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El Liberal - Política

El independentismo se ofende por un tuit humorístico

Manifestantes en la Diada

A pesar de la vehemencia con la que el independentismo suele criticar al constitucionalismo—recordemos, por ejemplo, que Clara Ponsatí afirmó el pasado febrero en la Eurocámara que España inspiró a Hitler o que un actor del programa Polonia llamó “mala puta” a Inés Arrimadas—, sus filas suelen ofenderse con facilidad ante cualquier crítica a su proyecto, por razonable o moderada que ésta pueda ser. El último ejemplo en este sentido ha tenido lugar esta semana, cuando medios y dirigentes del ámbito secesionista han cargado contra la izquierda no nacionalista por una broma gastada en Twitter por el secretario de Economía y Hacienda del PSC, Francesc Trillas, y el exsenador de los comunes, Òscar Guardingo.

Concretamente, Trillas, en respuesta a un comentario del tuitero Casfetera que sugería en tono jocoso que a los separatistas “irrecuperables” habría que darles su propio territorio para que no contagiasen su fanatismo al resto de la población, gastó ayer la siguiente broma: “Sí, habría que proporcionarles una especie de territorio amish o uno como ese barrio ácrata de Copenhague. Incluso se podría promocionar turísticamente con las debidas precauciones”.

La broma fue respondida con una sugerencia en clave irónica del antes mencionado Guardingo: “¿Cadaqués? Tiene sus ventajas: muchos [independentistas] ya tienen casa y solo se llega por una carretera”.

Puigdemont tilda la broma de "muy lamentable"

Aunque el registro socarrón de dichos textos evidencia que la propuesta no iba en serio, varios dirigentes y medios separatistas no han tardado en considerarla una afrenta y arremeter contra sus autores. Así, el expresidente de la Generalitat y fugado de la Justicia, Carles Puigdemont, ha calificado en Twitter el asunto de “muy lamentable”, añadiendo que “se llenan la boca diciendo que España es una democracia plena porque ‘permite’ que haya quien defienda la independencia, pero después proponen encerrarnos en un gueto si votamos independencia”. Seguidamente, se ha referido con ironía a los nuevos Pactos de la Moncloa como “muy prometedores”.

A los reproches también se ha sumado la diputada de Junts Per Catalunya Aurora Madaula, que ha acusado a Guardingo de seguir el “juego macabro” de aquellos que quieren apartar de la sociedad a los secesionistas, aludiendo a la broma de Trilla. También ha comparado al constitucionalismo con el régimen nazi: “¿Nos pondréis en un gueto, nos marcaréis con una estelada? Puede que el virus os haya infectado, pero no es el de la Covid, sino el del autoritarismo”. Por su parte, un diputado por ERC en el Parlament, José Rodríguez, ha agregado que el federalismo defendido tanto por el PSC como los comunes les está saliendo “muy nazi”.

‘Vilaweb’ critica la “inmoralidad de la izquierda españolista”

La reacción de algunos medios de comunicación también ha sido contundente. Vilaweb le ha dedicado al supuesto escándalo un editorial en el que, bajo el titulo ¿Amish dice? No haga de su ignorancia un argumento, su director Vicent Partal recrimina a los firmantes del tuit desconocer que la “realidad de los amish no tiene nada que ver con una reserva”. Asimismo, aprovecha para denunciar el “nivel de delirio al que puede llegar la izquierda españolista”. “La inmoralidad”, sostiene, “que significa que alguien que todavía se dice de izquierdas —vaya a usted a saber por qué— pueda gastar bromas con un tema tan importante como éste pone el listón del debate extremadamente abajo”.

Por último, El Nacional se hace eco de estos hechos en una noticia de título elocuente: La macabra propuesta antiindependentista de dos miembros del PSC y de los comunes. Ya en el interior, se afirma que estos políticos proponen recluir a los separatistas en guetos, situación que se tilda de “bárbara” y “vergonzosa”.

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