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España

Cae la vieja guardia de Aznar: Trillo, segundo ministro salpicado en siete días

El embajador de España en Londres, Federico Trillo

Va cayendo la vieja guardia aznarista. O por lo menos, resultan alcanzados por las salpicaduras del escándalo. Federico Trillo lo desmiente todo y habla de que "algo huele a podrido en Dinamarca", según declaró este jueves a esRadio. Es el segundo hombre fuerte de la era Aznar salpicado por presunta corrupción en apenas unos días. Quien fuera presidente del Congreso y titular de Defensa atisba en sus declaraciones movimientos oscuros y sospechosos en todo el asunto. Tanto él como el diputado del PP Vicente Martínez Pujalte figuran como asesores de empresas relacionadas con obra pública. Todo legal, correcto, declarado en el Congreso y en Hacienda. Son episodios de 2006 a 2008, cuando Trillo era un mero diputado por la provincia de Alicante.

Después del terremoto

La noticia de El País surge tan sólo unos días después del terremoto en torno al 'caso Rato' que ha sacudido los cimientos del PP en vísperas de unas elecciones decisivas. Nadie en el partido atina a entender lo que está sucediendo. El grado de conmoción es total. La inquietud se desborda. De pronto aparecen asuntos como el del exministro de Defensa de hace más de ocho años. "Ni la Agencia Tributaria ni la Fiscalía Anticorrupción se han puesto en contacto conmigo", declaraba a los medios.

El asunto brota mediáticamente el mismo día en el que el PP hace pública parte de la agenda de José María Aznar para la campaña electoral para las autonómicas

El asunto brota mediáticamente el mismo día en el que el Partido Popular hace pública parte de la agenda de José María Aznar para la campaña electoral para las autonómicas. El expresidente del Gobierno ha decidido sumarse activamente a los esfuerzos de su partido para revalidar los gobiernos regionales y locales en algunos puntos de España. Serán cuatro mítines, por ahora, en tierras madrileñas y de la vieja Castilla. El PP se encuentra en estado catatónico, incapaz de reaccionar. Tras la difícil etapa Bárcenas, aparecen escándalos por doquier. Concesiones heterodoxas de la Junta de Castilla y León a determinadas empresas eólicas. El esposo de Teófila Martínez, alcaldesa de Cádiz y candidata a la reelección, vinculado a negocios con Rato. Los gastos presuntamente desmesurados de Rita Barberá, alcaldesa de Valencia. Cada mañana, un sobresalto.

El gran protector de la vicepresidenta

Trillo fue en su día uno de los hombres más firmes del equipo de Aznar. Algunos de sus ministros ya han tenido problemas con la Justicia. Matas ha ingresado en prisión. El juez Ruz puso el nombre de Acebes en el entramado Bárcenas pero al final no consiguió imputarle. Rato es objeto ahora de una investigación profusa sobre sus dineros no regularizados. Incluso fue detenido y 'paseado' ante las cámaras de televisión, en un episodio muy controvertido. Toda una era del partido conservador aparece señalada por episodios oscuros. Las sospechas circulan con celeridad entre las bases y los militantes. Algo raro está pasando, comentaba este jueves Trillo. "No puede ser casual, en política las casualidades no existen", comentaba un destacado dirigente de Génova.

Se recuerda ahora que el exministro de Defensa de Aznar fue el padrino político de Soraya Sáenz de Santamaría cuando estaban en el grupo parlamentario en tiempos de la oposición. Trillo 'prohijó' a la actual vicepresidenta y la impulsó y amparó en sus primeros pasos en el Congreso. En estos tiempos en los que las guerras fratricidas en el interior del PP empiezan a abandonar los rincones de la discreción, muchos han recordado este hecho.

También se menciona ahora que Ana Torme, socia de Martínez Pujalte en la empresa Sirga, desde que se hicieron los trabajos de la polémica asesoría, fue en su día descabalgada de la portavocía adjunta del grupo popular al ser designada Saenz de Santamaría jefa de la bancada del PP. Una secretaria le comunicó a Torme, ahora senadora, que se le ofrecía pasar a la comisión de Seguridad Vial, pero rechazó la oferta y reprochó públicamente a Santamaría las formas en las que fue desplazada de su cargo.

Entre tanta convulsión interna en el partido, la vicepresidenta del Gobierno disfrutaba de unas horas de diversión en la Feria de Sevilla, donde se arrancó incluso por sevillanas, según algunos vídeos que han circulado en medios digitales andaluces.

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