El Gobierno se enteró en la tarde del martes de la compra del 9,9% de las acciones de Telefónica por parte de STC Group, grupo de telecomunicaciones de Arabia Saudí controlado por la familia real del país, según ha podido saber Vozpópuli y acaba de reconocer el propio Ejecutivo.
El desconocimiento del Gobierno hasta el último minuto llama la atención de empresas y directivos del sector consultados por este periódico, que subrayan que se trata de la adquisición de un paquete accionarial que convierte a STC en accionista mayoritario de Telefónica, superando a los bancos españoles BBVA y CaixaBank.
Y es que Telefónica está considerada, por el tipo de servicio que brinda -principalmente comunicaciones- estratégica para el país. Ahora la dictadura Saudí podría tener, como mínimo, un sillón en el consejo de administración del operador, aunque de momento no lo ha solicitado.
El Grupo STC Group es líder en Arabia Saudí. Su base de clientes supera los 170 millones en 11 países de las regiones de Oriente Medio y Norte de África
La jugada recuerda al caso Ferrovial. El martes 28 de febrero, la multinacional de estructuras de transporte y movilidad, también considerada como activo estratégico, comunicó al Gobierno su marcha a Países Bajos tras haber informado a la CNMV. Un movimiento que desató la indignación del Ejecutivo, con el propio Pedro Sánchez, junto con Nadia Calviño y Yolanda Díaz, entre otros, presionando a los accionistas para que no ratificaran la decisión del Consejo. Que fue finalmente refrendada por abrumadora mayoría.
Ahora desde el Ejecutivo se remiten a la normativa de protección que han aprobado, sin concretar en qué sentido. El escudo antiopas aprobado durante la pandemia y renovado hasta diciembre de 2024 da poder a Sánchez para impedir operaciones de compra en corporaciones estratégicas si alcanzan o superan el 10% del capital o de los derechos de voto. También se puede poner en marcha cuando la financiación a sociedades españolas o del grupo cuyo importe supere el millón de euros, o si se reinvierten los beneficios en sociedades españolas por valor igual o superior al 10%.
Sin embargo, la entrada en Telefónica se ha diseñado para quedar justo por debajo de estos límites.
Desde el Ministerio de Economía aseguran que se analiza ya si la operación requiere algún tipo de autorización por tratarse de una inversión en un operador estratégico, si bien es una adquisición de menos del 10% de las acciones y esto no supone la toma de control de Telefónica
El Ejecutivo responde
La primera reacción el Gobierno la protagonizó anoche la vicepresidenta segunda en funciones, Yolanda Díaz, que sugirió que ha habido falta de control gubernamental.
Desde el Ministerio de Economía aseguraban que "se está analizando si la operación requiere algún tipo de autorización por tratarse de una inversión en un operador estratégico, si bien la operación anunciada no supondría la adquisición de más de un 10% de las acciones y no supondría la toma de control (...). Telefónica es una compañía estratégica y el Gobierno va a proteger el interés estratégico de nuestro país".
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha reconocido en declaraciones a los medios en Bruselas en la mañana de este miércoles que se enteró en la tarde de ayer, y que la compañía transmitió el "carácter amistoso" de la operación y su "intención de no tomar el control de Telefónica". Según Calviño, el Gobierno interpreta que se trata de un "apoyo al equipo directivo de Telefónica y a España", y ha destacado que el movimiento es muestra del "atractivo de España para los inversores", que asegura impulsar, y favorece el progreso de España en empleo, crecimiento y modernización tecnológica.
Sin embargo, Calviño, aunque ha querido "lanzar un mensaje de confianza y tranquilidad", también ha planteado que a la vez están "analizando todo". Con los "mecanismos que ha reforzado el Gobierno de control de activos estratégicos se está analizando la actividad, la defensa de los intereses de España, los derechos de voto y la participación en los órganos directivos".
El Grupo STC Group es líder en Arabia Saudí y se dedica las telecomunicaciones básicas, pero también tiene una estrategia a largo plazo en innovación, ciberseguridad y operaciones de compra y adquisición, además de en otras áreas. Su base de clientes supera los 170 millones en 11 países de las regiones de Oriente Medio y Norte de África.
UGT, a favor de la entrada de Arabia en Telefónica
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha valorado este miércoles en rueda de prensa de inicio del curso de manera favorable la entrada del grupo saudí en España. Así, ha asegurado que "asienta inversiones, da cuerpo a una compañía que conocemos bien, y garantiza el futuro de los trabajadores".
No obstante, Álvarez ha mostrado preocupación con este tipo de movimientos, y ha recordado la operación que hizo que Italia se hiciera con Endesa y otras que afectan a joyas españolas. El secretario general de UGT considera que la protección de activos estratégicos es algo que se ha de analizar, "rehacer", tanto en España como en Europa.
