Quantcast

El Liberal - Economía

Las terrazas de la Boquería y del Raval son las más castigadas por el 'hachazo' de Colau

Ada Colau.

El gobierno municipal de Ada Colau y Jaume Collboni ha desatado las críticas por subir los impuestos a las terrazas de los bares y restaurantes. La "irremediable" subida de precios es una de las primeras medidas que tomarán los afectados en cuanto entre en vigor el preacuerdo entre los 'Comuns', PSC y ERC, previsiblemente este viernes. 

La Boquería, uno de los principales atractivos turísticos de Las Ramblas de Barcelona, y los bares de la Plaza Reial sufrirán incrementos de hasta el 863% de media, en algunos casos de hasta el 1.100%; los bares de la Plaza de Salvador Seguí, una de las zonas más afectadas por la inseguridad debido a la prostitución callejera y narcotráfico, abonarán un 565% más que hasta ahora.

Los bares de las plazas Jacint Reventós y Sant Pere el incremento la subida del impuesto será del 542%, un aumento de más de 100 veces respecto a la subida del impuesto a los residuos. Ambas plazas están situadas en las cercanías de Vía Laietana. Las terrazas de La Rambla, una de las principales arterias turísticas, el incremento será del 429%.

Casi un 300% más tendrán que abonar los restaurantes y bares de las plazas del Diamant y Almirall Churruca, mientras que las situadas en Enric Granados y Santa María el impuesto se ha elevado en un 252%.

En Rambla de Catalunya, el incremento alcanza el 179%, mientras que Santaló y Rambla del Poblenou, la subida es del 108%. También aumentan los impuestos fuera de la zonas turísticas, como Fabra i Puig con Virrei Amat, con un aumento del 97%, el mismo que registran la plaza de la Concòrdia, Eivissa, Rogent, Biscaia, Felip II, rbla. Onze de Setembre y Bilbao-Pere IV. Por su parte, la rambla de Guipúscoa abonará un 90% más.

Despidos y cierres

De esta forma, las terrazas que hasta ahora pagaban 4.000 euros anuales tendrán que abonar en algunos casos cerca de 40.000, es decir, unos 10.000 euros anuales por mesa. "El principal impacto será en el empleo", han afirmado fuente de la Asociación de Comerciantes de la Plaza Reial. "Habrá despidos", han señalado.

Esta asociación ha luchado durante años para eliminar el estigma de la inseguridad, alineándose con vecinos y otras plataformas para integrarse en el barrio. "Lo habíamos conseguido y ahora nos dan este palo", han señalado las mismas fuentes, que critican la falta de inversión municipal en la zona. "La fuente sigue sin arreglarse y no han propuesto contrapartida alguna para reactivar la zona", han lamentado las mismas fuentes. "Es un impuesto recaudatorio", han aseverado, mientras que el Ayuntamiento no ha dado las explicaciones oportunas sobre el por qué de estos incrementos.

Los bares de esta zona no impiden el paso peatonal y trabajaban para atraer a los residentes, incluso colaborando en las distintas actividades del barrio.

Barcelona Oberta, una asociación territorial, ha mostrado su "total" rechazo a esta medida, que tendrá "efectos negativos sobre los ejes comerciales de la ciudad". A su juicio, habrá un "encarecimiento de los precios, poniendo fuera del alcance de todos, la restauración y las terrazas, tan presentes en el día a día de los barceloneses".

"Muchos bares y restaurantes dejarán de ser viables y los ejes comerciales perderán atractivo, diversidad de oferta y dinamismo", han señalado. Desde la asociación plaza Reial señalan que el cierre dependerá de cada uno de los bares, todos en manos de familias afincadas desde hace décadas, y sin presencia de las franquicias multinacionales, las únicas que podrían asumir estos elevados costes.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.