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Economía

MOTOR / PRUEBA

S5 y Formentor VZ5, dos deportivos antagónicos: ¿mejor diésel o gasolina?

Son dos modelos diseñados para disfrutar de la conducción tanto por sus altísimas prestaciones como por la puesta a punto de sus chasis. Con más de 300 CV cada uno, son sin embargo la noche y el día a sus mandos.

El VZ5 es el modelo más potente fabricado por la marca española Seat con sus 390 CV.

La deportividad no siempre está reñida con la eficiencia. Como prueba, el S5 que Audi decidió reinventar en lugar de con un motor de gasolina con uno diésel que, apoyado además en los tan de moda sistema de micro hibridación, logra beneficiarse de la etiqueta ECO que poco a poco se va convirtiendo en un elemento cada vez de mayor peso a la hora de comprar un coche sobre todo en las grandes ciudades donde las limitaciones a la circulación son cada vez más restrictivas.

Por otro lado, la marca deportiva de Seat ha dado en el clavo con un Formentor que vende a un ritmo muy superior al esperado y que tiene en este novedoso VZ5 su máximo exponente de deportividad con su exclusivo motor de cinco cilindros y casi 400 CV de potencia. Diseño en formato casi SUV y unas prestaciones y unas sensaciones que le permiten ofrecer una altísima eficacia en carretera pero de una manera muy distinta al S5 de carrocería más baja y motor diésel "tuneado".

AUDI S5

Dynamic photo Color: Turbo blue

Audi cambió de estrategia incorporando en el S5 un motor diésel V6 TDI de alto rendimiento, dejando al RS5 como opción más radical con motor de gasolina. Un motor el del S5 que combina un compresor accionado eléctricamente con un sistema eléctrico principal de 48 voltios, permitiendo al V6 de 3 litros alcanzar una potencia máxima de 341 CV que se transmite a las ruedas a través de un cambio automático tiptronic de ocho velocidades, siempre junto a la tracción permanente quattro.

El compresor proporciona un alto rendimiento desde el mismo momento del arranque gracias a un tiempo de respuesta inferior a 250 milisegundos, con una potencia máxima de salida que alcanza los 10 CV. La función boost del compresor se produce hasta un régimen de giro del motor de 1.650 rpm y gracias a la doble sobrealimentación, trabajando en tándem junto al turbocompresor movido por los gases de escape, este S5 alcanza una cifra de par motor de 700 Nm, que se mantiene constante entre 2.500 y 3.100 rpm.

El resultado es una respuesta espontánea y una impresionante capacidad para acelerar o realizar adelantamientos, al poner a disposición del conductor toda la potencia de forma inmediata cuando lo solicita. En conducción diaria, esta tecnología permite mantener un bajo régimen de giro y elimina el retraso de respuesta que puede producirse en un motor con un turbocompresor convencional movido por los gases de escape, lo que le hace muy agradable en una conducción urbana o interurbana a velocidades bajas.

Pero además de un brillante rendimiento, gracias al sistema Mild hybrid (MHEV), se mejora la eficiencia y la posibilidad de obtener la etiqueta ECO de la DGT. El sistema MHEV de 48 voltios incluye un motor eléctrico conectado al cigüeñal que hace las funciones de alternador y de motor de arranque y una batería de iones de litio con una capacidad de 0,5 kWh alojada bajo el piso del maletero. En las fases de deceleración puede recuperar hasta 8 kW de energía eléctrica, que se almacena en la batería.

La tecnología MHEV permite que el sistema start/stop se active desde una velocidad de 22 km/h. Gracias en parte a la integración del sistema de hibridación ligera y a diferentes sensores, el S5 logra un ahorro de combustible de hasta 0,4 litros cada 100 kilómetros en condiciones reales de conducción, y pueden desplazarse en modo de marcha por inercia con el motor de combustión desactivado hasta 40 segundos. Por ello, conduciendo con cierta eficiencia puedes llegar a lograr unos consumos impropios de un deportivo de 340 CV de potencia. Una doble personalidad, como deportivo de alto rendimiento o como coupé de largas distancias y elevada autonomía.

