Seat invierte 1.100 millones de euros en el nuevo León: contará con cinco tecnologías de propulsión

Seat ha presentado en las instalaciones de Martorell la cuarta generación del León, el modelo más vendido en España en los últimos años y responsable del éxito de los resultados globales de la marca española por todo el mundo, con récord de ventas el pasado ejercicio incluido. No en vano, las ventas del León superan desde su primera generación los 2,2 millones de unidades. Para esta nueva generación que mantiene su producción en la planta de Martorell (Barcelona), la marca española ha invertido más de 1.100 millones de euros, destinados tanto al propio desarrollo del León como a la mejora de las instalaciones de producción en las que ya se ha comenzado a fabricar.

El reto para esta nueva generación en llevar al León al siguiente nivel en términos de diseño, conectividad, eficiencia, dinamismo y seguridad, un nuevo modelo que ha sido diseñado y desarrollado en el Centro Técnico de Seat y que se producirá al igual que las anteriores generación en la planta de Barcelona.

El nuevo León muestra una gran evolución en el diseño en comparación con su predecesor, con un nuevo concepto, tanto exterior como en el habitáculo, que aporta una mayor presencia y carácter, sobre todo por parte de un frontal más definido, así como por sus líneas más suaves. Un frontal que cuenta con una innovadora tecnología de iluminación que incluye luz ambiental envolvente, luces intermitentes dinámicas, faros Full LED y luces de bienvenida.

Además de diseño, se ha buscado mejorar en aspectos prácticos, aumentando las dimensiones tanto en la versión de carrocería 5 puertas como en el familiar Sportstourer, 8,6 y 9,3 centímetros respectivamente, que permite ofrecer un mayor espacio en los asientos posteriores y una mayor capacidad en el maletero del Sportstourer. Más espacio interior y mayor confort de marcha que llegan de la nueva plataforma sobre la que ha sido desarrollado, que busca también mejorar la dinámica de conducción y la seguridad.

Cuenta para ello con algunos de los sistemas más avanzados de asistencias a la conducción, que agrupan los asistentes hasta ahora conocidos con grandes innovaciones que mejoran su funcionalidad, como son el control de crucero adaptativo predictivo, el asistente de emergencia 3.0, el asistente de viaje y el asistente lateral y de salida.

Conectividad total

Mucha tecnología que también se aplica en el nuevo interior, de diseño más moderno y vistoso y al que se la dotado de los más avanzados sistemas de conectividad. El nuevo León es el primer vehículo totalmente conectado de la marca, que ofrece conectividad con Full Link (Android Auto y acceso inalámbrico a CarPlay de Apple), sistema de info-entretenimiento con conexión a internet en todo momento, y aplicaciones en un futuro cercano que ampliarán y mejorarán la experiencia de conducción. Cuando estén fuera del vehículo, los usuarios pueden acceder a los datos de su vehículo de forma remota, así como gestionar el proceso de carga de la batería  y controlar el climatizador en el caso de la versión híbrida enchufable PHEV.

Porque si por algo destacará esta cuarta generación del León será por sus cinco tecnologías de propulsión, sin renunciar a los motores diésel y gasolina que siempre le ha caracterizado, y a los que se suman junto al cada vez más demandado motor de gas natural comprimido (TGI) dos nuevas propuestas, una en forma de microhibridación (eTSI) que tanta demanda está generando por sus menores consumos y emisiones en ciudad y su etiquetado ECO y un también nuevo sistema híbrido enchufable (eHybrid) que debiera permitir al León contar con etiqueta CERO emisiones con las muchas ventajas que ello aporta.