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El Liberal

ERC y la CUP, los beneficiados de la violencia separatista para las elecciones del 10-N

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, en el acto por el aniversario del fusilamiento de Lluís Companys.

ERC y la CUP son los grandes beneficiados por la violencia separatista de las últimas semanas en Cataluña. Los republicanos liderados por Oriol Junqueras mantendrían el respaldo de su electorado, mientras la CUP, que se presenta por primera vez en unos comicios generales en democracia, obtendría hasta cuatro diputados. JxCat, por contra, es el principal perjudicado, pese a aplaudir a los CDR y aparecer en todas las movilizaciones independentistas de las últimas semanas. 

Pese a la caída de los de Carles Puigdemont y Quim Torra, el independentismo alcanzaría entre los 24 y 26 diputados, superando en un máximo de cuatro a los 22 obtenidos en los comicios de hace apenas medio año. También incrementa el número de porcentaje de votos, el 43,1%, frente al 39,2% de los pasados comicios, según un sondeo publicado en El Periódico.

La encuesta se ha realizado durante la semana pasada, en plena escalada de violencia en Cataluña y una vez conocida la sentencia. Es el primer sondeo de Gesop tras el fallo del Tribunal Supremo. 

Según la encuesta, el PSC sería el primer partido del denominado bloque constitucionalista, con entre 11 y 12 diputados, el mismo resultado que el pasado 28-A, mientras que JxCat se situaría en empate técnico con En Común Podem, la formación que tratará de mantenerse en la misma posición que en abril.

Ciudadanos, según esta encuesta, sería la formación más perjudicada, con una caída hasta los dos diputados, frente a los cinco obtenidos hace medio año. El PP evita su riesgo a desaparecer y entrarían dos diputados, Cayetana Álvarez de Toledo y María de los Llanos de Luna. También Ignacio Garriga iría acompañado al Congreso al cosechar dos diputados para Vox. Més País, la formación de Errejón, se quedaría sin representación en Cataluña. 

El votante de Vox, el más fiel

La abstención y la indecisión son los principales enemigos de los partidos de cara al 10-N. Los socialistas consolidan al 46,5% de su electorado, pero el 38,6% del mismo no tiene aún decidido su inclinación en la urna.

En Podemos, el 30% de su electorado también muestra sus dudas a la hora de coger la papeleta morada, mientras que el de Vox es el votante más fiel, con un 67,5% del voto del 28-A asegurado.

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