Como en todos los modelos S de Audi, la tracción permanente quattro forma parte de este S5. En condiciones normales, su diferencial central autoblocante distribuye el par entre los ejes delantero y trasero en una proporción 60:40. Si una de las ruedas pierde adherencia, la mayor parte del par se deriva hacia el eje que cuenta con mayor capacidad de tracción. Como caso extremo, puede enviar un 70 por ciento al eje delantero y un 85 por ciento a las ruedas traseras. El control selectivo de par individual mejora la agilidad en conducción deportiva, frenando ligeramente las dos ruedas interiores a la curva, que son las que cuentan con menos carga, antes de que pierdan agarre.

La dirección progresiva de serie ya ofrece un reglaje deportivo en su configuración estándar: resulta más directa cuanto mayor es el ángulo de giro del volante. La asistencia electromecánica específica de estas versiones S filtra las posibles sacudidas en la dirección, pero transmite información de forma muy sobre el volante.

Todo ello hace que el S5 resulten especialmente ágil y maniobrable a baja velocidad, proporcionando a la vez una mayor estabilidad direccional a alta velocidad y entre curvas. A nivel de chasis no es un deportivo radical desde el punto de vista deportivo, más bien al contrario. Es suave, cómodo y silencioso, sobre todo en los modos de conducción más tranquilos.

Pero si seleccionas el programa Dynamic encuentras una faceta un poco más agresiva. En estos modos, por cierto, se integran la suspensión, la respuesta del motor, el funcionamiento de la tracción total, la asistencia de la dirección y, si lo equipa, como es el caso de este S5, también el diferencial trasero deportivo. En este modo disfrutas de una conducción intensa, con un sonido del motor artificial pero muy logrado que no da la sensación de estar a los mandos de un diésel.

Acelera con contundencia sobre todo desde velocidades medias, empujando con la contundencia de sus 700 Nm de par que te llevan a velocidades altísimas sin darte cuenta. En recorridos más virados se mueve con enorme sencillez, pegado sobre el asfalto y trazando con precisión la trayectoria manteniéndose en ella para salir disparado hacia la siguiente curva. El chasis transmite enorme confianza para sacar todo el partido al motor, y sintiendo en todo momento una gran fluidez en la conducción, menos exigente que la del Formentor VZ5.

FICHA TÉCNICA:

VERSIÓN S5 TDi quattro ; MOTOR Diésel, 6 cilindros en V, turbo + eléctrico de 11 CV; CILINDRADA 2.967 cm3; BATERÍA 0,5 kWh; POTENCIA CONJUNTA 341 CV; PAR MÁXIMO 700 Nm; CAMBIO Automático de 8 vel.; VELOCIDAD MÁXIMA 250 km/h;  ACELERACIÓN 0-100 KM/H 4,6 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 6,6 l/100 km; AUTONOMÍA 870 km; DIMENSIONES 4.705 / 1.846 / 1.368 mm; NEUMÁTICOS 255/35 R 19; PESO EN VACÍO 1.860 kg; MALETERO 410 l; PRECIO 83.200 €

CUPRA FORMENTOR VZ5

La ambiciosa apuesta de Seat por su marca deportiva Cupra no ha podido resultar más fructífera en todos los sentidos. Tanto comercialmente como en imagen de marca, la llegada de Cupra la disparado las más optimistas perspectivas, y en especial con su modelo Formentor. Y como colofón a este éxito, la variante más pretenciosa y deportiva llega en forma de Formentor VZ5, un modelo cargado de tecnología, prestaciones y exclusividad que se reflejan en sus 390 CV o en su sistema de tracción total.

