Las elecciones gallegas se antojan como una de las más reñidas de los últimos años en lo que a conseguir la mayoría absoluta se refiere. Desde el Partido Popular son conscientes de ello y saben que el voto por correo va a ser crítico en este sentido.
Galicia cuenta con una población de 2,7 millones de personas, más otras 527.000 que viven fuera de la región, en el extranjero. Es decir, uno de cada cinco gallegos vive fuera de su tierra. 476.366 de ellos tienen la posibilidad de votar por correo, representando más del 17% del total de los sufragios. En resumen, es una masa crítica para que el Partido Popular alcance -o no- la mayoría absoluta.
Sin embargo, el sufragio por correo es especialmente controvertido en el caso de Latinoamérica, explican a Vozpópuli fuentes cercanas a la compañía. "Están nerviosos porque el voto por correo es un desastre, especialmente en Cuba, pero también en otras regiones como Ecuador o Argentina. Y esta última cuenta con la mayor cantidad de gallegos del continente", aseguran.
En concreto, en Argentina hay 57.098 gallegos con derecho a voto, por los 12.436 de Cuba, los 12.104 de Uruguay, los 10.028 de Brasil o los 8.684 de Venezuela. Son los países de la región con más nacidos en Galicia.
Uno de los ejemplos más claros de las dificultades de Correos para recoger los sufragios en determinadas zonas de Latinoamérica está en el país del régimen instaurado en su día por Fidel Castro. En las pasadas elecciones generales celebradas el 23 de julio del año pasado en España no se registró ningún voto en este formato procedente de Cuba.
"Unos datos como los expuestos solo son posibles si los envíos han llegado a ese país con mucho retraso por causas que ya se han señalado anteriormente, por una falta absoluta de compromiso y diligencia por parte del operador de Cuba, o por ambas cuestiones a la vez", manifestaban hace tiempo fuentes internas del operador postal a la dirección de la empresa, entonces con Juan Manuel Serrano al frente de la misma. Fue sustituido recientemente por Pedro Saura, antes presidente de Paradores.
El caso de Ecuador es especialmente significativo. "En las pasadas elecciones autonómicas del 28M -en referencia a las celebradas en España mayo de 2023- la Junta Electoral Central obligó a Correos a utilizar los servicios de una empresa de mensajería (Correos Expres-Fedex fue la elegida) para el transporte y la distribución de la documentación electoral, entendemos que a petición de la Embajada Española en Ecuador, ante la inoperancia del operador postal de este país. El resultado fue catastrófico, por lo que solicitó a la Junta Electoral Central la destrucción de los envíos no entregados a la vista del coste que podía suponer su regreso a España", concluyen.
Desde Correos aseguran a este diario que "como en todos los procesos electorales, Correos está poniendo todos los medios necesarios para cumplir con las obligaciones que tiene encomendadas en la gestión del voto internacional. Desde la fecha de publicación de la convocatoria (26 de diciembre), ha informado a los operadores postales de todos los países, a través de la Unión Postal Universal, sobre los envíos previstos y los plazos establecidos", y añaden que "en el caso de Venezuela, se ha recibido confirmación de que han recibido los envíos y los están procesando. En el caso de Cuba, igualmente, se ha recibido confirmación de la recepción de los envíos y están procesando su entrega a los destinatarios".
La etapa de Serrano al frente de Correos
Esta y otras circunstancias se han dado con Juan Manuel Serrano al frente de Correos, donde llegó en 2018, cuando Pedro Sánchez ganó la moción de censura. Los sindicatos han criticado mucho su gestión y cifran las pérdidas económicas del operador postal español durante su mandato en unos 1.200 ó 1.500 millones de euros.
María Jesús Montero llevaba meses estudiando de cerca la gestión de Serrano al frente de la compañía, porque ese agujero tiene efecto directo sobre las cuentas de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), propietaria de la empresa pública.
A finales del año pasado se producía la salida de Serrano y Pedro Saura tomaba las riendas. El ex presidente de Paradores y miembro del Partido Socialista ya ha tomado medidas prácticamente nada más llegar.
