La propia Sáenz de Santamaría ha explicado, en declaraciones a los periodistas, que el Gobierno tiene ya 'preparadas y previstas' todas las actuaciones necesarias para impedirlo. La vicepresidenta ha puntualizado que el Ejecutivo actuará 'de forma inmediata' en cuanto se tramiten tanto la ley del referéndum como la de transitoriedad. Y ha añadido que, a un mes de la fecha, el referéndum carece de "legalidad, logística y firma".

La Generalitat mantiene en secreto su calendario, para no ser objeto de las actuaciones del TC. En medios independentistas se comenta que será en el pleno del Parlament del próximo 6 de septiembre cuando finalmente se apruebe la ley de la consulta y, ese mismo día, por la tarde, se llevaría a cabo formalmente la convocatoria del referéndum, un extremo que no ha sido confirmado por la Generalitat.