Y es que Cupra ha conquistado una cuota de mercado importante con una filosofía marcada por un altísimo rendimiento y una deportividad que tiene en esta versión su opción más atractiva, sin caer en radicalidad alguna pues puede seguir utilizándose a diario con un más que razonable confort.

Además de ser el primer modelo diseñado y desarrollado en exclusiva por la marca, el Formentor ha encandilado al consumidor con su estética rompedora, siendo este VZ5 el modelo más potente que ha creado Seat en su historia. Sus cifras, sobre la base del motor 2.5 TSI de cinco cilindros, 390 CV y 480 Nm de par, cifras que le permiten pasar de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos y ofrecer una velocidad máxima de 250 km/h, limitada electrónicamente.

Para reforzar su carácter deportivo, el cambio DSG de doble embrague permite llegar al corte sin cambiar de marcha y utiliza diodos LED para indicar el cambio de velocidad, a lo que se le añade la tracción total 4Drive y un diferencial trasero con tecnología ‘Torque Splitter’, un control selectivo de par que reparte el mismo entre los ejes delantero y trasero y optimiza la tracción, que incluye incluso un modo Drift para disfrutar en el circuito con la máxima eficacia.

La imagen exterior es más agresiva que en el resto de la familia Formentor, algo que se comprueba en los detalles en fibra de carbono y en el color Copper. Además, monta un espectacular sistema de escape que produce un sonido embriagador con sus cuatro salidas verticales. Por lo que respecta al interior, sin duda los grandes protagonistas siguen siendo el cuadro de instrumentos digital de 10,25’’ y multiconfigurable con diseños desde muy deportivos a muy básicos, junto al cual cuenta con un sistema de info-entretenimiento con pantalla de 12” desde el que se manejan las diferentes soluciones de conectividad.

El toque final lo aportan tanto el volante con botones satelitales como los asientos opcionales CUPBucket de cuero y con una carcasa trasera de fibra de carbono, que aportan una gran sujeción del cuerpo y los hombros, y que se estrenan en este Formentor VZ5. Unos asientos perfectos para disfrutar de una conducción muy deportiva sobre trazados virados, donde ofrece un comportamiento muy efectivo aunque sin la precisión casi exagerada del S5. Y es que su personalidad SUV le deja una carrocería más elevada que se siente sobre todo en los cambios de apoyo.

Es una conducción algo más exigente que la del S5 pero también transmite más sensaciones al volante, sintiendo más los apoyos y exigiendo una mayor atención a la hora de ir cambiando de trayectoria de una curva a otra. El motor empuja mucho, pero lo hace sobre todo por encima de las 4.000 vueltas y estirándolo hasta las 7.000. Por debajo de ese régimen empuja de forma progresiva pero poco intensa, y por ello ofrece una doble cara de turismo deportivo cuando se le exige pero que permite viajar con un muy razonable confort y a buen ritmo con facilidad.

Eso sí, a diferencia del S5 diésel, los consumos en este VZ5 casi nunca son bajos, y te mueves por encima de los 10 litros incluso en una conducción suave a ritmos tranquilos. Para bajar de esa barrera de los diez litros hay que proponérselo y conducir con mucho tacto en el acelerador.

FICHA TÉCNICA:

VERSIÓN Formentor VZ5 2.5 TSi; MOTOR Gasolina, 5 cilindros, turbo; CILINDRADA 2.480 cm3; POTENCIA MÁXIMA 390 CV a 7.000 rpm; PAR MÁXIMO 480 Nm a 2.250; CAMBIO Automático de 7 vel.; VELOCIDAD MÁXIMA 250 km/h;  ACELERACIÓN 0-100 KM/H 4,2 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 9,8 l/100 km; AUTONOMÍA 550 km; DIMENSIONES 4.468 / 1.852 / 1.505 mm; NEUMÁTICOS 255/35 R 20; PESO EN VACÍO 1.683 kg; MALETERO 410 l; PRECIO 65.340 €

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