Publicado: 07/01/2020 05:15
No corren buenos tiempos para las televisiones. Desde hace meses, las cadenas encadenan mes a mes una caída de la facturación por publicidad, su principal fuente de ingresos, que ha generado a lo largo del año pasado un 'roto' aproximado de 120 millones de euros, según las estimaciones de Barlovento Comunicación publicadas en un reciente informe, que cifra la caída entre un 5 y un 6% menos.
Este nuevo descenso acredita la tendencia a la baja que sufren los ingresos de la industria publicitaria en los últimos años. Según datos de Infoadex, la inversión publicitaria registrada en 2018 fue de 2.123 millones de euros, 20 millones menos con respecto a 2017. Tal y como recuerda el citado informe, en 2013 la facturación del mercado audiovisual era de 1.702 millones. En 2007, la cifra de ingresos ascendía a 3.418 millones.
La consolidación de una facturación a la baja "no es buena noticia para la industria de la televisión, inmersa como está además en grandes transformaciones del modelo de negocio del ecosistema audiovisual"
"Todo ello sucede tras la recuperación de la inversión publicitaria en televisión registrada en los años 2014, 2015, 2016, e incluso 2017, aunque de modo nominal, que llegaba hasta los 440 millones de euros: de 1.702 millones de euros en 2013 a ingresar 2.143 millones de euros en 2017", reza el documento.
El análisis elaborado por Barlovento admite que la consolidación de una facturación a la baja "no es buena noticia para la industria de la televisión, inmersa como está además en grandes transformaciones del modelo de negocio del ecosistema audiovisual".
Para muestra, las cuentas de los dos principales 'players' del sector: Atresmedia y Mediaset. Ambas cadenas declararon el pasado noviembre su peor facturación conjunta desde 2015: Mediaset España ingresó 660 millones (-5,1%) y Atresmedia facturó 723 millones (-3,2%)
La TV, el medio rey
Sea como fuere, lo cierto es que los datos todavía respaldan a la televisión como el medio más importante para los anunciantes. La pequeña pantalla acumuló entre enero y septiembre del año pasado una inversión de 1.413 millones de euros. Le sigue internet con 515 millones, los diarios con 359 millones, la radio con 289 millones, publicidad exterior sumó 259 millones y las revistas un total de 176 millones.
Según las estimaciones de Barlovento, las televisiones nacionales se llevaron prácticamente toda la tarta publicitaria: 1.278 millones de euros. A mucha distancia le siguen las cadenas autonómicas con 61,8 millones, que según señala el informe, han sido "las más perjudicadas en los últimos años en el reparto de la publicidad en televisión".
Y si las cuentas no dan excesivas alegrías, los datos de consumo tampoco son especialmente halagüeños. El año pasado, la televisión registró un consumo promedio diario de 222 minutos por persona y día. En 2018, el consumo fue de 234 minutos por persona y día. La caída, por tanto, es de 12 minutos.
Estos números certifican la tendencia a la baja que revela el registro de audiencia: 246 minutos en 2012, 244 minutos en 2013, 239 minutos en 2014, 237 minutos en 2015, 233 minutos en 2016 y 240 minutos en 2017. El informe también apunta a que el año pasado hubo un total de 31.003.000 ciudadanos que 'visitaron' la televisión cada día, lo que es la audiencia acumulada más baja de la historia.
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