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Economía

Ryanair, Iberia Express y Norwegian negocian nuevos ERTE para miles de empleados

El sector aéreo se está blindando con el inicio de nuevos procedimientos ante la incertidumbre arrojada sobre el futuro de los ERTE de fuerza mayor a partir de octubre

Varias aerolíneas preparan nuevos Expedientes de Regulación Temporal de Empleo por causas productivas u organizativas (ERTE ETOP) en estos días ante la incertidumbre generada en torno a los ERTE por fuerza mayor y su futuro más allá del 30 de septiembre, según han notificado formalmente a los comités de empresas y ha podido saber Vozpópuli.

Además del de Iberia, comunicado este lunes por la compañía y que previsiblemente afectará a unos 5.000 trabajadores; fuentes sindicales informan de que su filial Iberia Express -con 573 empleados en plantilla- también negociará su propio ERTE ETOP de manera independiente para ajustarse a la capacidad, que todavía se aleja de los niveles prepandemia.

Además, las empresas de 'handling' de Ryanair (Azul Handling) y Norwegian (Red Handling) también han iniciado procedimientos para adaptar sus plantillas a la carga de trabajo prevista para los próximos meses, según ha podido saber Vozpópuli. Las empresas de asistencia en tierra de las dos aerolíneas low cost suman más de 1.700 empleados.

En la negociación de los nuevos ERTE que arrancará en los próximos días se concretará el porcentaje de afectación

La compañía del grupo Ryanair tiene una plantilla de unos 1.600 trabajadores, mientras que la división de Norwegian ronda los 120 empleados. Esta última empresa llegó a declararse en preconcurso de acreedores durante la pandemia. Por el momento se desconoce cuántos empleos se verán afectados por los nuevos ERTE, pues esto se decidirá en la negociación que arrancará en los próximos días.

Las dos empresas iniciaron sendos procedimientos el pasado jueves 16 de septiembre, un día antes que Iberia, con vistas al fin de los ERTE por fuerza mayor el 30 de septiembre. Desde esa comunicación, los trabajadores disponen de cinco días para constituir las mesas y una semana, como mínimo, para negociar, informan fuentes sindicales.

Pese a esto, las empresas confían en que la prórroga de los ERTE por fuerza mayor salga adelante, pero desconocen si se mantendrán las condiciones o si se introducirán cambios. "No podemos esperar a que a última hora digan que no, tenemos que anticiparnos para proteger el empleo", comentan desde una de las empresas.

Iberia plantea un ERTE para 5.000 trabajadores

Iberia ha sido la primera en hacer público este 'plan b' a la prórroga que negocian el Gobierno y los agentes sociales este martes. La aerolínea contaba con una plantilla de 15.166 empleados a cierre de 2020 (un 13% menos que en 2019, cuando alcanzaba los 17.500, por los empleados eventuales que no se contrataron), de los que se espera que un 30% puedan continuar afectados por este nuevo ERTE (cerca de 5.000).

Con este punto de partida, Iberia tendrá que negociar con los sindicatos cuántas personas se ven afectadas y en qué forma. En cualquier caso, la compañía buscará continuar con el modelo adoptado hasta el momento, en el que los afectados por ERTE no lo estaban al 100% sino en proporción a la reducción de capacidad.

El transporte aéreo es el tercer sector con más trabajadores en ERTE en relación a sus afiliados

Tras la comunicación, los sindicatos con representación en la principal aerolínea española están preparando una reunión para la previsible constitución de la comisión negociadora. No obstante, Iberia ha hecho público su interés por que la prórroga de los ERTE de fuerza mayor salga adelante e incluya a este sector especialmente dañado por la pandemia.

El transporte aéreo es el tercer sector con más trabajadores en ERTE en relación a sus afiliados: el 16% todavía están afectados por esta medida ante la caída de la actividad por el coronavirus, según los últimos datos de afiliación ofrecidos por la Seguridad Social del mes de agosto. 

Hay que recordar que aunque el tráfico aéreo ha crecido progresivamente durante el verano, hasta junio la actividad aérea estuvo frenada por los rebrotes y las restricciones a la movilidad, que continúan existiendo en algunos países. Así las cosas, los dos principales aeropuertos españoles (Barajas y El Prat) acabarán el año con la mitad de tráfico que en 2019 y las aerolíneas no esperan recuperar esos niveles de demanda hasta 2023.

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